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16 mayo 2024

SILENCIO




Silencio. Incendiada quietud estival.

Sopor. Hasta los pájaros dormitan,

han plegado las alas, se han arrullado

en el duermevela de la sobremesa.

No hay brisa que agite las hojas

de la avenida. Por fin llega.

Llega el autobús con gran estruendo:

agitación metálica en la carrocería,

agitación entre los pasajeros

por hacerse con un asiento;

los tullidos se creen merecedores

de reserva garantizada,

no así quienes se han fatigado

en el trabajo, el deporte o el ocio.

Cada uno se mira a sí mismo.

Una orquesta metálica se desplaza

y un coro de vocingleros desafinados

pujan, no sin esfuerzo,

por hacerse oír. Una jaula de grillos,

un cónclave de vociferantes desafinados

en estridente porfía. Me siento aturdido.

Se detiene. Me apeo. Se alejan

el metálico fulgor y el coro desafinado,

devolviéndome la paz y el sosiego.

Silencio. Quietud. La arboleda sestea

esta tarde de mayo que sueña en estío.

31 enero 2023

ESTRELLAS EN PELIGRO

 

Haya luceros sobre el firmamento,

para apartar el día de la noche,

y sirvan de señales para solemnidades,

y sirvan de luceros en el firmamento

para alumbrar sobre la tierra.” [i]

Y el hombre vio, y el hombre admiró,

y el hombre puso freno a lo que admiraba,

y comenzó a talar los bosques,

a horadar la tierra y despreciar el magma,

a dar valor a lo escaso y a atesorar,

y a atesorar, y a atesorar sin límites.

Escaló montes, vadeó ríos, se aventuró

por mares y océanos para saciar su apetencia

con los bienes de otras latitudes;

esquilmó cuanto encontró a su paso,

sin importarle la penuria que iba dejando.

Insatisfecho, nunca colmado, avariento,

quiso hacer la noche día

y dejó de vislumbrar y escudriñar

en las sombras y en el misterio de la noche.

Y encendió la noche desde el suelo,

y fueron desapareciendo de la vista los astros

rompiendo todos los límites de lo creado.

Inventó la brújula y también el Google Maps,

cuando había perdido el sentido de orientación.

Desde entonces vive en un mundo paralelo,

teledirigido y observado por miradas extrañas

e interesadas, extremadamente interesadas,

y desde entonces vive de espaldas

al fabuloso mundo que le fue dado.



[i] Gn 1, 14

18 noviembre 2022

PERSPECTIVA



                

Levando la mirada

y cada día los montes son más inaccesibles,

ahora que, como medida de seguridad,

me he acostumbrado a mirar

el suelo inmediato.

También la cúpula celeste

está considerablemente más alejada,

más sumida en su mundo

y, al parecer, con una cohorte de objetos extraños

pululando ingrávidos en derredor,

pendientes de una atracción

que podría ser las piedras del hondero.

Los ríos se alejan, los pantanos se retraen

exprimiéndose el jugo y dándose en vida,

el mar es un regalo envenenado

debidamente envuelto en plásticos

que llevan a la muerte.

Con precisión, percibo una visión dantesca,

una perspectiva obscena y decadente

que desubica nuestro enclave

hacia el precipicio de una hecatombe;

pero también podría ser que milito

en la estrategia de una obsesión.

06 noviembre 2021

LOS CUATRO JINETES DEL APOCALIPSIS

            Cuando el Cordero abrió el primero de los siete sellos, oí al primero de los cuatro Vivientes que decía con voz de trueno: “Ven” (Ap 6, 1)

 

En la cuadra, sin bridas, sin sujeción posible

que les detengan, los cuatro corceles actualizados,

la inminente amenaza que ya es temible realidad:

un sistema financiero voraz y sin escrúpulos,

la violencia organizada y progresiva,

─mucho más que una mera amenaza─

millones de personas malviviendo en la miseria

y el agotamiento de los recursos naturales,

junto a la incontrolada contaminación que nos devora.

 

El hombre ha olvidado su transitoriedad y de paso

respetar y organizar el legado para la posteridad.

No hay pensamiento. Todo es fugacidad instantánea.

¿Dónde está la moralidad que debiera conducirnos?

 

El caballo negro del hambre es una realidad

acentuada por la pandemia del Covid.

Por las crines del aguerrido caballo alazán

fluye la épica y las epopeyas futuras

con presagio de algo inminente e inevitable,

y es que el hombre ha olvidado que es imposible

crecer permanentemente hasta rozar el infinito;

y todo, bajo una indecente amoralidad financiera.

Se dice que los depósitos armamentísticos

están pertrechos con la capacidad de volar

la faz de la tierra hasta cinco veces consecutivas.

Así, los relinchos del caballo bayo son el regocijo

de tanta muerte como no hubiera imaginado.

 

La esperanza está en la cooperación,

en un consumo no ansioso sino responsable,

en deponer los fanatismos por el compartir,

y muy especialmente, en confiar sosegadamente

que el misterioso jinete, a lomos del caballo blanco,

sea la Esperanza que tantísimo necesitamos.

21 junio 2021

RUEDAS DE MOLINO

 


 

A veces tropiezo en lo barrido

o un simple papel

se convierte

en barrera infranqueable,

imposible de superar.

 

A las puertas del verano

una tormenta,

─no sé si con nombre propio o del montón─

desborda el vaso

y las cloacas no pueden

con el flujo.

 

Tampoco yo. Tampoco

puedo tragarme cada día

la basura contenida en los informativos

y sus sesgos,

ni las poses de quienes pretenden

hacerme comulgar con ruedas de molino.

01 junio 2021

MANANTIAL


Entre rocas y brezos,

un murmullo de agua

con su música que colma y sacia,

que invita a beber y a descansar.

 

Un largo camino. Un esfuerzo

agotador para quien la sierra

es un paisaje ahí enfrente,

un recreo para la mirada

en la distancia.

 

Agua desnuda, impoluta,

agua que salta a las manos

con un vuelo blanco nácar

y apaga la sed antes que el deseo

de dar por acabado el festín.

 

Doncella de la sierra,

aparición angelical

que colma con sus virtudes

las pérdidas habidas en el esfuerzo.

 

Agua pura. Agua virginal.

Inicio de un río

que irán prodigando sus bondades

mientras nosotros los hombres

la mancillaremos hasta corromperla

y contaminarla.

 

 

10 abril 2021

RAZONES DE LA SINRAZÓN

 


«Sed fecundos y multiplicaos,

henchid la tierra y sometedla.»

 

Y así, durante generaciones,

el hombre sació su sed,

se alimentó de los frutos

y amasó el pan con el sudor de su frente;

más tarde descubrió el fuego,

inventó la rueda, la palanca y la polea,

y también los engranajes.

Y conoció a la insatisfacción que se apropió de él:

nada le colma desde entonces,

al haber desbordado los límites naturales.

 

El derroche encontró su hábitat 

y el hacha en su mano el expedito camino

de la deforestación salvaje.

En lugares concretos era muy superior la producción

que las bocas a satisfacer,

e inventó el mercado y con él el transporte,

el rompimiento de las estaciones y las distancias.

Nacieron los embalajes, se quemaron los fósiles

y el exceso de residuos y contaminación

ascendía como vaharadas de progresión geométrica.

 

La insaciable industria no se colmaba

con la agricultura ni la ganadería tradicional.

Lo que hasta entonces fue sostenible

buscó soluciones en los transgénicos:

nacieron las fibras sintéticas y los plásticos,

pero estos no saben volver a sus orígenes y regenerarse.

 

Titubeó la lluvia, se agudizaron las sequías,

se agotaron muchos manantiales

y se rompió el ritmo conocido desde la noche de los tiempos;

las temperaturas se saltan los códices

y la lluvia ha perdido el paso,

por eso a la sequía le sigue una inundación extrema.

 

Todavía hay quienes lo niegan,

pero esas son las razones de la sinrazón.

 

 

 

07 abril 2021

RELOJ QUE ATRASA

 


 

Frente al tumulto ensordecedor

de los medios, el silencio

insomne de las mayorías.

 

Hay tanta desilusión encerrada,

tanto silencio en la cárcel de la privacidad,

en el celo del fiel ajuste a las medidas,

que las estridencias de los díscolos

parecen la pauta generalizada.

 

Y así, con ese preciso error

nos miden y, en consecuencia,

adoptan las incoherentes medidas inoportunas.

 

Cada día asume el retraso del anterior

y los planes de vacunación

son un descrédito de programación

y de promesas.

 

Aguardamos con docilidad un nuevo repunte

y no precisamente la anunciada Resurrección:

no hay otra esperanza que la vacunación masiva,

pero no la mía, instalada en la brecha

de los mayores no octogenarios,

sino la de todos los humanos

de esta desigual superficie de la tierra.

 

A la vacunación le atrasa el reloj;

a la industria le adelanta el afán desmedido,

a los políticos les precede la verborrea,

y a ti y a mí, a todos,

la paciencia para escalar bulos.

 

Fratelli tutti”, sueña Francisco,

pero el mundo manipula el reloj

y cada uno se mira su ombligo.

17 octubre 2019

HAY UN LUGAR




Hay un lugar
donde el bosque llora
y la madreselva le hace compás
con lánguidos suspiros de añoranza,
como recordando el tesoro perdido
o la senda desangrada del río
en su caminar pretérito y ancestral.

Hay un lugar
donde la vida se ha trastocado
hasta el punto que se confunde
la noche con el día,
la función clorofílica con el vómito de muerte,
el manantial con la escombrera
y la vida con la muerte.

Hay un lugar
donde hoy moran los estertores,
donde antes lo hacían las abubillas y el mirlo,
donde el arroyo cantaba endechas,
donde el mirto exhalaba requiebros,
donde el cantueso y el alhelí
eran confirmación de lo no errado.

Hay un lugar
donde todo es pasado, vida en fuga,
muerte que ronda la vida,
reinado de lo podrido,
donde la vida vencida es derrotada
y sometida sin posibilidad de volver a ser.

17 septiembre 2019

MERES CONTAMINADOS




Le ofrecí mis agrios al viento,
aunque entonces sólo era brisa;
los arrojé por la ventana
induciéndole la ira que me carcomía
y una bolsa de aire
como un globo infantil
lo puso en manos de Eolo,
quien lo perdió
al sobrevolar el río.

Cuando bajó la marea,
esa cáustica gestaba un revoltijo de malicias
en la mar salada.

¿Y todavía nos extrañamos
de la contaminación de los mares?

El origen del mal
está en las entrañas del hombre.