Inapreciable, como la hoja
que sortea la escoba del
barredero
en tres pasadas consecutivas
y se queda prendida en la
llaga del pavimento:
ni suma ni resta: indiferencia
Exiguo, como nota marginal
que se pierde entre los
restos de la papelera
o vive en el borde esquivo
de un cajero,
limosneando descanso:
ni multiplica ni divide:
indiferencia.
Invisible, como el zurcido
de desamor
por debajo del forro de la
chaqueta
de la estatua humana que, en
su quietud,
pasa por mobiliario urbano:
no es olvido social, es
indiferencia.