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11 enero 2025

NO RECUERDO

 



No recuerdo la fecha exacta;

aquel día,

en lugar de una marca en el calendario,

fue una herida en mi alma que jamás suturó.


Yo cruzaba campos de azur,

picoteaba algún que otro pistilo,

seleccionaba aromas y colores,

deshojaba sin convicción una margarita

sin acabar de creerme síes y noes.


No estoy seguro si fue una tarde de asueto

o quizás una intrépida escapatoria

la que me acercó al Edén.

Y allí estabas tú,

con tu sonrisa panorámica desbordada

y tu mirada subyugante,

con la que me hiciste súbdito.


Fue como un salir de la nada

para dar en la diana del Todo.


No recuerdo otra luz que la tuya,

no lo consigo, no puedo. Solo alcanzo

a achacarlo a la abducción

en la que desde entonces vivo.


No recuerdo la fecha, ni el método.

16 septiembre 2024

NOSTALGIA

 





Nostalgia. “Saudades” salina,

la mar merodeando

en los entresijos de la infantil memoria,

lanzando estachas

a la que asirse y revivir

la melodía de su balanceo

y los acordes rítmicos

con la elegancia estelar de las sirenas.


Un coro de gaviotas

vocinglero y cotilla

que ojea y divulga sus impresiones,

sin la constancia de la languidez

o el frenesí del pulso

que derrapa en cada ciaboga.


Nostalgia. La mar,

un sueño inoculado en el alma,

enquistado de por vida.

04 junio 2021

CONCEPTOS

 


 

Y de repente,

mientras uno se encuentra descansando,

la mente remonta el vuelo

para planear en la distancia

física o cronológica,

y se ve envuelta en conceptos

que evocan el pasado remoto

o el futuro inalcanzable.

 

Nostalgia: huella que no llegó a dejar cicatriz,

pero que al volver sobre sus pasos

hay algo que acaricia

y hay algo que también escuece.

 

Olvido: como el concepto de perdón,

una lucha de titanes que vuelven a escena

una y otra vez,

que se repone periódicamente

sin que logremos enterrarlo para siempre.

 

Ocaso: miedo a lo perenne,

a que a la tranquila estampa

no le suceda la correspondiente aurora

que vivifique la secuencia una vez más.

 

Infinito: donde se enraíza la esperanza,

de lo inalcanzable,

ese más allá donde lo imposible

se hace certeza para siempre.

 

Madre: donde la nostalgia se vivifica,

soslaya el perdón con el olvido para siempre,

su marcha es un ocaso sin aurora

y confío que el infinito me la devuelva

para gozarla eternamente.

22 marzo 2021

LAS SOMBRAS DE LA NOCHE

 


A las sombras de la noche

le he robado tu silueta,

esa que amalgamada a mí

se alberga a medio camino

entre lo que atesoro

y la cumbre de mis ensueños

blindada a la caja de mis recuerdos

y que con anhelo te busca sin pausa.

 

La tomé en mis manos

y vino a ser agua de manantial burbujeante,

vaporosa, caricia sin masa ni peso,

pura evanescencia

como copia literal de tu espíritu.

 

Al pasar bajo los naranjos

fuiste aroma sumatorio,

efluvio encaramado al azahar,

mar de confusiones.

Tronché la rama que me cegaba el paso

y puse distancia de invierno

al inminente rapto.

 

A las sombras de la noche

le hice un sigiloso rapto,

y escapé victorioso portando tu silueta

con la euforia victoriosa del botín,

pero llegada el alba

era tu blusa de organdí todo mi tesoro.

23 enero 2021

NO ESTRISTEZA

Fotografía de Escolástico Martín, "Tico"


 No. No es tristeza,

es nostalgia lastrada en el paladar;

es el eco musical de esas olas

que corretean al alba

cuando la mar y la playa son desierto infinito

y viven el mordiente inquieto

de una nueva jornada en ciernes.

Allá, en lo remoto,

una luz tamizada que quiere ser día,

pero que aún no ha sintonizado

con la invasión radiante

que todo lo deslumbra.

Por mi ventana se ha instalado una nube

que ciega mi entendimiento

y quizás vaya lastrada

de una aciaga herida que le arruga el alma.

Entorno los ojos y veo el brillo nácar

del agua que retrocede en el rebalaje,

que juega a ese leve ir y venir musical

de nata montada

con el que se columpia mi memoria.

No, No es tristeza,

es un estar ausente en un paraíso lejano.

 

15 diciembre 2020

OCASO


Acababa los días

en la dulce espera de todas las jornadas.

Se subía a un pequeño promontorio

y diluía su mirada en la distancia

como quien vislumbra lo soñado.

 

En sus ojos, añiles, rosados y violetas;

lentos y encaprichados atardeceres,

llenos de nostalgia y sobrecargados

de pegajosa melancolía.

 

Ni un adiós, ni una carta;

tan solo un mar inmenso

pronunciando inconmensurables las distancias:

silencio quedo, espera casi audible

como el murmullo de una caracola.

 

Ya noche cerrada,

abrochada en sí misma,

vigilaba las sombras a la luz de la luna

y volvía sobre sus pasos

con la ilusión y esperanza puestas

en un nuevo amanecer.

08 octubre 2020

PRESENCIA AUSENTE

Fotografía de Escolástico Martín, "Tico".

 

Aquí, en la distancia,

frente al mar que me vio crecer,

que me acompañó con su melodía

el despertar a la juventud;

ese cliché que es mi referente

para medir otros mares,

otros azules, otros grises

y los tonos anaranjados del poniente.

 

En la distancia te añoro,

te pienso, te escucho y me cimbreo

en lo acunado de tu ritmo.

 

Desperté a la vida

con tu panorámica en la ventana,

pero fue más tarde cuando llegaron

los baños furtivos y los autorizados.

 

Tú eres la medida, la dimensión

mediterránea del mapa físico

y de mi agrimensora mirada,

la muestra salina

de mi pertenencia al sur

y la visión, y la mirada

que apunta a Roma y a Atenas

como quien empapa su mente

en el silencio de una biblioteca.

 

No te hemos dado buen trato,

a pesar de tu generosidad,

pero resistes y te muestras

con todo tu esplendor

para conmoverme

tanto en presencia como en ausencia.

25 mayo 2020

ESTA ES MI TIERRA




Esta es mi tierra,
─la imagen de mi infancia─
la que labraron mis abuelos
y cultivó mi padre;
la que se derrama desde las escarpaduras
buscando el río y tras los molinos
corretea feliz hacia la mar.

Mi tierra, donde aprendí
el sabor amargo del aceite
vareando al olivo
y gateando los suelos en busca del fruto
las mañanas frías de invierno.

Mi tierra, la de la azada y el bieldo,
la abancalada y sus declives,
la del grano, la siembra, la bina y la cosecha;
la del naranjo en flor
y todavía más sabrosa en fruto;
la de las acequias y los turnos de riego,
la de las ciruelas y los duraznos,
la de los higos y las uvas en el rigor del verano
o la granada que se abría
como quien abre la boca ofreciendo besos.

Esta es mi tierra,
la que faldea la montaña
y baja reptando, enamorada de la mar,
y viene a entregarse dócilmente
en el abrazo salado de Marbella.

13 mayo 2020

ERA NOCHE CERRADA




Era noche cerrada y lóbrega,
el aire mecía blandamente
tu cabellera sobre mis hombros,
en simbiosis inaudita
que me mantenía en vela;
pululaba en lo oscuro un rumor
de ayes lastimeros como sombras opacas.

El tálamo estaba desnudo, frío,
acusaba tu ausencia
mientras me derramaba en el vacío.

Así, esperando que la aurora
me tintase el alma de esperanza,
creí escuchar el sonido de tus pasos
en el erial de mi espera.

Ninguna Señal. Ningún aliento
al que asirme en mi naufragio;
y sin saber si esta soledad enquistada
será fuego ardiente o mármol frío
de un abandono que cristaliza.

23 abril 2020

UN DÍA COMO EL ANTERIOR




Hasta los perros han enmudecido;
aguardan pacientes a que pase la lluvia
para sacar de paseo a su amo.
La calle son ecos vagos 
trompicando sobre los adoquines.
No circulan los coches.
De tarde en tarde los goznes de una puerta
siembran de  dudas la mañana;
es pronto para salir a comprar,
pero es la hora adecuada de la impaciencia.
Vuelve a llover. Ni los paraguas salen
a dar la bienvenida a la lluvia.
En medio de este enmudecimiento,
tan solo la lluvia es redoble en los cristales,
música desangelada y enojosa
en el secarral tedioso por el que navegamos.
Cae la tarde. Se aproximan las ocho
y en breve sonarán los primeros aplausos,
los de los impacientes; esos que, como los cuartos,
avisan de que ya es la hora
del encuentro vecinal entre balcones y ventanas.
Finalmente, crece el silencio
y se corren las cortinas de la noche
en el inasible aislamiento de un día como el anterior.

18 abril 2020

¿CANSADO DE CONFINAMIENTO?




¿Cansado de confinamiento?
Emprende un viaje, ¿quién te lo impide?
¿Acaso te aterra la aventura?

Atrévete a descubrir caminos,
a tantear senderos y veredas,
a darte de bruces con culturas,
etnias, grupos y muchedumbres
que te exciten las nuevas emociones,
tu espíritu y la entereza de tu cuerpo.

Échale imaginación y encuentra la salida,
que deshilen los barrotes
de esa reja sin forja que te apresa.

¿Qué te impide desplegar las alas como Ícaro,
ascender a las alturas y sortear riesgos?
Pon proa a Ítaca de la mano de Odiseo,
o como hiciera Jasón con la ayuda a Argos;
inspírate en Teseo y sal. Sal de ese confinamiento,
aunque para ello tengas que evadirte
de esta dura realidad que te atenaza.

09 enero 2020

VENCIDO EL SOL




Vencido el sol por los picos de occidente,
proyecta su sombra gris sobre el caserío
y Ojén se prepara sigiloso
al pasajero morir de cada noche.

Todavía ha de lucir claro en la cima,
allá donde la enhiesta cruz, si aún existe,
pero el bostezo de sombras alargadas
avanza sigilosa e incesante
adentrándose remisa por sus calles.

En esta añoranza remota del paisaje,
el paisanaje en el corcel de la memoria
como un todo indeleble, indeformable,
donde mi ayer se despereza hoy
y bosqueja, a grandes trazos,
el perfil remoto de mis días.

Muere el día en escala de grises
que al blancor vence,
muere el bullicio de juegos infantiles
y el ángel de la noche
─con su capa parda─
envuelve en un murmullo
la agitación que anida en mi pecho.

12 septiembre 2019

JAZZ, SOULD AND BLUES




Rasga el velo del local la atmósfera del saxo
de Charlie Parker y la música empapa
la noche de nostalgia en blanco y negro,
de mustia soledad que se ahoga
en copas sin fin y cigarrillos o sus derivados
que hacen irrespirable el ambiente.
En el viejo garito un puñado de americanos
vocacionales y parroquianos familiarizados
con el jazz, sould and blues, y la nocturnidad.
Por lo común, todos marcan el ritmo
de las baquetas sobre la caja,
con hombros, cuello, pies y con los gestos
oscilantes de sus cabezas que aprueban
y acompasan agitados.
Nadie ocupa la pista mínima de baile,
pero todos sabrían enjuiciar lo correcto;
por debajo y por encima de los sones
del aparato reproductor, conversaciones
anónimas, que se interfieren o se contagian
de la gestualidad del aforo.
El club es un hervidero forofo y apasionado,
donde se programa música en vivo
para el fin de semana.

01 septiembre 2019

NADA PASA




Nada pasa;
no pasa nada,
tan solo la hoja del calendario
con sus tachaduras
y con sus marcas.
Tampoco pasa el verano,
falta pasar las uvas por el pasero
y los higos también,
para poder maridarlos con las almendras
en bocado suculento.
Pasan los días
y pasan las vacaciones,
y pasará esta mustia desazón
de la mudanza.
Nada pasa;
tan sólo cambio el mar por el río,
donde iré deshojando mis sentimientos
con la esperanza
de que lleguen a la playa
y se encuentren en unidad
con los dejados.

09 diciembre 2018

DESDE MI OTOÑO




Desde mi otoño,
cualquier germen o tallo verde
es florida primavera,
un júbilo que se corresponde
más con lo soñado que con lo vivido.

En mi calendario, toda la semana es plana:
descoloridos los sábados
y soledad agudizada los domingos.

Cuando se acaba el calendario laboral,
algo uniforma los días
de una misma talla única;
tan sólo la visita de los nietos
acelera el ritmo del corazón
y la emoción es más eficaz que los genéricos.