31 marzo 2012

NATASHA


Tu cuello esbelto,
tu pelo como espiga de sol de la tundra,
tu talle enjuto de fresno,
tu piel de adolescencia sostenida,
tu acento de masticar sílabas cirílicas,
tu mirada vivaz, profunda y escrutadora,
tu busto de zarina en excedencia,
tu dulce misterio…
pero nunca imaginé
la superposición de copias color sepia
almacenadas bajo las sucesivas
personalidades poliédricas
de la matrioshka
en la que te albergas;
a pesar de, o por ello, Natasha,
trazaste en mi vida
una senda de melancolía.

30 marzo 2012

LA ESCAPADA


Sus facciones poco acentuadas fueron el visado con el que no contaba a priori, cuando cada vez más se le iba cerrando el cerco. Cuando zarpó el barco y en la distancia empequeñecía a lo lejos el Tibidabo, no daba crédito a lo sucedido, pero estaba poniendo millas de agua de por medio entre su oscuro pasado y su futuro incierto. En el mercante no sólo no había lujos, sino que tuvo que fajarse en las tareas de la marinería pasando por uno de tantos; a cambio, una nueva personalidad, una litera y rancho común. No era uno más, pero así constaba en la nómina del capitán. Desconocía el destino, pero eso carecía de importancia, como tampoco las condiciones ni el alto precio que hubo de desembolsar: había salvado su vida a cambio de un pasaporte tan falso como un billete de un millón de pesetas y un destino ignorado. Había limpiado la caja en su retirada y ahora también le buscarían los suyos por eso y la banda rival para lincharlo por asesinato.

29 marzo 2012

SIN PALABRAS

28 marzo 2012

TE TRAIGO EL MAR


Te traigo el mar
entre el cuenco de mis manos,
escabulléndose por entre las rendijas
de la cestilla de mis dedos;
aquí, tu torso tornasolado;
aquí, mis manos untuosas en tu espalda;
aquí, mis dedos ágiles haciendo arpegios en tu piel;
aquí, el aroma yodado del rebalaje;
aquí, los cueros de nuestros cuerpos;
aquí, las algas enmarañadas en tu pelo;
aquí, mis cánticos y susurros a tu oído;
aquí, los días extensos y cálidos del estío;
aquí, los sueños que nos encumbran como estrellas;
aquí, el ansia salobre de tus labios y los míos;
aquí, el piélago azul en el que abrocharnos;
aquí, tú y yo, nosotros o la nada.
Te traigo el mar
entre mis manos temblorosas y húmedas.

27 marzo 2012

MARÍA DOLORES GIL (bis)


El pasado domingo volví a ver la exposición de María Dolores Gil, como consecuencia del comentario que ella misma había hecho en mi blog. En esta ocasión fui acompañado de mi esposa, quien sentía curiosidad por ver en sus obras originales lo que yo había comentado sobre esta magnífica pintora el día 21 del presente.


No necesité de muchas explicaciones. ¿Loli? “Sí”, soy Francisco Espada. Le acompañaban en la sala de exposiciones su marido y su hija y todos ellos se mostraron muy contentos con el juicio que sobre su obra  había publicado, así como los muchos comentarios positivos que la entrada en el blog había suscitado.  


Ella recordaba las palabras que le dirigí en la primera visita sobre el aire que parecía mover los flecos de sus mantones, pero no había imaginado que hiciera público lo que la visión de su obra me había impresionado.


Le pedí excusas por haber publicado parte de sus pinturas sin su consentimiento expreso, me respondió halagada y nos hemos emplazado para la próxima exposición. Y como el mundo es más pequeño de lo que imaginamos, resulta que vivimos a dos o tres manzanas uno del otro.


Después de haber dado cuenta de su obra en mi blog temí que pudiera reclamarme la solicitud no formulada, así que no imaginé que quedáramos como amigos, gracias a su generosidad. 






No me digan que no es una artista muy "laboriosa".

26 marzo 2012

TRÍADAS AL AIRE


En invierno, cambiaría
el castañeteo de dientes
por el canto de los grillos.

Al día siguiente,
con los vapores de la resaca,
también los remordimientos.

En febrero
ya quedaron caducos
los propósitos de enero.

Perdieron mis maletas
entre aeropuertos:
me encontré con lo puesto.

La alegría de llegar
y la tristeza
de que nadie te espere.

Tres tigres tristes:
el domador,
la jaula y el payaso.

La alegría que se imputa
a la chiquillería
está cuajada de llantos.

Cuando se empañan las gafas,
me habita, de repente,
una espesa niebla.

El espejo lo sabe todo de mí,
pero es muy prudente
y por tanto calla.

La conciencia sabe más que el espejo
y se pasa todo el día
con ese runrún molesto.  

25 marzo 2012

SEGUIDILLA ELECTORAL


Botando voy,
botando vuelvo;
voy hasta el colegio
y luego vengo.
No me fío de ninguno,
pues no soy devoto,
puede ser que regrese
sin echar el voto,
pues no confío
en promesas vanas
de los que tanto mienten
por ver si me ganan.
Cansado de insultos
de  unos a otros,
de oírles mentiras
y cuentos impropios;
prometen imposibles
y se quedan tan panchos,
ocultan a los suyos
en grandes despachos.
El dinero se pierde
como esfumado,
pareciera, ¡oh enigma!
que fuese alado;
mas nadie ha sido,
se tapan a los propios
y se airea lo ajeno,
resulta misterioso
mas se pierde el dinero;
amenazas de cárcel
que no se cumplen
y el dinero se esfuma
como entre nubes.
Me piden el voto
y no sé qué hacer,
si quedarme en casa
o salir a ejercer.
Botando voy,
botando vuelvo;
voy hasta el colegio
y luego vengo.

24 marzo 2012

BAUTISMO


Hoy es un día muy especial para este viejo bloguero y me tomo un respiro: mi nieto Alejandro va a recibir este sábado el sacramento del bautismo y una emoción especial recorre mi cuerpo. Los meteorólogos anuncian un día nublado, e incluso pequeños chubascos al medio día, pero con una temperatura por encima de los 20 grados. No importa, porque para mí será un día radiante al margen de lo que diga el hombre del tiempo y lo que verdaderamente haga o no el tiempo, porque la luz que espero, en la que confío, no hay nube que sea capaz de ocultarla. Hoy no estaré muy atento a los blogs amigos, pero ninguno de mis amigos faltaréis a mi fiesta, porque ya me ocuparé yo de pulir la memoria para que no falte ni siquiera uno solo en primera fila. Uniros a mi gozo y yo sentiré vuestro pálpito.

23 marzo 2012

ME PERSIGUEN

Siento un atractivo irresistible por la luz de cada amanecer, pero me atormentan los misterios de cada una de las noches donde me persiguen sin acosarme. No sé explicarlo ni creo que existan las palabras adecuadas para definir el interés que siento por ser más explícito, ni cómo me gustaría comprender ese enigma que cada noche cabalga mis sueños y se desvanece al alba. Es algo así como si un par de ninfas de los bosques hollaran con levedad sutil sobre mis pisadas y sobre mis pensamientos, sin dejar rastro de presencia corpórea alguna, pero con entidad inconfundible y persistente. Se trasladan como lo hace la bruma, agazapadas e incorpóreas, dúctiles a los obstáculos, capaces de atravesar valles y collados, peñas y masas boscosas. Detrás de cada tumbo, allá están de nuevo como apariciones repentinas de mi sobresalto. En sus rostros, leves sonrisas y miradas escrutadoras que más que mirar analizan. No me acosan, sólo me acompañan con toda la dulzura que sus inmaterialidades pueden transmitir, pero es una constante que aparece ya en el duermevela y se agota con las primeras luces del día o en la vigilia, si acaso la noche se hace intermitente. Me persiguen ocultas entre el bosque y no alcanzo a comprender qué aspiran de mí estas dos sombras que cada noche me acompañan.


22 marzo 2012

REACTIVO

Óleo de Rubén Belloso
He jugado al funambulismo
sobre la sima del fiel de dos distancias
y he tenido que añadir
grandes porciones de reactivo
a los corrosivos ácidos que
me hicieron tambalear:
serenidad a tanta excitación,
feminidad a tanto machismo,
humildad a tanto engreimiento,
esperanza a tanto desaliento,
generosidad a tanta avaricia,
perdón a tanta enemistad,
compañía a tanta soledad,
oído a tan clamante clamor,
pan a tanta hambre,
justicia a tanta solidaridad,
amor a tanto odio.
He tabulado con el pilón
de la romana social de mi entorno
y he tenido que inventarme
todos los baremos
ante tamaños desequilibrios.

21 marzo 2012

MARIA DOLORES GIL


Una mañana soleada, aunque algo fría para estar estrenando la primavera. En el Círculo Mercantil, en el corazón de la ciudad, una exposición de pinturas al pastel de la consagrada pintora sevillana María Dolores Gil, una tentación para los sentidos, un atracón con el que de vez en cuando uno se debe nutrir. Una vez intente expresarme con los cilindros de pastel y me salió un pastizal, de donde deduje que no es una técnica fácil, para la que se requiere unas dotes artísticas bien notables.


Así es María Dolores Gil, notable en su expresión y sencilla en su temática cuajada de costumbrismo, flores y bodegones con los elementos más corrientes, pero subrayados con el acento de la luz y el color que ella domina con maestría. De destacar la cotidianeidad de los temas elegidos y la naturalidad con que son tratados.


Finalizada la visita, me he dirigido a la autora y le he dicho que —en mi torpe entender—, lo más destacable es la liviandad y aparente movimiento de los flecos que simulan ser movidos por la brisa. Una ocasión especial, de una mañana especial, de una primavera que ojalá también sea especial.








Para terminar, quedan ustedes invitados a un aperitivo.


20 marzo 2012

INTERCAMBIO CULINARIO

Déjame tus inquietudes,
te las adobaré
y te las devolveré
horneadas de esperanza.


Entrégame tus desconfianzas,
te las endulzaré
y te las reintegraré
con guarnición de ilusiones.

Confíame tus miedos,
te los sazonaré
y te los desmoldaré
napados de confianza.

Deposítame tus pesadillas,
te las amasaré
y te las serviré
emborrizadas de ensueños.

Hagamos un intercambio:
tú me das me das tus quebrantos
y yo te los transformo en ilusiones
con las que caramelizarte.

19 marzo 2012

¡FELICIDADES, PAPÁ!

¡Felicidades, papá! Sí, papá, así te llamé siempre y así me sigue pareciendo lo muy cercano que tú eras conmigo; lo de padre me suena a la distancia de un registro o un formulario, por eso sigo llamándote como siempre papá. ¡Qué hermosa palabra! ¿No es cierto? Hoy, cuando todos celebran el día del padre, te echo especialmente de menos. No creas que sólo hoy, sino cada uno de los días desde que te marchaste. Cuando lo hiciste eras bastante más joven que yo ahora, a pesar de lo cual sigo echando de menos tus sabios consejos y tus desvelos. Tú no lo sabes, pero me casé; sí, con mi novia única. A ella sí la conoces. Nos han pasado los años por encima, pero sigue igual, interiormente igual. Tuvimos dos hijos varones y del mayor tenemos otros dos varones que están preciosos. Ahora soy yo una especie de patriarca cuando me rodean mis hijos y mis nietos, momentos en los que tú sigues siendo un pellizco en mi alma, como cuando tus pies eran el apoyo de los míos.


No puedo olvidar tus muchos desvelos y cómo me inoculaste el placer de la lectura, el gusto por el trabajo bien hecho y la ambición de mejorar internamente por encima de las condiciones económicas. Me casé en el pueblo, pero seguí viviendo en Madrid, en el piso que conociste, tan soleado y con una mirada extensa sobre el parque desde la altura. Ahora te sorprendería mucho saber que llevo veinte años en Sevilla. Sí, en Sevilla. Yo era un niño cuando escuché hablar por primera vez de Sevilla y eras tú quien lo hacías. En muchas ocasiones, cuando paseo por la ciudad, identifico las calles y plazas con esos nombres en tus labios que sonaban a leyenda: Sierpes, Siete Revueltas, La Alfalfa, El Arenal, El Guadalquivir, ¡oh, el Guadalquivir…  Tú me explicabas lo que era un verdadero río, pero yo sólo tenía la referencia del Almadán y no podía comprender tal caudal de agua.

Javier, mi hijo mayor, se parece mucho a ti; el otro, Carlos, físicamente se parece más a la familia de su madre, pero ambos son estupendos. Javier es perito agrícola. ¿Te imaginas? Le he explicado muchas veces lo feliz que te hubiera hecho asesorándote sobre tus naranjos, tú que recurrías a enviar muestras a institutos lejanos. Carlos se dedica a algo desconocido por ti que se llama telecomunicaciones, por cierto, que circunstancialmente está en el oriente remoto y frío desempeñando su labor. Las cosas son más o menos como siempre. Se murió el general creyendo haber dejado todo bien atado, pero no tardó mucho en desatarse. Sí, son las cosas distintas, pero más en las formas que en el fondo; quiero decir que seguimos teniendo que ir detrás del trabajo, como siempre. ¡Nadie te saca las castañas del fuego sino tú mismo! Vivimos un régimen democrático, con derecho a voto, pero nos queda la sensación de que hacen con nuestros votos lo que quieren.

¡Me gustaría tanto contrastar tu parecer, contar para siempre con tu apoyo! Yo creo que me acostumbraste mal y luego te llevó la vida por delante cuando ni siquiera había cumplido tu ciclo de madurez. Mamá quedó muy desolada, pero le ayudó mucho su carácter fuerte. Ahora que caigo, seguramente ya os habréis encontrado y te habrá puesto al día. Tal vez, ahora que lo pienso, podría haberme ahorrado gran parte de las cosas que te cuento. Aún guardo en mi mesita de noche tus documentos; no me sirven para nada, pero es una manera de tenerte cerca. En fin, papá, que te sigo queriendo hasta y para siempre. ¿Sabes? Ya no soy tan tímido. Hay cosas que las cura la edad. No olvido que un día te enfadaste porque no conseguiste de mí que declamara ante tus compañeros de trabajo a Gabriel y Galán y luego lo he hecho hasta con textos propios. ¡Cómo cambia la vida, papá! Lo que no cambia es mi amor por ti, como estoy seguro que el tuyo no habrá cambiado tampoco. Te dejo, papá, ya llegan mis hijos y nietos a celebrar con nosotros el día del padre. ¡Felicidades, papá! ¡Muchos besos!

18 marzo 2012

YA SON CASI DE MIL

Un titular de prensa llama hoy mi atención: Interior reducirá los escoltas a PSE y PP en Euskadi. ¡Ya era hora, parecía que nunca más saldría el sol de entre las oscuras tinieblas del terrorismo! Deduzco que este paso tiene que ver con el abandono del terrorismo de ETA y no con los recortes que llegan, se anuncian y se sospechan. En febrero del 2000, como consecuencia de otro titular de prensa de signo contrario, escribí el poema que sigue:


Alguien ha salpicado la calle
de entrañas humanas:
dos manchas carmesíes,
dos muertes prematuras
de intolerancia y silencios.
Ahora,
noticiarios de efervescencias desbordadas
por setenta y dos horas,
miles de flores con las que enjugar
el llanto desabrido,
manifestaciones multitudinarias y silentes,
y luego, el olvido;
así, vida a vida,
sangre a sangre,
ya son casi mil las víctimas.

17 marzo 2012

NUNCA FUE EL JAZMÍN-B

El pasado día 26 de febrero publiqué este mismo poema. En él hablo de la convalecencia de una de mis operaciones de columna y la visita diaria de María llevándome un ramito de jazmines; ya era muy mayor, pero tan cariñosa y dulce como siempre.Ayer me ha dado  Beatriz Salas la sorpresa al publicar en su blog este poema, poniéndole su voz y la música de Ruth, lo que podemos reproducir pinchando aquí. Mi agradecimiento eterno a María por la dulce caricia de sus visitas y sus jazmines, y mi agradecimiento al tándem Beatriz-Ruth por engrandecer mis palabras con la calidez de su voz y la armonía de la música. 




 A María la Fría, a quien sigo amando después de su marcha.

Nunca fue el jazmín tan presente,
ni tan constante, ni tan intenso
como el que endulzaste para mí
en tus ancianas manos
embelleciendo mi dolor.
Me consta que has hurtado
en jardines vecinos,
pues en tu ventana de amor
sólo quedan aromas
de tus frituras de antaño.
Cada tarde,
tan inexpugnable y fiel como el crepúsculo,
el aroma a jazmín precedía a tus mullidos pasos,
para poner miel sobre mi herida.
María, aún perdura en mis anocheceres
tu beso florido que, por insistente,
se ha hecho biznaga indestructible en mí;
y cuando esté o cuando no en Ojén,
y cuando sea el estío,
y cuando sea el otoño,
y cuando haga frío,
y cuando tu no estés
seguirás morando para siempre en mi corazón,
-enredado a tu sonrisa de amor-
con la firmeza indeleble
del aroma con el que me has perfumado.

16 marzo 2012

YO CONOCÍ

Yo conocí un estado anterior al del bienestar, ese mismo al que parece que regresamos de nuevo sin remisión.  Eran los años cincuenta. Para mí la plaza era un lugar de juegos, como lo era también la calle, todas las calles; eran muy escasos los vehículos a motor, mas si acaso aparecía uno de tarde en tarde, se hacía notar desde lejos y le dejábamos paso como le dejábamos paso a las bestias y arrieros. Por la noche, la plaza era tomada por los hombres a la espera de que alguien les ofreciera una jornada de trabajo para el día siguiente.


Yo conocí un estado anterior al del bienestar, cuando enfermar era un lujo que no estaba al alcance de todos: había que pagar al médico y luego pasar por la farmacia con la cartera bien repleta. A los sesenta todos eran ancianos y hablaban con nostalgia de sus tiempos mozos, de la agilidad perdida y de los familiares y amigos caídos en la guerra. Se vivía el miedo y no se transmitían las ideas porque éstas venían envueltas en el celofán de la sospecha y en la oscura transparencia de la acusación. Los que no se resignaban y los más intrépidos se veían forzados a emigrar.

Yo conocí un estado anterior al del bienestar, y hasta es posible que mis hijos y mis nietos logren conocerlo en este bucle que teje los caprichos del tiempo. Como vuelven las modas, la vida gira y gira y nos quiere presentar una cara que creíamos enterrada para siempre. Ahora no van las personas a buscar trabajo a la plaza, tampoco a la oficina de empleo; dan vueltas y vueltas y empapelan todo con currículos que nadie lee y que seguramente acabarán en las papeleras.

Yo conocí un estado anterior al del bienestar, y hasta llegué a ver en un cajón de casa un ejemplar de la cartilla de racionamiento, ya caduca y amarillenta. Existía un flujo de personas que iban de un lugar a otro y pedían por Dios escondiéndose de los civiles para no ser acusados de vagos y maleantes; un tiempo en el que la edad laboral se iniciaba en la niñez y la escuela tenía horario nocturno, pizarra y pizarrín; también conocí un progreso que nos contaron que sería ilimitado, pero no nos dijeron la verdad.

15 marzo 2012

DESINHIBICIÓN

Dice Jesucristo: “De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos” (Mt 18, 3). ¿Quién no ha sentido en más de una ocasión la tentación de volverse como niño? A todos se nos ha escapado alguna vez la expresión: ¡quién tuviera 30 ó 40 años menos y lo pasado,  pasado!

La foto corresponde a la fuente descrita, pero no aparecen en ella los niños por privacidad.

Había salido de casa con algunos quehaceres y gestiones que realizar, algunas de las cuales estaban enumeradas en una pequeña lista como auxiliar de la memoria. Regresaba a casa contento, ya que en no mucho tiempo había logrado todo los objetivos propuestos. El día estaba luminoso y la temperatura más que veraniega: 28 grados y escasa humedad en el ambiente. La primavera se ha instalado de repente, sin haberlo solicitado, y antes de tiempo. En los árboles los brotes son ya algo más que yemas y el azahar ya está incipiente en algunos recovecos bien abrigados y guarecidos de los vientos; aún no huele, pero está muy próximo a que se inunden las calle del aroma característico y penetrante. En las terrazas, muchas personas en los veladores, unas con el desayuno y otras con las primeras cervezas; muchos en manga corta y algunas en tirantes buscando los rayos de sol con los que teñir las pieles blanquecinas de encierro; el reloj de la torre marcaba la hora del ángelus.

Al cruzar la Alameda, dos angelitos, escapados o consentidos del cuidado de sus padres, se han descalzado y corretean por entre las cortinas vaporizadas de agua de la fuente, desinhibidos como corresponde a su edad. En más de una ocasión he criticado estas fuentes tan simples y anodinas que parecen lanzar vapor de agua a escasa altura, sin sonido, sin evolución, sin misterio; sólo una especie de vapor frío que la brisa mece a su antojo. Los dos angelitos estaban pingando; descalzos, pero con los calcetines no corrían riesgo de perder el equilibrio. Se les veían felices y sus risas eran audibles a cierta distancia. El periódico se me había hecho insufrible ya en los titulares y en las lindezas que se brindan unos candidatos a otros tratando de conseguir el voto: lo doblé con mimo y lo coloqué en la papelera. El espectáculo estaba servido en la fuente: dos criaturas de unos 4 y 6 años, correteaban por entre los surtidores chapoteando agua a todo placer. En la contemplación me he sentido como niño y he comprendido las palabras de Jesús: para gozar de algo simple, pero extraordinario, hay que desinhibirse, hay que ser como niños.

14 marzo 2012

DICK TURPIN

Con el nombre de Dick Turpin se conoce al que fuera famoso bandolero inglés del siglo XVIII. Su verdadero nombre era Richard Turpin, pero era conocido por el apodo de Dick. Hijo de agricultor y posadero, en sus años mozo aprendió el oficio de carnicero, si bien pronto emprendería sus actividades delictivas robando ganado para su industria; una vez descubierto consiguió fugarse y llegó a convertirse en salteador de caminos. Pasó a formar parte de una célebre banda, pero más tarde formó pareja con otro compañero y amigo de lo ilícito y se dedicaron a asaltar carruajes, adquiriendo pronto renombre legendario. Posteriormente cambió el campo de operaciones a Lincolnshire y Yorkshire, orientando su actividad delictiva especialmente al robo de caballos y ganado. Sin embargo, fue atrapado por la justicia, juzgado en York por el robo de caballos y condenado a muerte, siendo ahorcado en York el 7 de abril de 1739.


En los años ochenta se emitió una serie televisiva de la BBC que relataba las peripecias de este bandolero, con un perfil romántico como el de Diego Corrientes, que también favorecía o redistribuía a los pobres, lo cual le da una dimensión populista que llega mucho a todos los públicos. Hasta aquí la historia de un bandolero británico como la de tantos otros con mezcla de historia y leyenda. Lo que me ha resultado muy curioso es descubrir un pub en Ronda (Málaga) con el nombre de Dick Turpin Inn, en una tierra donde sobreabundan los nombres de famosísimos bandoleros autóctonos tales como Tragabuches, José María el Tempranillo, Pasos Largos, Flores Arocha y una lista casi interminable de bandoleros que sembraron de fechorías la Serranía de Ronda. Seguramente la agudeza comercial cree poner en mejor conexión el establecimiento hotelero con el nombre del bandolero inglés que si llevara el nombre de un nativo, pero lo cierto es que a mí me sigue pareciendo muy curioso.

13 marzo 2012

SEGUIMOS


Me hiciste tuyo a tus dieciséis
y me habitaste a tus veintitrés,
pero te esperaba en la prehistoria,
donde te había conformado a mi capricho
hasta dar contigo y apetecer
la unificación
en las lindes de una vida común.

No creo haberte soñado;
desde luego no te esculpí en sueños,
pero tenías que existir,
supe que tenías que existir
y que se produciría el encuentro
en el momento oportuno.

Allí estabas;
sólo con verte por primera vez
supe que eras una página de mi prehistoria
y te identifiqué como pertenencia mutua;
prometí volver…  teníamos testigo.
Nuestro destino era la confluencia
y nos bañamos en el arroyo
de los días y en la espera del conocimiento
más y más profundo;
y nos seguimos conociendo
y nos seguimos amando.

Seguimos;
tú me hiciste tuyo y yo te hice mía,
pero venimos de la prehistoria
y caminamos hacia el futuro.

Seguimos…

12 marzo 2012

EL PERRO DEL HORTELANO

Con muy fundada razón lo clásico ocupa un lugar indiscutible en el canon y es garantía de calidad. Es costumbre que la Compañía Nacional de Teatro Clásico acuda una vez al año al sevillano Teatro Lope de Vega. En esta ocasión poniendo en escena El perro del hortelano, obra que fue impresa por primera vez en 1618, incluida en la  Ocena parte de las comedias del Féñix de los Ingenios. Una obra de madurez que responde plenamente a lo planteado en el Arte nuevo de hacer comedias.


Se trata de una comedia palatina que cuenta los turbulentos amores entre una dama, Diana, la condesa de Belflor, y su secretario, Teodoro, un joven galán que trabaja a su servicio, por tanto de condición social inferior a la de ella, pero que hace gala de ingenio en su oficio de escritor, así como en los galanteos amatorios con la sirvienta Marcela. Tras una serie de peripecias y mudanzas, con el acicate de los celos de Diana y la ambición de Teodoro, finalmente la pareja puede unirse en feliz matrimonio, tras el paripé ante el público de la agnición por la que se descubre un falso origen noble para Teodoro. Las apariencias son salvadas gracias a un engaño para que triunfe la unión de dos personas en principio separadas por su distinta posición social.

La comedia está versionada y dirigida por Eduardo Vasco quien bien podría haberse ahorrado las modificaciones con las que compartir autoría, llevando a la exageración bufa de ciertos personajes con resultados estridentes. La escenografía, acorde a los tiempos, es casi minimalista, en cambio la música no desdice, sino que acompaña y enmarca muy bien cada una de las escenas. Del vestuario se me ocurre decir que está dentro de los márgenes del decoro, destacando por su belleza ornamental el vestuario de Diana. De subrayar son las interpretaciones de los tres principales personajes Diana, Teodoro y Tristán: Eva Rufo, David Boceta y Joaquín Notario. Acabada la representación, el público, con sus aplausos, hizo que el elenco saliese a saludar cuatro veces y se oyeron algunos bravos.

11 marzo 2012

AUTÓNOMOS

                                              A  M. I. L. B.

Que PYMES y autónomos son la columna vertebral de generación de empleo no lo pone nadie en duda, si bien son las grandes empresas las que cuentan con mayor predicamento social; pero muy injustamente son los pequeños empresarios los que, dando mayor número de puestos de trabajo, atraviesan mayores apuros económicos y ello derivado de las dificultades que atraviesan para el cobro de sus esfuerzos laborales.

El gobierno pone en marcha estos días un volumen considerable de créditos destinados a que las administraciones liquiden sus deudas, pero las condiciones no son las idóneas y en muchos casos llegan tarde y hasta demasiado tarde. Ya sé que no son los únicos, pues son bastantes los funcionarios de algunos ayuntamientos que llevan meses sin cobrar su salario. El retraso en el cobro, ese cáncer de la modernidad económica, pone en el precipicio de la desaparición a autónomos y pequeños empresarios que a su vez dejan la pelota en el alero de sus proveedores y trabajadores.


Como el universo del que hablo es muy extenso, quiero centrarme, por cercanía familiar, en el caso de un transportista autónomo y sus peripecias para sacar su vida adelante. A pesar de que son muchos los transportistas que ya han desaparecido, la falta de obra pública y el parón en la construcción hace que lo suyo no sea movilidad geográfica sino una travesía llena de dificultades en pos de uno de los escasos tajos existentes en aquella provincia donde tenga la suerte de encontrarlo. Lejos de su casa, tanto la comida como el hospedaje no admiten demora en el pago, así como el gasóleo que, si acaso puede diferirlo, tiene que hacerlo efectivo cada mes, de forma que si para el día cinco no ha abonado el monto total se le corta el grifo y no puede volver a repostar combustible. Él por su parte, en el mejor de los casos, trabaja e invierte para cobrar a los tres o a los seis meses si lo hace para una gran empresa. Hasta ahí todo dentro de los usos y malas costumbres, pero la sorpresa llega cuando a la hora del cobro recibe un pagaré y todas las dudas de si verdaderamente será efectivo en la fecha indicada, amén de las muchas trabas y aplazamientos hasta lograr tener el pagaré en la mano por las más nimias excusas. Cuando sucede lo tan frecuente que en la fecha concertada el firmante del pagaré no tiene saldo, en lugar de ir el banco contra el infractor lo hace sobre aquél que creía haber recibido el pago de su trabajo y se lo cobran con gastos.

De todo ello se deriva que los proveedores de piezas y reparaciones de este transportista también son, en muchos casos, eslabones de esa cadena sin fin de estrangulamiento económico. Si nuestros políticos quieren que las cosas marchen mejor, entre otras vicisitudes, deben poner los medios para que el sistema de cobro esté garantizado para todo aquel que pone su voluntad, sacrificio y esfuerzo en hacer un trabajo digno para ser digna y puntualmente recompensado.

10 marzo 2012

ABULIA


Algunos días me levanto sin ganas;
hoy me levanté sin gas,
como con un lento insomnio;
ayer también me levanté sin ganas,
como anteayer y el otro y el otro…

La semana pasada me levanté sin ganas,
y la anterior, y la anterior, y la anterior…

Hace tiempo que me levanto sin ganas;
tanto los días grises como los luminosos,
los días tristes y los días alegres.
¿Acaso los días son alegres?

Todo lo habita la abulia
desde que te alejaste
y te llevaste contigo la guía de mis pasos;
ya no encuentro la emoción
de emprender un nuevo día
y apearme de esta nube
en la que moro, en la que muero.

09 marzo 2012

DE AMOR Y FIGURACIONES


Me apenan tus recuerdos
porque evocas ausencia;
en mis oídos el escalofrío de tu adiós
y las promesas incumplidas
entre besos y juramentos.

Me apenan tus recuerdos
porque me repiten abandono;
en mi cabeza el eco reiterativo
de un idilio fragmentado
entre decenas de promesas
y arrumacos que conjugaba el universo.

Me apenan tus recuerdos
porque el tiempo los desvanece;
ahora no sé si fueron pronunciados
o si los mascullé en el oído interno
de mi voraz e insaciable deseo.

08 marzo 2012

EL LIBRO DE LA VIDA



                               A José Lorente Márquez

El libro de la vida
te ha presentado su última página
en la cortedad de tus días,
marcándole un gol a las estadísticas
que sólo entienden de promedios.
Hicimos palotes juntos,
deletreamos y hasta
engarzábamos problemas y quebrados
en aquellos pupitres dobles
con tintero central de plomo
rellenos con agua de Los Chorros
y un sobrecito de polvos mágicos
que suministraba D. José Alcalá
—bien agitada—  y que tintaba los dedos.
Los lápices Alpino y los plumieres,
además de los juegos en la Plaza,
fueron nuestra común infancia;
luego, la vida nos llevó por senderos dispares
y nos hizo confluir en la edad madura
con problemas de salud:
tú con un corazón achacoso
y yo con mi espalda remacha
 de titanio en cuatro ocasiones.
Dan nombres raros a las enfermedades raras,
pero la única rareza,
lo difícil a estas alturas de la vida,
es seguir perdiendo amigos
o ganándolos para el encuentro final.
Has dejado José, una trayectoria serena
de hombre templado, ecuánime y pacífico;
hiciste de la paz una ocupación seudoprofesional
de la que sólo te has lucrado en prestigio
y autoridad moral de hombre justo
que te ha debido servir de credencial
allá donde lo que cuenta son las obras.
Nos distanció la vida por sendas diferentes
y ahora nos distancia tu muerte
hasta que la mía nos reúna de nuevo;
tal vez compartiendo pupitre
y poniéndonos al día
de este tiempo de ausencia y misterio.
No es la muerte; la vida es el misterio
que ya debes haber desentrañado.
¡Descansa en Paz, José!

07 marzo 2012

LA BELLEZA

Tal vez, lector, en alguna ocasión te hayas preguntado qué es la belleza. Yo así lo he hecho y me propongo ahora transmitirte mis consideraciones. El término belleza viene del latín bellus, bonito, tan relacionado con bueno, de bonus. La primera acepción del DRAE la define como: “propiedad de las cosas que hace amarlas, infundiendo en nosotros deleite espiritual”. Pero también bello es lo visto con luminosidad, armonía y orden. Visto lo visto, podemos afirmar que la belleza está en la cosa contemplada, en el exterior, si bien ya veremos más adelante que hay otra belleza interior aun más sofisticada.


Existe una belleza natural que nos llega por la contemplación de la naturaleza: un cielo despejado o con nubes en evolución movidas por el viento que construye figuras caprichosas en los cielos,  una arboleda frondosa donde la brisa juega entre sus ramas y emite sonidos como silbos, un pájaro que vuela planeando las capas aéreas como sin esfuerzo y otro que construye con esfuerzo y empeño un nido con ramitas, un valle verde donde pace un rebaño y es serpenteado por un arroyo cantarín…  Bellezas que sin duda entran por los sentidos y lo hacen de fuera hacia adentro. Lo mismo sucede con la belleza artística; también de fuera hacia adentro nos llega las armónicas formas de un edificio, de las artes plásticas, de una representación teatral, de los acordes sublimes de la música, etc.


Pero existe otra belleza que no va de fuera a adentro como las anteriores, sino que reside en nuestro interior y que son la armonía, el equilibrio y el orden. Es la bondad de la persona que hace el bien por un desconocido, es la armonía y el orden de una persona cuya vida guarda un equilibrio entre sus ideales sus acciones y conducta, la belleza que mana del interior para saciar las necesidades de los demás. Esta belleza interior se exterioriza en resplandores de bondad, veracidad, honestidad, coherencia, simplicidad, encanto, armonía y equilibrio, para contribuir con nuestra vida y nuestras obras a hacer de este mundo un lugar apacible y más habitable. Frente a un estado de ánimo angustiado, violento, ansioso, apático, atormentado, egoísta, rencoroso, vanidoso, orgulloso, vengativo, opongamos optimismo, comprensión, perdón, positividad y servicio a los demás, con buena predisposición a dejarnos invadir por la incomparable belleza de las cosas más pequeñas, cotidianas, aparentemente insignificantes y sobre todo por vivir plenamente hacia el otro.  Esa es la belleza que sale del corazón y va de adentro hacia afuera.

06 marzo 2012

SILENCIO BLOGUERO


No he mentido;
he callado que me fui al mar
y me he encontrado mi pasado
al que me gusta volver
para reinventarme de nuevo.

No he mentido;
dejé programadas varias entradas
que fueron goteando día a día
con la misma periodicidad
que el alba releva a la madrugada,
por eso mi silencio bloguero
en tu página y en algunas que sigo.

No he mentido;
omití y no mentí,
me fui al mar,
a la mar, a Marbella,
donde vive mi infancia
y primera juventud
como vive el fuego del amor
en el primero y
en cada uno de los besos.