31 julio 2024

EL RETORNO

 



Definitivamente no hay partida

cuando se usa billete de ida y vuelta.

Con la edad se reduce

la capacidad de marcha,

pero con tesón y tiempo por delante…



Es cuestión de echarle dedicación

y no pasar por alto los detalles,

mirar en lontananza panorámica,

entornar los ojos y pasarle el difumino

a los flecos y destellos molestos o innecesarios;

pero también, esmerarse en lo inmediato

acariciando los primeros planos con mimo.



En la edad reflexiva,

uno planifica más veces relecturas

que grandes innovaciones:

descubrir nuevos caminos

es una osadía para la que no me siento preparado.



Paladear más que morder,

rumiar más que atragantarme,

y siempre, siempre, siempre

con los bolsillos repletos de esperanza.

Deambular los caminos transitados

antes de entrar en trance,

y trascender antes de iniciar

el certero viaje sin retorno.

4 comentarios:

  1. Ese viaje sin retorno es lo único seguro que tenemos y deberíamos de estar preparados para cuando llegue. Saludos

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    1. Creo que la preparación no debe ser nada complicada. Con un poco de sencillez y algo de humildad creo que debe bastar.
      Un abrazo.

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  2. Si no se puede ir más rápido, se camina más lento. Yo ahora, salgo a la calle bien temprano y para cosas precisas. El calor que tenemos ahora, es bastante fuerte.
    Un abrazo.

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    1. Efectivamente conviene preservarse un poco de las horas centrales del día. Cuídate, Antonia.
      Un abrazo.

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