Cuántas vidas con el Covid
se han ido,
¡oh silencio profundo de la
muerte!
Cuánto desgarro, maldita la
suerte,
por el camino oscuro del
olvido.
Cuando llegue mi hora seré
pasado
como pasa a otro mundo quien
ha muerto
en las páginas de un libro
no abierto
el porvenir se nos queda
arrasado.
Las vidas se esfuman al
infinito,
donde espera el eterno
despertar,
donde se olvida todo nuestro
mito.
Y haremos tabla rasa la
memoria,
y veremos al Padre cara a
cara,
y a comenzar la interminable
historia.
Paco: poeta valiente que se atreve con el soneto -fecho al "ibérico" modo-, en plan pesimista/ reflexivo, como si este fuera nuestro nuevo siglo de oro, como el de Lope y Quevedo. Y no es para menos, hay muchas cosas coincidentes entre las dos épocas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Alto me pones el nivel, Cayetano. Ya sabes que soy corriente, como de a diario e intrascendente. Gracias por esa mirada.
EliminarUn abrazo
Poema lindíssimo que me fascinou ler.
ResponderEliminar.
Votos de um dia feliz
Abraço
Muito obrigado, Rykardo.
EliminarAbraço
Mi marido ha sido víctima de esta pandemia que sin contagiarse le han desatendido en su enfermedad (han dado prioridad a los enfermos del covid)al extremo de que sus citas con su especialista las anularon y cómo mi marido ha habido muchos más casos pero estas víctimas no contabilizan....Pero ya está viendo al Padre cara a cara y allí nos juntaremos todos.Saludos
ResponderEliminarLo siento muchísimo, Charo. Desde hoy, todavía te agradezco más que vengas a este encuentro cada día. Segurísimo que sí, que ya está cara a cara al Padre intercediendo por ti y por todos los suyos.
EliminarUn cariñoso abrazo.
Es terrible todo lo que arrastra consigo la pandemia; en tu poema se palpa el desgarro y la impotencia, aunque también la esperanza que sólo la espiritualidad da. Es lo único que nos hace mirar más alto, y al final, lo único que tenemos por encima del gran teatro de este mundo. Gracias, me has hecho reflexionar.
ResponderEliminarUn abrazo grande :)
Sin la esperanza ya estamos derrotados, Maite. Te agradezco mucho tus palabras y esa reflexión que ojalá te traiga la paz a tu corazón.
EliminarUn fuerte abrazo.
Gracias, amigo poeta. He tenido hoy la dicha de leer los 6 poemas más recientes de tu blog. Empiezo mi día con este alimento de sensibilidad para mi ser.
ResponderEliminarUn abrazo anisado.
No imaginas el mucho bien que me haces con tus lecturas, Sara.
EliminarUn anisado abrazo.
Hola Francisco. El símbolo del infinito. Todos en algún momento estaremos en el infinito, yo no sé si nos podremos ver o cada cual tirará para un lado.
ResponderEliminarCharo, siento mucho lo de tu esposo. Ha sido un desastre, todo se ha centrado en la covid-19 y se han dejado de visitar a los demás enfermos.
Buen poema Francisco. Eres muy bueno haciendo poemas. Ya nos hemos bajado tu libro digital, uno, el otro no deja. Sí que eres muy bueno y no te quites méritos.
Abrazos
Tengo mayor interés en ser buena persona que en llegar a ser un buen poeta, Isa. Te agradezco mucho tus palabras y también las que dedicas a Charo. Somos infinito y allí nos veremos.
EliminarAbrazos.
Francisco, partiendo de la tragedia del Covic tocas la muerte con naturalidad y realismo. Pasaremos de una realidad a otra, de una memoria que se acaba a otra que empieza. Lo más importante de tu poema, aparte de tu valentía es tu fe. Gracias a ella podemos ver la vida en perspectiva y alzar la esperanza, sabernos eternos en espíritu, amigo.
ResponderEliminarMi felicitación por tu bello soneto y tu grandeza interior, Francisco.
No siempre que se escribe consigue uno quedar opaco detrás de las palabras. Muchísimas gracias, María Jesús.
EliminarUn fuerte abrazo.
Allí nos encontraremos con familia y amigos, que aguardan nuestra llegada. Mientras que llega la hora de nuestra partida, seguro que están velando ahora por nosotros.
ResponderEliminarBesos
Así lo creo, Antonia, de la A a la Z.
EliminarBesos.
Me gusta la idea de la muerte asociada a la idea de "infinito".
ResponderEliminarCreo que mas allá de que nunca estamos preparados para las despedidas y el desprendimiento físico, creemos muy interiormente en ese reencuentro con un ser superior que para muchos de nosotros es Dios, y con nuestros seres amados que simplemente partieron primero. Un hermoso poema. Saludos y linda noche.
Muchas gracias, Eli, me alegro que coincidamos en nuestras creencias.
EliminarUn abrazo.
Esta pandemia es terrible, han pasado muchas cosas por su culpa, se han ido 3 familiares cercanos y no por el covid, me a pasado como a Charo... Saludos amigo.
ResponderEliminarMis condolencias, Sandra.
EliminarUn abrazo.
Infinita tristeza.
ResponderEliminarQué injusticia en todo! Faltan despedidas que alivien el alma, hay injusticias repetidas. Un abrazo y a seguir la noria. Gracias siempre por tus palabras de aliento hacia mi. Cariños a los dos y cuidarse.
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