se asemeja a una historia sin palabras,
a una trama enmudecida
donde se han desvanecido las palabras.
No existe el diálogo,
tampoco la música subraya lo acontecido.
Cuando lo vivido, también lo soñado,
es memoria
todo transcurre en un mundo interior
del que no encuentra la salida.
Hay unos cuantos que quieren borrar la memoria, pero no solo borrarla, también quitarla de los libros.
ResponderEliminarSaludos
Parece que no quieren borrarla sino tergiversar los acontecimientos.
EliminarUn abrazo.
Francisco, la memoria y vivencias de cada uno forma parte de la intrahistoria de los pueblos...Cada cual guarda sus recuerdos buenos y malos, reposando en el interior...También está la historia colectiva, que todos vivimos en los acontecimientos históricos, culturales, económicos y sociales del país...Todo es relativo, porque con el tiempo los historiadores la van cambiando según sus criterios e ideas personales.
ResponderEliminarY es una pena, porque la historia hay que valorarla y respetarla siempre; comprenderla en su momento histórico y no mirarla desde el presente, porque todo evoluciona y ya es difícil entenderla...
Mi abrazo y feliz semana, amigo.
Tienes muchísima razón, María Jesús. Por cierto, esos historiadores renovadores a los que mencionas no son tales, son manipuladores de lo inamovible. Gracias infinitas por tu rico comentario.
EliminarUn fuerte abrazo.
Lo vivido tiene el valor de servir de recordatorio y a veces no queremos recordar.
ResponderEliminarUn abrazo
Es cierto que a veces no queremos recordar, y es que siempre nos gusta salir en la foto con esa perfección de la que carecemos.
EliminarUn abrazo.