Los años me han desactualizado la mirada
y acabó siendo en su torpeza selectiva.
¿Acaso tenemos todos el mismo
campo de visión, una apreciación idéntica
de lo que sucede en nuestro entorno?
Miro al frente y a lo lejos
y solo veo aquello que había contextualizado.
Se desliza monte abajo, como un alud,
pero es una patraña sutilmente envuelta
en atractiva cobertura de chocolate;
el desnivel le hace sones rítmicos
que sabe a guarnición de lo verosímil.
Crece. Engorda. Crece sin parar la bola
según se difunde. Se infla
y hasta se derraman los adjetivos
de tanta incontinencia verbal.
Algunos tiros van a puerta,
pero la inmensa mayoría
se desparraman por los márgenes
como fuegos artificiales de jocosa feria.
“Cuando el río suena…”
El lodo lo enfanga todo
y el falso testimonio campea a capricho
con galope imparable a lomos de Babieca.
Se puede plantear casi una tesis sobre la mirada y la visión de las personas mayores, por ejemplo yo mismo estoy esperando una operación de cataratas en los dos ojos, sin embargo creo que unos ojos que me miran me engañan menos que cuando era joven, hay veces que la mirada te habla.
ResponderEliminarUn abrazo
Espero que tengas suerte y te llamen pronto. Yo tuve que recurrir a una hoja de reclamaciones y conseguí que se activara la larga espera.
EliminarUn abrazo.
Los años no pasan en vano y conforme avanza, vamos notando los problemas.
ResponderEliminarQue tengas un feliz domingo de descanso.
Gracias un día más por tu comentario, querida Antonia.
EliminarUn abrazo.