Porque es más
fuerte el deseo que la voluntad,
porque no puedo
saciarme sin ti,
porque te pienso y
casi te doy alcance,
porque todo está en
huida jabonosa,
porque te formulo
en mi mente y apareces,
porque mis brazos
nudosos tomaron tus medidas,
porque no hay
distancia que sea ilimitada,
porque mi frío se
asfixia sopesando el fuego de tu boca,
porque mi rugido
anuncia erupción volcánica,
porque quiero
esconderme detrás de tus caricias,
porque solo tú
domeñas mi tormenta y me apaciguas,
porque corta y es
frío el filo de la media noche,
porque no existo si
no es en ti, por ti y contigo,
porque me puede el
impulso y la razón se adormece,
porque no sabría
qué destino dar a mis manos en el vacío,
porque no hay vida
fuera de ti y tampoco esperanza,
porque en tu
vientre anida el latir al que me acompaso,
porque esta herida
solo la suturan tus besos,
porque no encuentro
salida y el alba ya apunta,
porque puedo
renegar de mí, pero no de ti…
Razones.
Y son unas cuantas. Y de peso.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
La objetividad no es precisamente una constante para el peso como lo es la gravedad, pero sí, Cayetano, son razones de peso.
EliminarUn abrazo.
Hola Francisco. ¡Madre mía que cosas más bonitas! y cuantos porqués afirmativos le dedicas a la vida y al amor. Preciosas frases.
ResponderEliminarAbrazos
Gracias, Isa. Si lo has pasado bien leyéndolo, ya me doy por satisfecho.
EliminarUn abrazo.
En el Amor no hacen falta razones, simplemente se Ama pero tu corazón de poeta enamorado te "exige" esas razones....Un poema precioso.Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias Charo por tu comentario y en especial por tus lecturas diarias.
EliminarUn abrazo.
No hay que buscar las razones...hay mucho sentimiento en ello y mucho AMOR.
ResponderEliminarBesos
“La razón de la sinrazón, que a mi razón se hace, de tal manera mi razón enflaquece, que con razón me quejo de la vuestra fermosura”. Esto te contestaría para hablarte de mi Dulcinea, querida Antonia.
EliminarBesos
Repites esa conjunción causal, que, anafóricamente, nos va dando las razones, que un enamorado tiene para seguir unido a su amada y no prescindir de ella en ningún momento, Francisco. Creatividad, entrega y pasión en tus versos.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo dorado de otoño.
Ya sé que cuento con tu afecto y que es recíproco, pero lo que no esperaba es tu análisis. Gracias, María Jesús, un día más.
EliminarUn fuerte abrazo.
Razones de amor. Lindo poema amigo Francisco, saludos.
ResponderEliminarRazones de amor que no pasa por la razón, sino por la vehemencia del corazón, Sandra.
EliminarUn abrazo.
Tercer comentario, si este se ma va, se acabó.
ResponderEliminarTe decía que todos estos porqués se resumen en uno, en el que está en el último verso.
Cuánta riqueza hay en tu poema. Todo lo que una no sabe expresar lo pusiste t{u, aunque por supuesto al revés. No hay género para tu poesía. Gracias.
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