18 octubre 2024

LLUVIA COPIOSA

 




Lluvia copiosa, anunciada y temida,

empequeñecida por los exagerados

anuncios y medidas precautorias.

Una manta líquida merodea los cielos

como amenaza acariciada

por la sempiterna sed de la tierra.

Ojalá en breve una sábana verde

cubra el secarral que nos circunda

y de testimonio de saciedad de la tierra,

salpicando la hierba fresca de flores

que son sones musicales de abundancia.

Aquella veladura blanca de la primavera

que habitó los campos preñándolos de futuro,

es hoy un amarilleo anaranjado casi en sazón.

Desde mis ojos entornados

paso del futuro siempre incierto

al pretérito que confirma la memoria

en los naranjos familiares: nunca,

nunca supo remotamente igual su fruto

que mondada con las manos subido al árbol

como integración de lo uno en lo diverso.

Lluvia copiosa. Música líquida de la lluvia

que en los cristales me ayuda a vislumbrar

ese pasado remoto, de nuevo factible.


6 comentarios:

  1. Por aquí la lluvia pasó de largo.
    Un abrazo.

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    1. En cambio la nieve ya se ha dejado ver en la cumbre.
      Un abrazo.

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  2. Cuantas cosas hay que nos invitan a recordar nuestro pasado. Hemos estado varios días sin parar de llover y hoy al fin ha salido el sol. Saludos

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    1. Así es, Charo, cada día es una novedad al tiempo que un recuerdo.
      Un abrazo.

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  3. La lluvia siempre nos trae cánticos de nostalgia, Francisco...Todos agradecemos la lluvia, nutre la tierra, nos calma la sed y limpia el aire...Es símbolo espiritual y además nos llena el alma de sentimientos...Bendita lluvia y ojalá nunca nos falte, amigo.
    Mi abrazo entrañable por tus profundos y bellos poemas.

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    1. Muchísimas gracias por tus continuos estímulos, María Jesús.
      Un fuerte abrazo.

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