03 noviembre 2022

ÉBANO



 

Ébano, madera irreductible

de piel sedosa y vetas acarameladas,

negra como noche sin luna,

atractiva, brillante, toda de luz,

opacidad vencida y desterrada.

 

Ola de nácar negro

cuando se aproxima y me sobrepasa,

me aterro, me agito

y me siento desbordado

con agónico temblor

a ser ocultado de manera inminente

en las profundidades marinas

o en una galería de magma usurpada.

 

En sus ojos el brillo de la inocencia,

la luz angelical de quien se conduce

por el camino de la infinitud extrema;

en el marfil de su boca, en su cráter

iluminado, su inmaculada esencial,

y en sus tiernas y tersas manos

la delicadeza hecha ternura,

de la que quisiera ser el objetivo.

4 comentarios:

  1. Neguinha linda. Poema fascinante de ler.
    .
    Cumprimentos cordiais e poéticos
    .

    .

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  2. Una mujer guapísima, no me extraña que haya sido fuente de tu inspiración...tienes buen gusto Francisco.Saludos

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  3. Tu poema es todo un homenaje a la belleza femenina. Muy bello e inspirador, Francisco.
    Mi abrazo siempre, amigo.

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  4. Hermosa mujer, es una diosa digna de tu espectacular poema.
    Un abrazo.

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