Viene, se arrellana entre nosotros
y nadie sabe cómo ha sido
ni por qué el pasto se reseca
y la sed en los labios es seca mueca.
No avisa, entra por sus fueros
y por el fuego de su ardor:
vence a todos y a todos acalla,
en la plenitud de la siesta canalla
Ligeros de ropa, la playa es destino
portado todos similares bártulos:
a tomar posesión de arenas ardientes
y clavar la sombrilla apretando los dientes.
Tan en proximidad unos con otros
que la intimidad es negociado fracaso:
senos y cosenos cubiertos por lo mínimo
y en mínima parcela todos convivimos.
Todo el año soñando que llegue el verano,
los que abundan en bienes, con su ancla
y su barco, los que no tienen nada,
pero también presumen no queriendo ser menos,
los del chiringuito y el de los espetos,
presumiendo de haberes y escaso respeto.
Hace tiempo que no piso la playa, los últimos cinco años han sido de montaña, piscina, yakuzzi y mucha tranquilidad.
ResponderEliminarUn abrazo.
El verano es un tiempo asociado al ocio y no hay una única dirección hacia la playa. Por supuesto que no.
EliminarUn abrazo.
Yo que tengo tanto frío acá en Argentina desearía ese calor, aunque cuando viene luego no hago otra cosa que quejarme jaj. Es que los dos extremos son feos (para mí) Bello poema. Un abrazo.
ResponderEliminarLa cosa es quejarnos, Luján. Nunca estamos conformes con nuestra situación, y como bien dices, todos los extremos se tocan. Ánimo ya se adivina el cambio en ambos hemisferios, ahora las quejas serán inversas.
EliminarUn abrazo.
Yo de momento no he ido a ninguna playa pero es bien cierto lo que dicen tus versos. Me gusta la playa pero muy temprano cuando apenas hay gente y el sol no calienta tanto. Saludos
ResponderEliminarTiempo atrás disfrutaba de la playa, pero con los años se me hace muy pesada y estando en la costa no suelo ir ningún día. Prefiero pasear a primeras o a última hora del día.
EliminarUn abrazo.
Muy bien descrito, pero a pesar de sus inconvenientes, me quedo con el verano
ResponderEliminarNo hay dudas de que el verano es un tiempo alegre, tiempo de vacaciones y de ocio, ropa ligera y paseos hermosos. Yo también disfruto mucho el verano, Tracy.
EliminarUn abrazo.
Como sea que esté el verano, que nos dure mucho. Que el invierno...
ResponderEliminarAbrazos.
Las personas también nos quejamos de aquello que nos gusta y nos divierte, Sara. Así de extraños somos.
EliminarUn abrazo.