¿Cómo duermen, Señor, los especuladores,
quienes suben el alquiler
de sus bienes inmuebles
hasta el vértigo de lo imposible
y asfixian a las familias
y las hacinan en la más rotunda pobreza?
¿Cómo respiran, Señor, los violentos,
esos que ejercen su poder físico
contra la mujer, los jóvenes y los débiles?
¿Acaso ellos se sienten amenazados,
torturados, perseguidos o vilipendiados
por otros seres más poderosos y amenazantes?
¿Qué pasa, Señor, por la mente
y por el corazón o las entrañas
de quienes ponen sus energías
en estafar a los sencillos
con mensajes equívocos y amenazantes?
Señor, sé que me estoy excediendo,
pero ¿acaso es hiel lo que corre
por las venas de quienes
ordenan un bombardeo indiscriminado
en edificios públicos, escuelas,
hospitales o barriadas extremas o al azar,
con el objetivo único del exterminio?
Estas inquietudes que te expongo, Señor,
me llevan a una profunda decepción
del género humano. Tal vez, Señor,
¿no sería preferible no estar informado?
Pero no, Señor, prefiero estar atento
a todo lo que sucede a mi alrededor.
Hay muchos liberales camuflados en la izquierda, lo del bono para el alquiler es seguir engrosando la cartera de los que ponen pisos en alquiler y desean especular con ellos.
ResponderEliminarSaludos
Lo cierto es que es un asunto desbordado que tiene asfixiada a muchas familias y merece medidas contundentes y reparadoras.
EliminarUn abrazo.
Pues yo creo que si tienen hiel en vez de sangre y una roca en lugar del corazón, no tienen sentimientos de ningún tipo. Saludos
ResponderEliminarEstá clarísimo, Charo.
EliminarUn abrazo.
Carecen de moral y de conciencia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sin la menor duda, Antonia.
EliminarUn abrazo.
Todos llevamos dentro el bien y el mal...Hay muchos seres humanos, que han dejado el bien de lado...En ellos impera la venganza, el odio y el egoísmo, están muy influidos por espíritus demoniacos, que sin duda andan por ahí, Francisco...
ResponderEliminarMi abrazo y mi ánimo.