31 enero 2016

INVESTIGADO



El que es injusto en lo insignificante, también lo es en lo importante.
(Lc 16, 10)



Ni  imputado, ni acusado, ni inculpado;
investigado:
una suerte de sucedáneos lights,
apoyado en la laxitud gramatical
con el que quitar hierro
en lugar de poner grilletes verbales;
una verborrea gradual,
una pretendida devaluación,
un mentidero con el que amordazar
a los medios y desorientar al pueblo;
para que oyendo no oigan,
para que viendo no vean,
para que siendo no sean…

Y en esa gradación leguleya
de ascensión hacia los tribunales,
palabrería para el desconcierto
tratando de hacer del latrocinio
una escalada de simulaciones.

Ni  imputado, ni acusado, ni inculpado;
investigado.

28 enero 2016

VUELA, PENSAMIENTO



Estamos sentados llorando, acordándonos de Sión.
(Sal 137, 1)

Vuela, pensamiento; escapa, fluye
como sombra que se derrama
y escabulle por los pies de donde mana;
escala montes y collados, vadea
ríos y arroyos, arenas sofocantes
y mares tempestuosos,
en la libertad que sólo tú posees.
Ve donde mi madre, donde mi amada,
y diles que muero de amor
en este exilio voluntario lejos de mi tierra
y de cuanto crecí conociendo y amando
como insuperable y único absoluto;
los barrotes del mar fueron amenaza salada,
pero esta larga ausencia y precariedad,
este pan amargo, a veces de misericordia,
sin la fragancia de lo autóctono,
sin el sabroso sabor de los amaneceres
de mi patria amada,
sin los amigos con los que jugué y crecí
es tuera amarga que deshilacha el alma
y la hace jirones irreconciliables.
Revive, ¡oh pensamiento!
las vivencias que añora mi corazón
en estas tierras bárbaras de idioma esdrújulo
que seguramente no sepa expresar
las delicias de amor que por ti siento.
Saluda al paisaje y al paisanaje
que me vio crecer, seca las lágrimas
de quienes me añoran y llévales este cántico
con el flamear de mis sentimientos,
para que no muera en ellos mi recuerdo,
para que yo pueda vivir este presidio sin rejas
soñándote incesantemente.
Vuela, pensamiento; escapa, fluye
como sombra que se derrama
alejándose desde los pies de donde mana.

25 enero 2016

SEÍSMO



Estad alegres; repito, estad alegres.
(Flp 4, 4)

Estad alegres;
andaluces, magrebíes,
estad alegres;
la tierra se ha estremecido,
tal vez como respuesta
a la alergia que le provoca
el maltrato y peor distribución
que hacemos de ella.

Alhucemas,
de nombre aromático
─como flor silvestre─
ha dado síntomas epilépticos
y las convulsiones
se han desparramado
como olas furibundas
a través del Mediterráneo.

Antes del alba, estampida en pijama
buscando el amparo del cielo abierto.
Las réplicas,
como estornudos  alérgicos,
equilibrio estabilizante,
resquebrajado y estable,
buscando la contorsión
de la posición inicial.

Magrebíes, andaluces;
estad alegres;
lo repito, estad alegres.

23 enero 2016

UNA RACIÓN DE AMOR



Una ración de amor tengo en reserva.
CARI JIMÉNEZ

Nunca es desmesura
lo que tanto apetece
después de un desencuentro.
En su punto,
ni muy hecho ni crudo;
crujiente, como el apetito
que me abanica el alma
con aromas exóticos;
a punto de sal,
como la que derramas
al pendular de tus caderas
cuando aprueban y deniegan;
con largueza, como la agonía
de un abandono famélico
que espera saciarse
en brazos de la amada.
Por guarnición, ponle una sonrisa,
mejor un sí trisilábico y un guiño,
y un ramillete de requiebros
adornando el fondo del plato;
tan sólo no ser solo:
una ración de amor.

20 enero 2016

ÉXODO INERVAL

Fotografía de El País


El que os recibe a vosotros me recibe a mí. 
(Lc 10, 16)

Son los vencidos,
los derrotados por el sistema,
los que pudieron malvender
los ajuares,
los bienes y los ahorros todos
y tuvieron el óbolo del barquero;
los que embargaron sus vidas
en hacinada lancha neumática
y pusieron proa a Ítaca
cuando habían comprado pasaje
para el Jardín de las Delicias.
Son los apestados del siglo XXI,
esos que como el Nazareno
no tienen hoy dónde reposar la cabeza:
los rechazados, despreciados, ninguneados...
También el comunismo tradicional
del extinto bloque,
esos que se jactaban de internacionalismo
─Chequia, Eslovaquia, Hungría y Polonia─
y que hoy ondean la bandera
de sálvese quien pueda.
Los que nadie reciben, los que han salido
de la vida por la puerta falsa,
los del éxodo invernal.

19 enero 2016

POR LA PUEBLA

Fotografía de María del Pilar Ferrari Díaz



Por la Puebla;
por la Puebla se desangra
el Guadalquivir manso,
con adioses afónicos
y transcurrir agónico,
para enseñorearse por los arrozales
de Isla Mínima
y hacerse marismeño.
El sol pelea por asomarse
por entre la pretoriana melancolía
y se desmadeja rendido
en un leve resplandor.
El tiempo parece interrumpido,
el agua embalsada,
pero discurre dulce
y almibarado
─con el cayado de su instinto─
hasta ensalinarse en Sanlúcar.

12 enero 2016

EL GRAN ESTORNUDO

Tras la catástrofe natural en Nepal este pasado año, fui invitado a colaborar con un par de poemas en una obra colectiva, de la que finalmente también escribí el prólogo. Dejo aquí uno de mis poemas, a modo de aperitivo, y el enlace donde poder comprar el libro, para aquellos que estén interesados. Los beneficios de este libro van para la ONG Creciendo en Nepal, http://creciendoennepal.org





En el seno recóndito de la oscura tierra,
un estornudo prófugo atesora soberbia,
ira, saña, cólera de festín mórbido
antes de expeler la furia de la fiera,
el bramido que precede al desgarro:
lo firme discurre como blando,
lo pétreo son partículas de arena
que desliza la brisa huracanada,
y lo apagado fuego devastador
que enceniza el aire de muerte.
Alguien ha destapado la olla de magma
y el aroma sulfuroso de muerte
se expande como valle regado de lágrimas.
Lo apagado es fuego, y el fuego cortina
que emborrona los vestigios de la Parca,
sembrando las listas de desaparecidos
con borrones de mal amanuense.
Un segundo temblor, cientos de réplicas:
adiós escuelas, templos, chozas, palacios, vidas…
Katmandú son harapos, cascotes y luto.

10 enero 2016

UNA GRAN LUZ



El pueblo que habitaba en las tinieblas ha visto una gran luz.
(Is 9, 1)

Vivíamos de espaldas el uno al otro;  
eras apenas una niña
y nuestra presencia en las antípodas
sin posibilidad alguna de encontrarnos,
porque no era el tiempo de la revelación
y la vida caminaba en paralelo
por las sendas de nuestros destinos
sin darle sentido pleno a nuestras existencias.

Pero en las páginas del libro de la vida,
el dedo supremo había garabateado
los vericuetos
por los que habríamos de caminar juntos
para el resto de nuestro días.

Te vi. Entraste en mí por la vista;
no fue un hechizo, fue un desarme
de todos mis sentidos,
como si tras habitar el letargo
de una gran tiniebla
amaneciera a una gran luz.
Vivíamos de espaldas y nos hemos adosado
por la firme columna del amor.

08 enero 2016

ANGUSTIADOS



Tu padre y yo, angustiados, te andábamos buscando.
(Lc 2, 48)

Las faldas maternas son las fronteras
naturales de la primera infancia
y de la vida al completo de todo hombre:
el bebé, porque en ello le va la vida;
el anciano, porque sueña
insistentemente en el regazo materno.
Cuando la vida hace como que se aleja,
que se fuga hacia el desagüe del Tártaro,
nada como el deseo irrefrenable
de volver a encarnarse y a encaramarse,
de inmortalizarse en un presente inmóvil.

Alejandro, apenas tres años,
ha vivido el infierno de perderse
bajo el abrigo insolente de la intemperie,
desamparado a la luz de las estrellas,
cuando el cordón umbilical reclama
sollozante la conexión a las entrañas maternas.

Se obró el milagro: al límite de la vida,
sus padres, angustiados,
lo abrazaron sin preguntas,
como quienes conocen la respuesta,
mientras desatan el nudo que les asfixia.

06 enero 2016

CUARENTA Y TRES MOTIVOS PARA AMARTE




A Pepita, por y para toda la vida.

Si amar es poner al otro por delante,
tú me precedes en mis desvelos;
si es no comprender lo irracional,
tú eres la utopía de mis ensoñaciones;
si amar es someter la voluntad al otro,
tú eres el timonel y el faro de mi singladura.
Por eso, y por cuarenta y tres motivos más:
eres la coda inagotable de mis pensamientos,
la sonrisa en la que caramelizo mis pesares,
la mirada de miel que me subyuga y me sujeta,
la brújula y el sextante de mi derrotero,
la prudencia y equilibrio de mi locura,
la hucha donde atesorar mis despropósitos;
porque hemos crecido para la unicidad,
porque eres la antorcha de nuestro camino,
porque eres la madraza de nuestra descendencia,
porque sabes bachear mis debilidades,
por tus cuidados intensivos y perennes,
porque tu ternura es como de mazapán y arropía,
porque despiertas mi pasión y me electrizas,
porque cuando me besas el mundo se paraliza,
porque te has probado en lo favorable y en lo adverso,
por no saber deletrear la palabra celos,
por ser mi lazarillo y pastar en mis locuras,
por pensar distintos y encontrar el fiel de la balanza,
por ser el oasis y abrevadero de mi sed,
por la vaselina de tus manos sobre mi llaga,
por envejecer a mi lado con la cítara de entonces,
porque despertar a tu lado es inaugurar la vida,
porque me arrullas en tus silencios,
porque te privas para obsequiarme,
porque asistimos juntos al anochecer de los días,
porque has desabrochado tu vida donándote,
porque eres la piedra angular en la que me edifico,
porque tu bondad es abundancia derramada,
porqué planté mi universo en los límites de tus manos,
porque eres mi musa, mi inspiración, y mi lira
cuando me abrazas y me diluyo en ti;
porque si fuera factible, renovaría por otros cuarenta y tres,
vivamos como hasta ahora hasta el final del partido.

02 enero 2016

PERPLEJO



Perplejo. Con el gozo de un regalo
de Reyes que madruga de impaciencia
y trae en su espíritu la generosidad
para quien no esperaba otra cosa
que algún suspirillo amigo. Perplejo.

Toda la vida garabateando palabras,
como cantero que saca esquirlas
a base de esfuerzo y constancia
hasta abocetar el sillar, con sus ángulos
y las lagunas de toda obra humana,  
administrando borrones y tachaduras
y lanzando a la papelera esfuerzos vanos.

Todo el tiempo amontonando palabras
en la privacidad del círculo
con las que vivir y vivirme,
y, finalmente, en el caos globalizador
de la Red, una institución de prestigio
me da el plácet y me abre sus puertas.