Fotografía de Antonio Jesús Rueda Pérez
Si no escuchas la música del mar,
si miras al cielo y solo ves una panorámica
que difiere bien poco de la del día anterior,
que cielo y mar es un enmudecimiento sordo,
si para ti ningún significante transmite
el nuevo mensaje de cada instante,
aquello que trata de comunicarte
cada una de las cosas que te rodean;
si pasas por el parque o por cualquier camino
y no aprecias que amanecieron
nuevos y esperanzadores brotes verdes,
si te da igual que el río baje turbio
y sus aguas interpreten una melodía violenta
y lleva en el tumulto los enseres de una infravivienda,
si acaso no te llama la atención
que el mar escupa elementos extraños a su ser
y nadie ponga medidas para mirar con amor
la virginal y delicada naturaleza marina;
si los rayos de luz que hablan entre las nubes
no te conmueven, ¿qué se puede esperar de ti
cuando ves a un sin techo tratando de dormir
en el inhóspito y duro umbral de la nada?
difícil dilema en la era de la conexión, tan desconectado estamos de la realidad, pero también duele a quien quiera ayudar y no se deja, que prefieren aquella libertad, y no las obligaciones, olvidan de los deberes y solo quieren derechos...
ResponderEliminardifícil dilema nos impones, que uno tanto se sacrifica y algunos sin calle exime de toda responsabilidad y se la exige al estado...
me queda dando vuelta tu poema, que en entre rima refleja una realidad, pero solo pido una cosa, que la prensa no diga "le fallamos como sociedad", acá cada uno es responsable de sus actos, si yo me equivoco en una decisión no estaré culpando al vecino...
saludos!