Así como la ola
va dejando un festón de
nácar
sobre la arena dorada,
ella es ese perfil diáfano
y no segmentado
que ni nace, ni muere
jamás.
No tiene origen ni
destino,
sino que viaja
longitudinalmente
desde donde tenemos la
fortuna
de encontrarla
hasta perderse en el
infinito y más allá;
siempre con idéntica
silueta,
siempre erecta y siempre
firme.
Nunca duda, nunca vacila,
sus ideas son claras y
sencillas;
no tiene otra preferencia
que hacerse infinito
sin ayuda de bucles ni
terraplenes,
sin dejarse influir por
aquello que le rodea
o que la moda pone en boga
en los débiles de carácter.
En su propio medio
hay otras líneas
caprichosas
que oscilan con la banalidad
de las ideas ajenas;
ella no, su carácter es la
firmeza
y su vocación sempiterna,
sin caducidad,
como los símbolos que
nacen
para prevalecer. Firme.
Muy firme.
Tanta linea recta tampoco es bueno, a veces hay que hacer algunas curvas, e incluso quebradas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Passando, vendo, lendo, gostando, elogiando.
ResponderEliminar.
Cumprimentos poéticos.
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Pensamentos e Devaneios Poéticos
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Hay que ver todo lo que te ha inspirado la ola, deberíamos aprender de su firmeza.Saludos
ResponderEliminarAsí como la ola, sea nuestro querer el prójimo, que allí se mantenga siempre presente, a pesar de todo.
ResponderEliminarAbrazos.