31 diciembre 2012

DESAPARECIDOS EN EL 2012


Un breve repaso por el balance de la prensa de estos días nos da idea de lo efímera que es la gloria terrena y sus pompas. El simple ejercicio de la vida se ha llevado para siempre a tres de los padres de la Constitución Española de 1978: Manuel Fraga, Santiago Carrillo y Gregorio Peces-Barba. No creo que fueran ellos a quienes necesitamos ahora, además de ser imposible, pero sí a gente que como ellos tuvieran esa misma convicción de que tenemos la necesidad de conseguir acuerdos para hacer de la vida un lugar de convivencia y no de confrontación.

Los cómicos y la farándula también han perdido a un número considerable de ellos, empezando por el director Gustavo Pérez Puig, y siendo por actores como Quique CamoirasPaco ValladaresPepe Rubio, Juan Luis Galiardo, Carlos Larrañaga, Sancho Gracia, Tony Leblancc, Emilio Aragón, Miliki, sin que por ello haya quedado la escena baldía y lacrimógena en su orfandad. De vez en cuando, programarán algunas de sus películas en televisión y serán recordados con algo de nostalgia por algunos de sus coetáneos, pero eso es todo: una efemérides de una tarde de sobremesa.

En los anales de la historia quedará Neil Armstrong como el primer hombre que puso el pie en la luna, pero simplemente con una breve reseña en los libros de texto, algo así como lo que hoy representa Colón, Viriato o cualquier otro personaje del pasado. De forma similar, los textos de Carlos Fuentes y Agustín García Calvo les harán presentes en las bibliotecas, pero no a ellos, sino a lo imperecedero de ellos, a sus obras; así como le ocurrirá a Antonio Mingote en las hemerotecas, donde sólo está la chispa de su trazo ocurrente.

A Enrique de Melchor, como le sucedió a su padre, apenas le recordarán algunos flamencos durante un periodo bastante corto; mientras que a José Guardiola ya lo habíamos olvidado en vida. A Juan Carlos Calderón le ha de suceder tres cuartos de lo mismo: ya no lo canta Mocedades, ni Camilo Sesto, ni Nino Bravo, ni Paloma San Basilio…  pronto será silencio. Sólo Chavela Vargas; sólo La llorona, nos dará motivos para seguir recordándola, dado que el panorama no está para otra cosa que para seguir llorando.



30 diciembre 2012

FUE EN GRANADA


A mi virtual amigo, Emilio Manuel

Fue en Granada. Cuando uno ha estado alguna vez en Granada, se marcha con el deseo de volver y termina programando ese soñado retorno antes o después. Habíamos hecho reserva por Internet para visitar la Alhambra. Si uno va a Granada y no visita la Alhambra y no se ha dejado cantar con el soniquete del agua de las acequias del Generalife, uno tiene la sensación de haber estado en cualquier lugar, pero no en Granada. Cuando íbamos en el tren pensé que tendría que haber avisado a Emilio Manuel, pero ahora era demasiado tarde y tan solo nos conocemos más que de leer los blogs respectivos y los comentarios del otro en los blogs amigos. Por otra parte, él es más visceral que yo y no sé hasta qué punto…

Granada es el Darro y el Genil, es Sierra Nevada y la Vega, es Albaicín y sus cármenes, son los suspiros de luna verde de Federico, la melancolía de Ganivet y la imaginación enredada a los arabescos del estuco de Irving; y es tapeo, un excelente tapeo. Nos tomamos un respiro disfrutando un café frente a la Fuente del Triunfo. Caía la tarde y pensamos en tomar un taxi que nos subiera al Sacromonte cuando me encontré con una cara que asociaba a un avatar; nos miramos preguntándonos en silencio y el tiempo pareció detenerse. “¿Eres Paco?” —terminó preguntándome—; lo soy, ¿Emilio?

Oleo sobre lienzo: Bote, botella y granada, de Francisco Espada

A partir de ese momento dejé de interesarme por la ciudad y hablamos sin parar mientras deambulábamos. Tomamos más tapas, paseamos por distintos ámbitos de la ciudad pero, desde que nos encontramos, todo pasó a ser un mero decorado al que no prestábamos atención. Insistió una y otra vez hasta que nos llevó a su casa. No recuerdo detalles, tan sólo que, como en la casa de todos los abuelos, hay fotografías de la chiquillería por todos lados luciendo sonrisas. Me dijo sus nombres, pero no puedo recordarlos. Cuando quisimos regresarnos al hotel sacó una botella de Cardhu que guardaba para una ocasión muy especial, de la que tuve la sensación de estar bebiendo durante los doce años de su envejecimiento. Enfrentamos opiniones, discutimos, él trataba de llevar siempre el agua a su molino y yo no me dejaba embaucar por su palabrería: el whisky es un freno para el discurso, pero al tiempo un inhibidor para expresarse libremente. A vaya usted a saber a qué hora, reconoció que no estaba en condiciones de sacar su coche del garaje y llevarnos al hotel. Nos pidió un taxi y salió a despedirnos. Cuando cerré la puerta del taxi, sentí como si el golpe me lo hubieran dado en la cabeza. El resto es nebulosa.

29 diciembre 2012

PLAZA DE SAN LORENZO

Plaza y parroquia de San Lorenzo


El invierno ha dejado gélido al ramaje:
las hojas, ocres desvaídos,
languideciendo de penuria
son ausencia de clorofila
que olvida su arrogancia
con la tristeza y la pulsión
de un penitente.
Arrecia el viento;
hace una coca en el campanario
y varea las ramas
hasta desnudarlas impúdicas;
en el suelo,
una alfombra vegetal
llora gemidos tristes
bajo las pisadas
de quienes peregrinan cada viernes
ante el portentoso Gran Poder:
hasta las palomas han buscado refugio.

28 diciembre 2012

LOS SANTOS INOC ENTES


Esta celebración tiene su origen en la leyenda de la matanza de niños que ordenó el rey Herodes con la intención de asesinar al Niño Jesús. Posteriormente, en la Edad Media,  y con origen pagano, se celebran unas fiestas como preludio del Carnaval donde el desenfreno, el jolgorio y la parranda se convierten en protagonistas en medio de una gran permisividad, donde, de haberlas, las culpas no recaían en nadie. De ahí hemos terminado en esta mixtura del presente donde la broma, a veces de mal gusto, se ha instalado en la sociedad y preferentemente en los medios de comunicación.


Hoy, por tanto, aparecerán titulares bien sorprendentes que tienen más de chacota que visos de verosimilitud, precisamente donde la gente sin gracia cree hacer el chiste o la chirigota ocurrente. La noticia que me gustaría leer y no mañana sino pasado, para que no sea una burla, es que el gobierno negocia con todo el arco político medidas serias, contundentes y estables para sacarnos de la crisis. Empiezo a estar harto de que cada cambio de gobierno sea un golpe de timón a la enseñanza y que no tengamos un horizonte claro y duradero de hacia dónde caminar.

No se están tomando en serio la fuga de cerebros que, tras haber recibido la formación en las universidades españolas están tomando destinos varios a cualquier parte del mundo donde son recibidos con palmas y olivas. Imagínense, cubrir un puesto de alta cualificación con alguien en quien no se ha invertido nada para formarle. ¡Claro que les reciben bien, claro que están encantados! Mientras, aquí van quedando los mediocres para seguir engrosando las litas del paro y negando las posibilidades a medio plazo de que la situación pueda mejorar. Si consideramos la educación un gasto y no una inversión, si seguimos dejando que inventen ellos, ¿qué futuro nos espera?

La última inocentada puede ir por esos apuntes que a modo de globo sonda ya se han filtrado a la sociedad: una nueva subida de la electricidad  —he olvidado cuántas van—, una nueva subida de IVA al 23%, y represión, represión para quienes hagan huelga tratando de defender su status quo. De forma paralela a la privatización de la sanidad pública, van apareciendo nuevas sociedades del ámbito de la salud para llenar el hueco que se produzca, posiblemente por aquello de los vasos comunicantes. Santos no somos, pero inocentes tampoco.

27 diciembre 2012

SEVILLA EN NAVIDAD

Unas imágenes, tan solo una imágenes nocturnas de la ciudad de Sevilla y el alumbrado de Navidad.













Sobre la fachada posterior del Ayuntamiento, en la Plaza de San Francisco, 
un bello espectáculo de luz y sonido.
















26 diciembre 2012

ENCUENTRO


Hoy me he encontrado en la calle con Jesucristo, pero ya no era el Niño de anteanoche envuelto en pañales, sino que iba agarrado a su cruz y era mujer. Lloraba. Estaba sentada en el umbral de una casa y encogida, aterida de frío. Hace días que sabía que estaba de nuevo en la calle y ese encuentro iba a producirse de un momento a otro; lo deseaba y lo temía. Estaba acompañada por otra mujer de una edad y circunstancias aparentes, también ajada por la vida; compartían una litrona. Cuando vio que me acercaba escondió la botella de cerveza, pero no le recriminé nada. “Te he buscado” —me dijo en tono suplicante. Yo también la había buscado sin éxito desde hace unos días, cuando la directora del centro de acogida me llamó para darme la noticia.

Mujer llorando - Picasso
Rocío es alcohólica. Lo es desde tiempos remotos, cuando lo compatibilizaba con otras sustancias que le destruyeron. Los servicios sociales le retiró a las dos hijas y le encargaron el cuidado a su madre, la anciana abuela. Llora continuamente, a veces de emoción y casi siempre de pena. Hace sólo un mes que visité el centro y la encontré muy recuperada, pero la calle es el peor de los enemigos, si bien su peor enemigo es ella misma. Me pidió tabaco, pero en verdad que lo que realmente necesitaba era comer. Hace un mes estaba casi espléndida, pero la calle le sienta muy mal y la devuelve a su lugar de origen, al mismo ambiente, a sus colegas de toda la mala vida.

Todo marchaba a pasos moderadamente positivos, me habían dicho en el centro. Allí también lloraba; llora siempre. Tal vez no sepa ella por qué llora, pero lo hace. Siempre está ansiosa y pide pastillas para todo. “Le dan mi medicación a otros y tengo que conformarme con media dosis de diazepam cuando el médico me ha recetado 3 al día.” Ella necesita estar permanentemente ausente y ni siquiera lo sabe. Cuando alguien sale del centro, su plaza es ocupada de inmediato por el primero de la lista de espera o por el caso más urgente. Ha cerrado la puerta de forma voluntaria tomando la iniciativa de marcharse. No hay plazas para todos y en la calle no hay curación posible, sino deterioro hasta la destrucción total. En el centro me dicen que puede volver, pero no al internado sino a la estancia diurna; no es suficiente pero recibiría los cuidados que le son imprescindibles. Ella no quiere rebajarse porque entiende que es una humillación llamar después de haber dado un portazo: todas las personas tienen su prurito y su orgullo. No sé cómo consolarla; sobre la mejilla derecha le ha quedado un trozo de celulosa del pañuelo. Le entrego una bolsa con leche, latas de conservas, pan y galletas. Me mira con cariño y prometo volver a buscarla. Los servicios sociales mantienen en sus nóminas recortadas técnicos que no cuentan con medios para ayudar a estos Ecce Homos, cada día más numerosos, como desechos humanos por plazas y calles.

25 diciembre 2012

OS TRAIGO UNA BUENA NOTICIA


«No temáis, os traigo una buena noticia, una gran alegría para todo el pueblo: hoy, en la ciudad de David, os ha nacido un Salvador: el Mesías, el Señor. Y aquí tenéis la señal: encontraréis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre.»

Nacimiento en el altar mayor de la parroquia de San Lorenzo - Sevilla
Nosotros, creyentes y no creyente, celebramos la Navidad comiendo y bebiendo, derrochando, pero él vino en la humildad y en la sencillez suprema. Nació en las afuera de la ciudad, en un establo, y fue acostado en el lugar donde comen los animales. El pueblo esperaba un nuevo rey David fuerte y victorioso que le liberara de todos sus enemigos, pero su reinado no era de este mundo.

Que el Niño Dios proteja y bendiga a todos los lectores de este blog y que con su misericordia les conceda todos sus anhelos. «Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor.»

24 diciembre 2012

ESTA NOCHE ES NOCHEBUENA Y MAÑANA NAVIDAD


A veces la publicidad, con su persuasiva insistencia, convierte su cantinela en toda una experiencia de vida. Eso es precisamente lo que en España ha pasado con el turrón El Almendro, que a base de una y otra campaña desde hace casi tiempo inmemorial, ha logrado que la Navidad, el regreso a casa de los seres queridos y sentirnos apiñados y compartiendo mesa y mantel, por medio del turrón, sean una misma cosa.


La Navidad es para algunos el nacimiento en la carne del mismo Dios hecho niño, la segunda persona de la Santísima Trinidad, un misterio que como todos es imposible razonar y que unos creen y otros no, aunque todos nos removemos en los sentimientos familiares, como si la familia de Nazaret infundiera y contagiara en nosotros ese halo de misterio que nos persuade a estar juntos, a estrechar lazos y en muchas ocasiones a reconciliarnos con aquellos de los que nos sentíamos alejados. Nadie gusta para sí la soledad de Belén y es frecuente, no sólo el regreso a la casa familiar de los miembros alejados, sino también la invitación a nuestra mesa de aquellos amigos o conocidos que sabemos que tendrían que cenar solos. Ojalá ese espíritu de la Navidad no fuera algo efímero, así la vida sería mucho más placentera.


Hace un mes, Marina del Corral, secretaria general de Inmigración y Emigración, me desveló el secreto de porqué mi hijo Carlos se ha marchado a más de 5 horas de avión y casi 40 grados de diferencia de temperatura: la emigración de jóvenes españoles al extranjero no se debe sólo a la crisis económica sino a otros factores entre los que está el impulso aventurero de la juventud. No digo que para su madre y para mí haya venido a tranquilizarnos la afirmación de este alto cargo, pero siempre es consolador conocer la verdad de las cosas. Lo cierto es que como dice la publicidad, “vuelve a casa vuelve, vuelve por Navidad”. Y llegó nuestro hijo, por eso canto a ritmo de villancico: "Esta noche es Nochebuena y mañana Navidad, saca la bota, María, que me voy a emborrachar".

¡Feliz Navidad a todos, también a la Sra. del Corral!

23 diciembre 2012

NÁ DE NÁ


El día 21 de diciembre iba a ser el fin del mundo, según la predicción maya; el día 22 me iba a tocar la lotería, según mi esperanzada corazonada, pero ni lo uno ni lo otro. Hoy es día de acción de gracias por lo primero y también por lo segundo, porque no podemos imaginar cómo cambia la vida el dinero a las personas que lo reciben así, de sopetón.


Hace mucho que el hombre se dedica a vaticinar el fin del mundo y vamos superándolo de batacazo en batacazo sin que nada suceda. Lo bueno que tiene profetizar sobre el fin del mundo es que luego nadie reclama nada al profeta y ni siquiera sirve de burla, sino que lo olvidamos y esperamos a la siguiente profecía. En mi corto entender, todo esto tiene mucho que ver con el ansia del hombre por conocer el mañana, ese en el que solemos descuidar el momento presente proyectándonos vanamente hacia adelante. Como digo, en unos días nadie recordará el fracasado pronóstico sobre el 21 de diciembre de 2012 y todos agradecerán el error de esa civilización extinta.

Un poco más doloroso es no haber sacado un sustancioso premio de la lotería, con la que habría ayudado a mis hijos con sus respectivas hipotecas. No soy jugador de ningún tipo de apuestas y semana tras semana, mes a mes, paso de puntillas sobre toda suerte de sorteos sin participan en ninguno de ellos, aunque por tradición, llegado este tiempo, suelo cambiar participaciones de lotería de Navidad con un buen puñado de amigos, algo que viene sucediendo desde hace muchos años. Los envíos van acompañados de su correspondiente christmas, con lo cual se cumple la doble función en un sencillo y cordial acto; pero como digo, ná de ná.


Y como siempre es oportuno encontrar la horma adecuada para cada zapato, hoy, después de no haber acertado con la lotería, incluso doy gracias porque no ha venido a cambiarme la vida. Hace ya muchos años, un amigo tuvo la mala suerte de conseguir un premio millonario. Vivía con su esposa en un apartamento alquilado y les venía de perlas para alcanzar una vida económicamente tras tranquila y segura. Antes de que el premio se hubiera hecho efectivo en la cuenta bancaria ya se habían gastado cada uno de ellos un octavo, lo que significa que en el momento del cobro ya sólo disponían del 75%. En aquella época, en la modesta periferia de la ciudad, se podía comprar una buena vivienda al contado por la mitad del premio, con lo cual habrían tenido todavía un cuarto a disposición, pero optaron por una zona elegante donde el piso pasaba del duplo del premio conseguido. El resultado, no mucho tiempo después, fue tan calamitoso que acabaron divorciados y endeudados; así que, como digo, ná de ná, por lo que me veo en la necesidad de dar gracias por seguir trampeando como hasta ahora. ¡Virgencita, déjame como estoy!

22 diciembre 2012

ASFIXIA



Desinhibida,
repantingada en una silla
de plástico rojo con logo de refresco
en la terraza de un bar;
apoyados los pies
en la silla de enfrente,
soltaba vaharadas de humo
de un cigarrillo atrevido
que fumaba con deleite;
en cada bocanada
aspiraba el néctar de lo prohibido
y se desentendía del cosmos
y de paso de sí misma
en presencia de quienes miraban sin ver;
de vez en cuando se atusaba el pelo
con la peina de sus dedos,
articulados en formación de a diez;
en su entorno bullía la vida,
pero ella estaba en su cosmogonía
ahumando las desdichas
para escapar de su asfixia.

21 diciembre 2012

SENTENCIAS-5


 No nos merecemos los gobernantes que tenemos: que se lo queden sus fieles.


Los lamentos no cambiarán el estado de las cosas, sino la acción que todavía no has emprendido.

La fe es una capa para las noches de desamparo.

Trató de demostrar el infinito con los números y se eternizó.

El silencio es la disertación más adecuada cuando nada nuevo se tiene que decir.

Quien no sabe guardar un secreto no encontrará jamás aposento en casa ajena.

La grandeza tiene siempre un rival por descubrir; la sencillez es en sí un gran descubrimiento.

El infinitivo es potencial, el pasado historia y el futuro impredecible.

Se estima más lo que se ansía que lo que se posee.

Todas las cosas que admiramos pueden ser razonadas, pero no así el amor que no se ajusta a normas.

Ni la educación ni la milicia se entienden con la libertad, sino con la obediencia y las normas; por eso los padres y los coroneles no entienden de amistad.

El divorcio es el fracaso de la relación de pareja; cuando el divorcio se generaliza es la sociedad la que está fracasando.

Los arquitectos lo saben todo sobre los estilos arquitectónicos, pero proyectan espacios raquíticos con líneas rectas.

No vuelan los ángeles por la ingravidez, sino por ser espíritus puros.

20 diciembre 2012

ABANDONO



Venía envuelta en un tul
violáceo, con el rictus amargo
del desamparo; era festivo
y caminaba descoordinada
al repique de campanas
que invitaban a lo lúdico.
En su deambular, desvelaba
desventura, desolación y desgana;
la mirada perdida
en el horizonte incógnito
en el que se había instalado
como despreciando lo circundante;
no pronunció palabra,
mas en sus ojos la llama mortecina,
esa que se desvanece siempre
cuando el amor se echa en otros brazos.

19 diciembre 2012

MEMORIA



Se vistió el invierno su capa de armiño:
los días cortos, las noche extensas,
frías y casi eternas las madrugadas;
desolación en los olivos
con su cetrino verde desnudo,
prestos al acerado filo del hacha
que poda y encauza
los vástagos que se elevan.
En el corral, perdura el llanto
del pavo que dejó de moquear
en Navidad, cuando fue cebado
de pasas, tocino, miga de pan y piñones.
En el huerto, la parálisis gélida
que todo lo adormece hasta decir basta,
y, asomado a la tapia del corral,
el almendro se viste con manto rosado
silabeando una renovación
que ya se adivina y enamora.
En la buhardilla aún quedan higos, granadas
almendras por partir y la arboleda
ya promete una nueva cosecha.
La abuela abana el fuego,
y en el crepitar de las llamas
la abundancia de un cálido rescoldo
gestiona ascuas para la mesa camilla.
Toda la infancia bulle
en los anaqueles de la memoria,

18 diciembre 2012

ESPERANZA


Esperanza: "estado del ánimo en el cual se nos presenta como posible lo que deseamos". Así es como define el diccionario en su primera acepción esta palabra que ahora muchos no saben ni siquiera articular, que las circunstancias adversas del presente no les permiten conjugar. Esperar es una actitud pasiva, un estado de quietud de quien aguarda pacientemente a que acontezcan las cosas; mientras que la esperanza es una cualidad positiva de quien ya casi disfruta aquello en lo que con certeza espera y confía.

Hoy se celebra el día de la Esperanza. La Virgen ya está cumplida y está a punto de parir. Ella no espera, sino que está llena de esperanza, pues se está cumpliendo todo aquello que le dijo el ángel. Pero son muchas las mujeres, muchas las personas que viven en desesperanza el día de hoy y que ni siquiera se atreven a pensar en el de mañana, porque para ellos ya es un reto superar el día presente.

Felicidades, Esperanza, en el día de tu onomástica.

Este año, a fuerza de recortes, todo está más comedido, pero aun somos muchos los que hacemos de este tiempo un tótem al consumo y centramos la Navidad en la frivolidad de lo superfluo, sin sentido trascendente y sin sentido alguno de la solidaridad; mientras, un número creciente de conciudadanos nuestros han puesto su esperanza en recibir algunos alimentos y sueñan con un trabajo cada día más imposible. Ya son millones de personas las que han dejado de esperar, las que han dejado de confiar en los dirigentes y hasta en sus vecinos. Mientras unos vamos pertrechados de proyectos y tarjeta de crédito a los grandes almacenes, otros llegan a Ikea con la esperanza de dar de comer a la familia con lo que en otro tiempo era una propina más bien escasa.

No quisiera mostrarme melodramático ni derrotista, pero son tantos los derrotados por este sistema que nos ha llevado a la hecatombe, que las luces de Navidad parecen este año más opacas, más grises y menos confiadas, pero siempre esperanzadas. Quienes podemos pensar en una adecuada mesa de Navidad estamos dilucidando qué poner y cómo hacerlo; aquellos que nada tienen, que todo lo esperan en la esperanza de un viraje que les oriente el rumbo o de manos generosas, tienen puesta su fe y su esperanza en recuperar la dignidad perdida. ¡Que se cumplan todos los anhelos de aquellos que tienen esperanza!

*   Esperanza es una joven solidaria que pone su saber y su tiempo al servicio de los más desfavorecidos.

17 diciembre 2012

CENA DE NAVIDAD

Vive sencillamente para que, sencillamente, otros puedan vivir.

No era cuestión de medios, sino de actitud. Había anunciado a los suyos que este año se ocuparía él de hacer la cena de Navidad, lo que todos tradujeron por algo excepcional, como así sería: “yo me ocuparé también de la compra” —añadió. Pasaron los días y fue haciendo acopio de cuanta información pudo llegar a sus manos. Las grandes superficies se prodigan en estos días en folletos bien ilustrados con recetas suculentas para bolsillos con propensión al dispendio; los medios de comunicación no se quedan a la zaga y hasta las revistas de papel cuché dan ideas de cómo adornar la mesa y toda la estancia.

El hijo mayor le dijo: “papá, que no falte el cordero”, y responde la hija: “yo prefiero los frutos de mar” “¿Y tú no vas a decir nada?” —le preguntó a la esposa— Ella lo miró esforzándose por mostrarle ternura, pero en su rictus había una sentencia impronunciada que es mejor omitir; finalmente apuntó: “Tú ya sabes cuales son las preferencias de mi madre, y ¡está tan mayor y delicada…!”

Él puso toda su confianza en una página de garantía, donde la mesa se sirve con mucho amor y las recetas vienen explicadas desde el inicio hasta la presentación y bien ilustradas: Para hincar el diente. Todos se habían vestido elegantemente, acorde con el día tan señalado. Como sonido ambiente, los villancicos de toda la vida sugiriendo los andares de la marimorena, mientras los peces beben en el río. El se había inspirado en esa estupenda guía gastronómica que elaboran las hermanas Katy y María Sánchez, al tiempo que había puesto la mente en el lema de Cárita para las circunstancias presentes: Vive sencillamente para que, sencillamente, otros puedan vivir. Con todo ello, logró sorprender a los suyos sirviéndoles Sirena de corral sobre perifollo verde


¡Feliz Navidad a todos mis lectores!

16 diciembre 2012

DESDE EL PUENTE

Puente de la Barqueta - Sevilla


Ven, mi amor, tomémonos las manos,
miremos la vida desde el puente,
sin miedo, muy juntos, agarraditos,
contemplemos el paso de los días
y cómo manan sin cesar hacia la mar
—que es el morir—
Curso arriba, tu niñez y la mía,
tus trenzas y la pelusilla de mi bigote
con ansias del primer afeitado;
el rubor del primer beso
y nuestras manos temblorosas;
más tarde, tu blancor radiante
vestida de novia con ramillete de gladiolos
y el candor de los pocos años
dibujando proyectos
que fueron deshojando los días;
como en cestillos calafateados,
llegaron nuestros hijos
y nos desdoblamos hacia ellos
demorando el rigor de nuestros latidos
para palpitar por ellos, sin abandonarnos,
hasta que dejaron el nido vacío.
Amémonos, mi amor, viendo pasar
el curso de la vida en las páginas líquidas
del río en su caminar. No sueltes mi mano.
Estamos próximos a la desembocadura
y se han atemperado los impulsos,
pero amémonos parsimoniosamente
con besos con vocación de eternidad.
Como el río en su fluir, todo es un tránsito
donde nada se repite. Todo es nuevo.
En tanto nos abrazamos con el mar,
estrenemos besos, caricias y arrumacos
hasta desgastarnos el tacto y la saliva
viendo correr el río desde el puente.

15 diciembre 2012

TEMPERAMENTO



Dices que no cambias,
mas tu temperamento se mece
como la brisa en el trigal
y crea olas de panes pretéritos
o migajas ácimas e incomestibles;
como la luna, tienes una suerte de arreboles
que se interpolan en el segmento de tus días,
y emborronan la sonrisa
con hilvanaduras de cólera endémica
que deben salirte de las estrecheces del alma
y lo mismo pides guerra que armisticio.
Me culpas, siempre me culpas;
como el paisaje se asoma a nuestra mirada
con tonos luminosos
o con endechas grises de sombras opacas,
cuando las nubes tiñen el cielo
con pinceladas cenicientas,
así tú, amada mía, vas
de la aromática paz a la cólera,
al socaire de la brisa que corre cada día.

14 diciembre 2012

JOSÉ ANTONIO TAMAYO


Mi paisano y amigo José Antonio Tamayo tiene hoy una cita en el quirófano. Su experiencia quirúrgica es muy dilatada y tan larga y continuada como una reata. Lleva muchos años en una silla de ruedas, pero ni los riscos ni los valles, ni las veredas ni el campo a través, son inconvenientes para su peripecia manejando la silla de ruedas eléctrica y la cámara fotográficas. Como toda persona curtida en el sufrimiento, afronta con ilusión este ofrecimiento a la sajadura del bisturí, del que espera salir en mejores condiciones de las que entra.


Hoy hago guardia en el antequirófano, al igual que Pitu, a la espera de que todo salga bien, de que el médico se despoje de su barbuquejo verde liberando la boca para emitir un juicio satisfactorio. Una anestesia general es una muerte transitoria con esperanza de resurrección y todos los tuyos te esperan, José Antonio, te esperamos. Mientras te llega el sueño, mientras ofreces tu cuerpo dócil a la ciencia médica, me quedo orando por ti con la esperanza de que en breve habrá pasado todo y tu recuperación será inmediata, satisfactoria y provechosa.

En espera de tu pronto despertar, desde la fe confiada y al filo de tu padecer, de dejo este fuerte abrazo.

13 diciembre 2012

OBJETIVO


Su objetivo era ser feliz y puso todo su empeño en lograrlo, aunque no sabía ni dónde ni cómo buscarla. Preguntó a un anciano bonachón y taciturno que encontró en una solana a la salida del pueblo y éste le respondió: “ser feliz consiste simplemente en ser feliz”. Pensó que ya no estaría en sus cabales y no se lo tomó en cuenta. Se puso en camino y se dedicó a buscar la felicidad con ahínco noche y día. En una venta, se topó con un grupo de jóvenes que comían y bebían, cantaban y gozaban y pensó que no le había sido muy costoso descubrir la felicidad. Se sumó a ellos y hubo un momento que perdió la noción y cuando despertó estaba solo, tenía un fortísimo dolor de cabeza y unas nauseas monumentales que le levantaban el estómago.


No, no estaba allí la felicidad. Se afanó en trabajar para ganar mucho dinero y sólo lograba lo primero, ya que hacía muchas horas, pero los ingresos eran insuficientes y no podía comprar todo aquello que le apetecía. Llamó la fortuna a su puerta con un sustancioso premio de lotería y se sintió poderoso; llenó su vida de caprichos y gastaba a manos llenas palpando la felicidad por primera vez en sus días búsqueda. Pronto se vio rodeado de amigos que le jaleaban y exponían sus necesidades, a los que atendía con generosidad, hasta que se dio cuenta que por ese camino la suya sería efímera y se hizo muy huraño, por lo que volvió a quedarse solo. Tenía mucho, pero se sentía un desgraciado.

Se compró un auto de gran cilindrada con asientos de cuero, pero se sentía solo. Alguien se le acercó y le ofreció una papelina de coca y al instante se llenó de energías y con una vitalidad antes desconocida. Lo hizo hábito y volvió a tener en torno suyo a una camarilla de colegas que esnifaban del dinero que le iba quedando. Acabó malvendiendo el coche y durmiendo en el cajero de un banco. Volvía a estar solo. Necesitaba una mano que le sacase del pozo y se sentía muy solo. No le quedaban lágrimas, a pesar de que nunca había llorado, y hasta había olvidado su búsqueda. Los guardias le echaron de las calles una y otra vez y acabó en un emplazamiento chabolista en el extrarradio de la ciudad. Cuando despertó, no sentía nada, ni siquiera hambre. Estaba en posición fetal y tapado con un trozo de manta listada bajo una chapa de uralita que repiqueteaba con énfasis las gotas de lluvia. En el fuego una olla soltaba vaporadas y un aroma que no supo reconocer. Era media mañana y había dejado de llover. En la calle, media docena de niños descalzos chapoteaban los charcos y hacían monigotes de barro entre carcajadas. “Niños, ¿Quién me trajo aquí?” “Mis padres”, —contestó el mayor. “¿Y dónde están tu padres?” “Buscando chatarras”. Recordó que había salido buscando la felicidad y comprendió al fin las palabras de aquel anciano taciturno y bonachón: “ser feliz consiste simplemente en ser feliz”.

12 diciembre 2012

LA VOZ DE SU AMO


No tiene nombre o no lo es conocido, que para el caso viene a ser lo mismo. Echado sobre el frío hormigón y sin fuerzas ni voluntad para aproximarse a los rayos del sol que asoman por la esquina; hay languidez en su mirada y un cierto descuido atento a la misericordia en la que no confía pero espera. En la vertical de su costado, descuido, humedad y repintadas añejas que hablan de un presente decadente y de cambios pretéritos de colorido o de modas; en la línea de encuentro con el paramento horizontal, una grieta abierta de suspiros por donde escapan los lamentos de fugas anteriores y abismos que llevan al caos: desolación.

Fotografía de Rafa Santander

El medio rural ha sido siempre la luz para los pasos ciegos y el rescoldo fraterno entre iguales que se ayudan a sortear los baches, pero cercenado el hilo que conecta con la esperanza, ajada la tierra de deterioros suplementarios nunca resueltos, la vida en un hálito mortecino que canta un gorigori introspectivo camino a la desaparición.

Dicen que el amo termina pareciéndose a su perro, pero es posible que esa fidelidad de los caninos sea recíproca y la imagen del perro sea a su vez el reflejo sensible de la situación que atraviesa su amo. ¿Obedecerá la tristeza de este perro al estado de ánimo de su dueño? ¿Estamos tal vez asistiendo a la contemplación de la lastimera voz de su amo?

11 diciembre 2012

PROMESA



Era el otoño;
hacía fresco y no estaba despejado
cuando se descompuso la paleta
y escapó del estudio sin rumbo fijo;
acabó
desplomándose desde las alturas
en caída libre y desordenada;
tintó las nubes
con el cromatismo del arcoiris
y todos pensaron que el Creador
había despertado del sueño
del séptimo día
y volvía a usar los pinceles
esa mañana otoñal
para plasmar un paisaje irrepetible
donde la vida volvía a ser promesa.

10 diciembre 2012

TORNAPEÓN


Nací en un ambiente rural donde cada quien tenía una parcelita de subsistencia que había que arrancarle a la tierra con duras fatigas. En el común de los días, aunque muy esforzados, no era imposible sacar las tareas adelante con los medios familiares, pero llegado el momento de las extraordinarias como la siembra o la recolección, faltaban brazos, sobre todo en aquellas familias no numerosas, por lo que se recurría a la estrategia del tornapeón, un recurso que consistía en trabajar gratis para el amigo o el vecino a cambio de que él te ayudaría a ti cuando te encontrases en una situación equivalente.


El presente de esta sociedad que nos está tocando vivir, de la que se dice que nos está mandando a la situación de 50 años atrás, ha echado mano de la memoria y anda arbitrando medidas similares a aquellas del ámbito rural del trueque de medios y trabajos, lo que se está dando a conocer como moneda alternativa: uno hace al otro alguna tarea para la que no está cualificado y el otro le recompensa con otro trabajo con el que se sienten ambos satisfechos. Por ejemplo, el niño que necesita apoyo escolar y su madre no puede pagarle una clase particular, y la maestra que con los recortes no puede permitirse que venga una señora a ayudarle a la limpieza de su casa.

Antes de que entráramos en el tiempo del usar y tirar, una de las tareas del hogar consistía en repasar la ropa. Una vez lavada, antes de la plancha, aquellas prendas tantas veces usadas y de inferior calidad de las actuales, necesitaban de zurcidos y pequeños arreglos. Mi madre pagó con ese trabajo las clases de corte y confección de mi hermana, con lo que ella se ganó la vida con una profesión que con los medios familiares no hubiera sido posible. Y como los tiempos son cíclicos, por mucho que nos empeñemos en no reconocerlo, hoy volvemos a ese intercambio de trabajos conocidos como moneda alternativa, sólo que ahora contamos con otras herramientas y son ya muchas las plataformas que dan vía a este recurso por medio de internet, haciendo posible el intercambio con personas que están fuera de nuestro área de conocidos.

09 diciembre 2012

EN EL ESPEJO DEL AGUA


Manuel recoge colillas por las calles, algo que me recuerda a viejas películas en blanco y negro de ese cine español que tenía más de realismo social en cuanto a imagen que denuncia. Manuel se queja de la lluvia que todo lo deja impoluto, salvo cuando se desmadra y no hay cauce ni alcantarillado capaz de soportar tanto caudal. Nunca llueve a gusto de todos, nos explicaron y hemos interiorizado en base a los lustros vividos a los que llamamos experiencia. Manuel  —decía— recoge colillas para apagar con la pequeña ascua muy cerca de los labios esa sed que se le ha convertido en vicio, un vicio que no se puede costear. Manuel es un “sin techo”, un homeless dicho más finamente. Como el lenguaje es arbitrario y admite tallas grandes, figurines imposibles y otras entalladas, lo admite todo hasta pervertirlo casi absolutamente; pero Manuel sigue teniendo necesidad de fumar porque le inocularon el vicio desde los primeros cigarrillos con el venero que respiraba entre nicotina y alquitranes. Sólo pide para café y tabaco y bendice las manos generosas que le complacen.


Miro en el espejo del agua y veo cómo las palomas se encuentran en situación bastante parecida a lo que debe parecerle a Manuel. “¡Esta maldita lluvia lo ha dejado todo limpio!” No hay colillas —piensa Manuel—, no hay migas ni restos de chuches de las que pierden los críos en sus locas carreras y sus juegos —pensarán las palomas—  No lo son, pero las palomas están negras, como Manuel, de tanto desierto inmaculado. Entre los adoquines, un pequeño charco donde seguir buscando, pero en este sólo se proyectan las ventanas de los hogares donde otros que no son Manuel deben estar tomando café y posiblemente fumando; también están ellas en un duplicado incomprensible y aun más negras. Las sombras son siempre oscuras, negras, negras muy negras, como la esperanza de Manuel en encontrar hoy alguna colilla con la que apagar la sed de ese vicio que le domina por encima del hambre.

08 diciembre 2012

MURILLO EN “LOS VENERABLES”



Desde el martes 9 de octubre de 2012 hasta el domingo 20 de enero de 2013 se puede visitar, en el Hospital de los Venerables de Sevilla, la exposición “Murillo y Justino de Neve. El arte de la amistad”. En ella se muestra la relación entre Murillo y de Neve, el canónico de la Catedral, responsable de los encargos de pinturas para la iglesia de Santa María la Blanca, el Hospital de los Venerables, la Catedral de Sevilla y para su propia colección. La mayoría de estas obras fueron expoliadas durante la invasión napoleónica y se encuentran repartidas por museos de todo el mundo. La exposición está organizada por el Museo del Prado (donde ya ha estado expuesta), la Fundación Focus-Abengoa y la Dulwich Picture Gallery (donde se exhibirá tras su paso por Sevilla) y la componen 17 obras del sevillano maestro del barroco.

En palabras del comisario de la muestra, Gabriele Finaldi, “la exposición devuelve a Sevilla algo de su propia alma”. Algunos de los cuadros expuestos fueron pintados para el lugar donde circunstancialmente se encuentran hoy expuestos, o bien colgaron de sus paredes hasta 1813. Caso singularísimo es la “Inmaculada de los Venerables”, colocada para esta muestra en el mismo retablo que ocupó hasta que la sustrajo el mariscal Soult.