Se ha dormido de nuevo
el ángel y ha despertado la
Bestia
en el afilado vértice
del contenedor de un mal
sueño
convulsivo y agitado.
Hay días aciagos
donde la tormenta es furia
por el rebosadero
de la incontinencia,
y agua, rayo, trueno y fuego
se apoderan de las flaquezas
y espolvorean los espíritus
con polvo de azufre.
Es verdad Francisco. Hay días aciagos. Pero van y vienen, no llegan para quedarse.
ResponderEliminarApapachos.
Eso espero, ya que como una premonición, este poema ha salido publicado en una mañana donde... tuve que regresarme a la cama. Ya me siento mejor.
EliminarApapachos.
En estas fechas hay demasiadas furias, veremos hasta donde llegan.
ResponderEliminarSaludos
Conociéndote, creo que te has derivado hacia el terreno político-social. Creo que veremos cómo esta furia cooperativa del momento se va desinflando como un globo de espuma sin hacer ruido. ¡Ay, las campañas electorales!
EliminarUn abrazo.
Siento que no te encontraras bien, pero como dice María del Carmen Nazer los días aziagos van y vienen. pero para ti hasta en los días desagradables los conviertes en poesía.Eres especial. Un abrazo
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