09 enero 2025

EL FIRMAMENTO DEL ABUELO

 




Se hizo acompañar por el nieto

al ceremonial nocturno de la azotea.

Debajo está el murmullo de la ciudad

y la estridencia de algún televisor

sobrenadando por encima de lo educado.

Lo tomó de la mano derecha,

le extendió el dedo índice

y le iba señalando a cada estrella

con la solvencia de haber paseado

por sus calles y avenidas con frecuencia.

Con el tiempo se había convertido

en ritual cotidiano. Otros abuelos,

a otros niños, narran cuentos o fábulas

cuando llega el momento del descanso.

Al abuelo solo le interesan los caminos,

las sendas y recovecos nocturnos de luz,

los vericuetos por los que su imaginación

se mueve cada noche con destreza,

salvo en días opacos o de densa lluvia.

Al parecer, según le contó su mamá,

el abuelo sintió una atracción incontrolable

por el nocturno mundo de las estrellas

cuando la abuela emprendió, un día aciago,

el inexorable camino sin retorno.

3 comentarios:

  1. Yo también veo al firmamento como el abuelo.

    🌹

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    Respuestas
    1. Pues es una delicia verlo de ese modo siempre esperanzado, Merche.
      Un abrazo.

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  2. Todos los niños sienten predilección por sus abuelos.....por lago será.
    Un abrazo.

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