07 junio 2024

BANDERAS AL VIENTO

 



A mi amiga Larysa Chesnokova


El ánima vomita fuego

y el retroceso desajusta

la parábola diseñada por estrellas

y galones.


El alma. Pobre ánima,

no encuentra consuelo.


Las órdenes son de aniquilar,

de saltar por los aires

todo atisbo de vida:

el hambre y los hospitales

desabastecidos

o cubiertos de escombros

harán el resto.


No hay piedad. No la hay.

La industria armamentística

no puede parar de vender,

y los patrioteros entran al trapo.


Y enarbolan banderas al viento.

Y muertes masivas al hoyo.

Y almas que no hayan consuelo.


El ánima vence al alma,

pero no convence.

7 comentarios:

  1. Los patrioteros entran al trapo y tratan de convencer la mentira.
    Un abrazo.

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  2. Triste poema amigo...malditas guerras y malditos quienes las provocan. Saludos

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    1. Esta es la realidad de la vida, lo que está pasando y muchos no quieren ver, sino que nos entretienen con los juegos de banderitas.
      Un abrazo.

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  3. Y no pararan y no se le ve el final. Un abrazo

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    1. Larysa es una refugiada ucraniana. Ella aquí con sus hijas malviviendo de la caridad y su marido allá no sabe por cuánto o hasta cuando.
      Un abrazo, Chelo

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  4. Una pena, unos y otros sufriendo mientras los negocios y las armas siguen adelante, sin pausa, ni consuelo...No hay negociaciones de paz por ningún lado, Francisco.
    Mi abrazo entrañable y mi ánimo.

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