Mil
años en tu presencia son un ayer, que pasó.
Salmo 89, 4
Año bisiesto:
febrero viene escrito
con tilde,
para romper con el acento
la monotonía del calendario
que se dilata hasta lo
extraordinario.
Como la niebla enmudece
la mañana y la viste de
opaco,
en oposición a la luz
que bosqueja la primavera,
tú, ─sonrisa del alba─
a la que afestonarme
en mañanita tierna de dormir.
Como hierba que se renueva
que florece y se renueva
en plazos anómalos y germina
cada cuatro años,
como muerte de la que brota
la vida para perpetuarse,
el año bisiesto, la
cuadratura
a un desajuste cíclico.