La rutina de los años
no amaga con arruinar
la dicha del despertar más feliz
del niño que me habita,
con el sobresalto de que, un año más,
han llegado los Reyes Magos;
y no han pasado de largo.
Antaño, entre los útiles escolares,
se filtraba una pelota o un rompecabezas;
ahora, entre las promesas de los días inmediatos,
se ha colado un nuevo aniversario
y ya pasan la cincuentena.
No es fácil acabar con el sentido de la dicha
cuando la rutina viene salpicada
de un gozoso sobresalto.
Por la escalante yedra de los años
se agarra y afianza
la raigambre de lo largamente vivido,
y se hace culmen
en cada una de sus festividades
con longeva existencia.
Un año más paso a desearos feliz aniversario y sobre todo feliz vida . Un abrazo a los dos
ResponderEliminarGracias, Chelo, porque cuando apareces y cuando no, eres una constante en mi vida.
EliminarUn fuerte abrazo.
Bendita rutina.
ResponderEliminarUn abrazo.
Como bien dices, Emilio, bendita sea esa rutina.
EliminarUn abrazo.
La rutina nos provee de tranquilidad y sosiego. La ilusión se consolida, revivimos una niñez que nos acompaña.
ResponderEliminarSaludos
Muchísimas gracias, Francesc, por hacerte presente en mi rutina.
EliminarUn abrazo.
¡Feliz aniversario!
ResponderEliminarFuerte abrazo.
Muchísimas gracias desde el corazón, Sara.
EliminarUn fuerte abrazo.
Me alegro de que los Reyes Magos. Se hayan acordado de ti- Aparte del roscón de reyes, también he tenido mi buen regalo.
ResponderEliminarFeliz Año Nuevo. Un abrazo.
Muchísimas gracias, Antonia. Me alegro que hayas recibido tus agasajos.
EliminarUn abrazo.