Me ha nacido un hilo de voz
en lo avanzado del camino,
un manantial que sueña en lirismo
y despierta con fulgor y esperanza,
como polluelo añoso que ensaya
un acrobático vuelo sin motor.
Ahí estás tú. Ahí estoy yo. Ahí ambos,
de la mano y al unísono,
entremezclando nuestros miedos
y nuestros horizontes y sueños.
En la caracola de tu oído
la caricia de mi voz
buscando eternamente tu sintonía,
y en tu lóbulo el centro neuronal
donde permanecer entrelazados.
Escucha, mi amor, la musicalidad
que respiro y me inspira,
como siembra milagrosa en barbecho
que busca por siempre tu favor:
ahí estás tú. Ahí estoy yo. Ahí ambos.
¡Qué bonitooooooooooooooooooooooooooooooooooo!
ResponderEliminarBonita tú.
EliminarUn abrazo.
Siempre juntos y a la par. Hermoso querido Francisco. Un abrazo.
ResponderEliminarEn ello estamos empeñados, Luján.
EliminarUn abrazo.
Ahí ambos creando y recreando la vida, inspirándoos mutuamente y dejando vuestra cosecha de amor por doquier...Francisco...Gracias por ello.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y mi cariño, amigo.