10 octubre 2024

INDELEBLE

 



En la distancia, el bullicio

de la plaza es una agitación

del alma más que del cuerpo.

San Dionisio ya reposa de su caminata

entre velas quemadas

y flores que se marchitan.

Bajo un techo de farorillos

se ha desplegado una formación

de colores y lunares con luz propia;

orquestas en competición

se hacen sus relevos

y un hervidero de parejas

compite locamente en divertirse

como si no hubiera un mañana.

La plaza es el epicentro:

orquestas que se suceden

y una barra inmensa como sierpe si fin

compite con Los Chorros

escanciando y saturando la sed

de propios y extraños.

En mi memoria,

Pepe Barranco con su modesta rifa

y Monfrino rey póstumo e insustituible

de aquellos veinteañeros que fuimos.

No es una feria más,

es la Feria,

el momento presente

eternizado en la memoria

para el resto de nuestros días.

1 comentario:

  1. ¿Desde cuando no te pasas por la feria de tu pueblo?, yo , por la mia, ni me acuerdo, aunque al igual que tu aún recuerdo ir con mis hijos cogidos de la mano.
    Saludos

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