31 agosto 2019

CONFUSIÓN




Añorada lluvia que no llega
a regar el erial de este estío,
y aún le resta la astringencia del membrillo
a este secarral umbrío y traspillado
que el sol achicharra hasta agostarlo.

Sed, sed sempiterna, sed extrema
de tus labios en los míos,
perpetuo deseo insatisfecho;
ansias de lluvia de mi cuerpo en tu cuerpo,
labios cuarteados de enfermiza sed.

Ardor, sed, calor, fruto quemado, amargor,
coda recurrente que se enreda en tu nombre:
dormido o despierto, sed enfermiza,
ojo avizor  a la puerta entreabierta de tu sonrisa,
licencia que invita a la concupiscencia.

Sed, confusión sensorial que me desorienta
y desborda.

30 agosto 2019

EL PRIMER AEDO




Se cree que fue descendiente de Gea
el primer aedo que declamaba
en el ágora, y más tarde en las calles,
las epopeyas de su pueblo.

Luego acabó animando
los banquetes de los nobles
y las personas relevantes de su sociedad,
dejando enclaustrada la cultura
a espaldas del pueblo.

El jónico Gea, versado en hexámetros,
cautivaba a la audiencia
con sus tiradas interminables de himnos,
cánticos patrióticos y alguna que otra mofa
exacerbada de carácter hiriente.

Aunque la tradición se ocupó
de hilvanar el hilo de su hacer
hasta nuestro días, los investigadores
ponen en solfa la tradición oral
y se afanan en indagaciones históricas
que con el trabajo y los días
dará su fruto o se eternizará
en pesquisas que pueden no llegar a colmo.

29 agosto 2019

COMO ROSA MARCHITA




Como rosa marchita
de labios violáceos
por el tránsito entre el esplendor
y el adiós último;
así intuí la mentira de tu lasciva boca
cuando prometías un para siempre
que acabaría siendo en tanto que…

Nube pasajera, bruma marítima de la mañana
son tus promesas la copiosa mentira;
lebrel que vuela por el barbecho
y fija en su olfato la fragancia de la presa
que enamora
y las veleidades de un cambio de rumbo.

Sombra que apresa sin prisas, que pasa,
que aprisiona pisando mi terquedad ofuscada
en las frivolidades de tus caprichos;
la fragancia que me ofreciste, flor de un día,
es hoy olvido, y más allá, llaga que supura
por el tallo del que te erguías
cuando ibas de mi brazo
derrochando lozanas promesas eternizantes.

28 agosto 2019

SÚPLICA A CALÍOPE




¡Loor a Calíope, musa de mi predilección,
de la elocuencia y de la épica!

¡Hija de Zeus, portadora de múltiples gracias,
a ti te invoco, a tu grácil inspiración!

¡Dame, oh Calíope, el poder de conjugar
los tres tiempos verbales como inmortal:
ser hoy, para llegar a ser mañana
y haber sido en el pasado hasta mimetizarme
en poesía ininterrumpida y elocuente.

¡Te ofrezco, oh Calíope, las guirnaldas de mi amor
y elevarte himnos épicos, endechas y cánticos
para que mi torpe mano sea capaz de inmortalizar,
con tu ayuda, la gloria poética de la que carezco!

¡Ayúdame, oh Calíope, a salir de este inframundo
de las redes sociales,
hasta ver mi nombre grabado a oro y fuego
en los pergaminos que se coleccionan
como se acumulan las piedras preciosas!

¡Yo seré tu esclavo y cantaré tus loores por siempre!

27 agosto 2019

UNA MISMA LÍNEA CURVA




A Chelo de la Torre

Te buscaba a ciegas, con ansias,
como se persigue lo inalcanzable
o lo fantasmal;
tanto en mi ámbito como lejos de él.

Te buscaba con insistencia,
como en una línea de acoso
un punto sigue a otro punto del arco;
como agua que enfila la colada
y desaparece en el abrazo del río.

Te buscaba con la necesidad
de fundirme en tu ser
y desaparecer en ti,
y surtir como fénix de tu naturaleza
y renacer en ti.

Puse el ojo en tu órbita,
pero todo era opaco en tu entorno de luz
y seguía buscándote a ciegas, violentado…

Y resultó que éramos los exclusivos focos
de una misma elipse.

26 agosto 2019

LA VIDA EN LA TIERRA




Era el reinado de Cronos
cuando los hombres vinieron a ser frágiles,
mortales, insignificantes,
al servicio de los servidores celestes.

Todavía no existía el trabajo esforzado
ni por ende la esclavitud,
ni la miseria;
ni siquiera la terrible vejez
había sido aún mácula sobre la piel del hombre.

Todo era pureza y lozanía,
fertilidad espontánea de producción ilimitada;
los humanos eran tratados y favorecidos
como semidioses inmortales,
miembros de un clan divino
de existencia sin fin.

Mas un cataclismo urdido por la maldad
vino a sepultar para siempre a esta estirpe
y, de aquella simiente maldita,
inoculada por el odio y la avaricia,
se comenzó a poblar la tierra
del homo sapiens que ha llegado a nosotros.

El odio, la envidia y las malas artes
contaminaron el corazón de dichos seres,
decididos a acabar los unos con los otros;
inventaron la guerra, envenenaron los manantiales
y crearon los silos de la exclusividad,
los mojones y linderos de la propiedad privada
y las fronteras.

Más tarde, retorcieron lo torcido:
deforestaron los bosques,
crearon el fuego para aventar cenizas
contra el otro,
y los herbicidas para un menor esfuerzo;
le sumaron los plásticos, los desechables,
el mercado…

Y la vida en la tierra se vio abocada
a su fin, y en ese exterminio
nos desenvolvemos con penuria al día de hoy.

25 agosto 2019

CAPRICHO ÁRABE




Interpretaba a Tárrega
enfundada en un ajustado traja pantalón rojo;
sus brazos, como ensenada,
era arco mimoso
abrazando armónicos y suaves,
con el rigor preciso, en torno a la guitarra,
mientras desmenuzaba
“Capricho árabe.”

En una de las arquería de la sin par Alhambra,
sus tañidos dolían
como salmodia desgranada.

No hacía aspavientos, se deslizaba
por los trastes como si levitaran sus dedos,
apenas sin rozar las cuerdas,
como un trote holístico y sosegado,
sin despeinar las notas,
sin que trascendiera el esfuerzo.

Y la dulce melodía
descendía como lluvia
y la emoción me empapa
para hundirme en el barro del éxtasis.

24 agosto 2019

ERA UN TIEMPO TRISTE




Era un tiempo triste, apagado
y con la sombra alargada de la posguerra
amartillada sobre las ventanas
y sobre las techumbres
de aquellas casas humildes
con su epicentro en la chimenea.

El luto y el delantal era el uniforme de las abuelas,
con su rodete y su peina
y sus bocas desdentadas.

Hogares incómodos, pero cálidos;
alacenas desnutridas, donde el pan y el aceite
eran el banquete diario.

En las historias familiares
se cruzaba alguna hazaña bélica
o el recuerdo de un tío o un primo
que posiblemente se quedara para siempre en el Ebro
y ahora era testimonio fotográfico
en blanco y negro
sobre la reluciente pared de cal.

Eran hogares desnudos,
salvo media docena de sillas de anea,
pero de un inaudito blancor
y sin concesiones al dispendio.

En los escasos aparatos de radio
sonaba Antonio Machín o Bonet de San Pedro;
en las tabernas: Palanca, Juanito Valderrama,
Caracol, Marchena y la Niña de los Peines.

Era un tiempo triste, apagado…

Y yo crecía lentamente
y soñaba otro universo.

23 agosto 2019

SE HA DORMIDO JULITA




Se ha dormido Julita
el sueño eterno,
se va con su sonrisa
camino del cielo.
Ya no podré abrazarla,
pues es incienso,
perfume para Dios,
caricia y mimo inmenso
que se eleva y se eleva
al Paraíso.
Atrás quedan los años
con sus recuerdos
de amistad imborrable
que no destruye el tiempo.
Enrique se ha quedado
sin saber lo que pasa,
pues vive ensimismado,
mente borrada.
¡Qué bien lo has hecho, Padre,
muy bien lo has hecho!
¡Ven a secar mi llanto,
yo te lo ruego!

22 agosto 2019

VOZ DE ROCA QUEBRADA




A veces tengo voz de roca quebrada
y nunca contundencia granítica:
una leve afonía
que me remite al silencio profiláctico
y me adentro en paz propia, y del entorno.

En tal audible reposo, casi siempre forzado,
me siento agua que escapa
por entre las mansas arenas
y pedernales permeables
discurriendo hacia un destino incierto.

Maleable, como rama que cede
ante la fuerza del viento
y se recupera pendularmente de su esfuerzo
a la postura inicial.

A veces soy pasto verde, césped húmedo
que se aplasta a cada pisada
y vuelve a recuperarse,
dejando tras de sí un testimonio herido.
Roca, arena, agua, fuego… 
elemento  inseguro, insatisfecho, incierto;
la triste debilidad
de una cometa a merced de la brisa.

21 agosto 2019

ME ACOMODO EN LA SOMBRA




Busqué acomodo en la sombra,
donde poner en orden las ideas
y roturar las palabras que bullían
en mi cabeza adoptando modos y formas;
entonces,
con la cortesía de una jovencita educada,
me saludó efusiva
y ensartó una a una las perlas
que había atesorado y las fue goteando
como rezadas de un rosario.

Al cabo, solté el bloc y el bolígrafo
y puse mi atención en corresponderle.

Ella buscaba confirmación a sus elucubraciones
y las fue desgranando como gotas de agua
─con su música─
en escala de sones monótonos
que, de repente, aderezaba con alguna pregunta.

Me acomodé en la sombra
y el resto me vino dado sin pedirlo ni buscarlo.

20 agosto 2019

UNA MUJER PASA

Pido disculpas a las personas que han afeado la imagen inapropiada que coloqué en este poema. Se trataba de destacar la belleza femenina y no otra cosa que resultara grosera. No pienso eliminar ni modificar vuestros comentarios. Gracias por vuestras indicaciones.



Una mujer pasa. Deja de acariciar la brisa
y las flores del jardín estiran sus tallos
para no perder detalle. El jazmín
exhala a toda máquina aromas de cortejo,
se ralentiza el tráfico
y los motores respiran al unísono
un ronroneo acelerado. Se ha parado;
todo se ha parado al paso de ella,
como imagen de culto y veneración.

Pasa un hombre. Pasa un segundo hombre.
Pasan muchos hombres y nada pasa.

Una mujer pasa. El cielo se sonroja
y en un suspiro se torna violeta;
agudizan los ojos la mirada
y todo se oscurece; ladra un perro
y recibe un tirón monumental de la correa;
lo efímero se ha hecho eterno
como una fotografía en blanco y negro.
Se ha detenido el tiempo.

Una mujer pasa. Dejo de escribir
para inmortalizar su imagen
en imperecedero recuerdo.

19 agosto 2019

PRÍNCIPE DE LAS SOMBRAS




Vino a visitarme el Príncipe de las Sombras
y mi amigo, como distraído jugando con el móvil.
Me buscaba por senderos nunca transitados
y, aunque perdido, puse todas las trabas posibles
para no ser sujeto transitivo
de una oración en la que me vi forzado
con tanta devoción como esmerada cautela.

Sus fauces, como cráter ardiente,
amenaza digestiva de mi integridad
y espeluznante su eructo de amarillo azufre.

Me revestí de opaca noche como cloaca
y comprendí que la única escapatoria
era hacerle frente como un David
sin fuerzas y sin honda. Un hielo sudoroso
bajaba por mi espalda sajando la encarnadura
y desgajando de mí la misma vida.

Un destello sonoro, cada vez más próximo,
y al cabo de no sé cuánto,
me reconocí conectado a un monitor,
mientras unos  ángeles de ropajes verdes
hablaban entre ellos de la oportuna llamada
recibida por Emergencias.

18 agosto 2019

ESCRIBIR PARA QUIÉN




No es por vanidad,
ni por vanagloria,
ni por el efímero triunfo terreno
que el tiempo siempre acaba por desdibujar,
hasta de los más grandes.

Escribo para ejercitar las neuronas,
para movilizar lo inmóvil
de esa masa gris cada día más oscura,
menos permeable y más rígida.

me basta el coro de amigos
que pescan en las redes sociales
y ni siquiera me abuchean
cuando el acto es fallido.

Escribir, ¿para quién?

17 agosto 2019

PASEANDO LAS CALLES




Paseando las calles,
me he topado con el exceso de la dama de noche,
también con la sutileza del jazmín
y su frágil elegancia.

Así, muy diferentes, son las personas que pasean
esta ciudad de Marbella, tan saturada de belleza,
de oferta turística
y de contrastado encanto.

Me gustan las personas que no comenten excesos,
las que no vociferan,
aquellas que no alardean ni de incontinencia física
embutida en una talla pequeña,
ni de cartera ostentosa;
me gustan las silenciosas y fragantes
que como el jazmín cautivan
en su exquisita sencillez;
esas que te ceden el paso sin humillarte
y hablan en cualquier idioma con voz queda.

Me gusta ser parte de la masa anónima
y no me quejo de colas y aglomeraciones,
también viví del turismo
que ahora molesta a algunos.

Tu y yo, de la mano o muy próximos,
gozando del perfume de estos días
y perdidos en la masa
de la que no nos sentimos privilegio
sino afortunados de poderlo compartir.

En la calle, noche y día,
una invasión de excesos
y la mayoritaria sutileza de aromas
que enamoran.

16 agosto 2019

MONTE ARRASADO




El monte, todo ceniciento y arrasado,
una desolación de vidas en huida,
en escapada vivaz por la salida de urgencias
a la espera de un nuevo renacer.

Llegan las primeras lluvias y los regatos
son como lava talada y gris que se despeña
arrastrando el sustrato inerte.

El fuego en el monte es muerte que espera retoñar,
vida suspendida de por lustros,
hasta que de las entrañas de la tierra
nace un nuevo brote verde
y se renueva la esperanza y la vida se manifiesta
esplendorosa en los primeros rebrotes, esos que
encienden las bombillas verdes de la esperanza.

15 agosto 2019

AHORA ES TARDE




Ahora es tarde. El sol, en su huida,
ha dejado en la arena la destemplanza
de alejarse sin despedida
y hasta enrojeció de rubor;
acabará por dejarnos ciegos, desorientados
y mirando hacia la patria íntima de los recuerdos.

Ahora es tarde. El mar sigue sus cánticos rítmicos
invitando a bañarnos desnudos,
como cuando éramos jóvenes y ardíamos
en la boca amada.

Ahora es tarde. Por el terraplén de agua
que da a la Atlántida,
se ha despeñado el disco solar
y todas las aventuras son tétricas,
oscuras como bocas de lobos.

Ahora es tarde. Se nos ha acabado el día
y nos orientamos por las sombras azuladas
de la luna hasta encenderse la aurora;
se nos ha despeinado el ayer,
pero nos reconocemos en las voces
y en el tacto de nuestras manos juguetonas.

Ahora es tarde. Hemos sintonizado una inquietud
extraña que nos invita a permanecer cerca,
nuestros pulsos han vuelto a regularizarse
y nos buscamos recíprocamente en el alma.

Ahora es tarde. Pero, amanecerá de nuevo.

14 agosto 2019

AVENTURA EN EL MONTE




El monte, tan cercano, valla natural
de esta vida apacible en el valle,
es invitación y es reto, atractivo
que impulsa a tomar la vereda.

Por el camino, los algarrobos y los lentiscos,
los pinos y las aulagas vestidas de amarillo
oro para las abejas y también las cabras;
el romero amarilleando de sed y el tomillo
esparciendo su fragancia con generosidad.

Canta aves no identificadas
y otea desde el cielo la primilla
en vuelo de reconocimiento;
de repente, al recodo de una gran peña,
una piara de cabras hispánicas,
cuyo macho alfa olisquea el ambiente
y da seguridad a los suyos.

Desde el sur, la brisa del mar
y en el horizonte un barco de vela,
pero esa es otra aventura.

13 agosto 2019

MUNDOS ENCONTRADOS




Así como la luz encuentra su ser 
en la oscuridad,
tampoco existiría el poniente
si no fuera porque existe el levante..

No conociéramos el concepto de salado,
si no se deslindara de lo dulce
en contraposición; 
todas las aguas marinas
serían una única molécula de agua 
sobre el planeta.

Del mismo modo, sin el concepto de frío,
los veranos no serían tórridos
ni preferiríamos un lugar frente a otro,
por lo adecuado del clima
a una temporada concreta.

Tampoco brillaría el amor
si no conociéramos el odio,
si no hubiéramos experimentado el egoísmo;
así también la riqueza y la pobreza,
sin egoístas y acaparadores que crean
merecerlo todo, sin importarle el otro.