El silencio lo dice todo, lo
desvela todo,
lo conoce todo y lo calla
todo;
el silencio es la perfección
acústica
de difícil alcance,
el camino para llegar a la
Ítaca soñada
y abrochar en la mochila el
todo.
Allí la paz, allí la serenidad,
allí la calma, el consenso
impronunciable,
la puerta de par en par del
Paraíso…
el final del derroche de
tanta palabrería
y de tan vana impostura.
El silencio, como objetivo,
disciplina, camino y solaz
soñado.
Hay silencio de todo tipo, a veces suenan tanto que son difícil de distinguir.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es cierto, Emilio. En este momento de silencio, bullen palabras en mi mente para darte respuesta, suena mínimamente el ventilador del portátil, las teclas al presionarlas... Vivimos en un amontonamiento de ruidos, de manera que cuando no se escuchan algunos es porque han sido tapados por los más potentes. El peor de todos, la conciencia.
EliminarUn abrazo.
Se echa de menos, de vez en cuando. Hay demasiado ruido.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Es cierto, Cayetano. Dejar la mente en silencio es un duro ejercicio físico nada fácil, al que se suman los muchísimos externos. Demasiados.
EliminarUn abrazo.
Tan sólo en silencio se puede escuchar la voz interior.
ResponderEliminarBesos
Yo intento alcanzar ese estado un ratito cada día y es muy confortable, créeme.
EliminarBesos.
Es en el estado en que mejor me encuentro. Es saludable,y necesario durante un momento del dia.Tal como lo decis Paz,serenidad y calma.Gracias Francisco.
ResponderEliminarEs una práctica muy saludable, Lucía Angélica, y te animo a no dejar de practicarla.
EliminarUn abrazo.
El silencio, todo deja al descubierto.
ResponderEliminarUn abrazo anisado.
Este tema de hoy me está invitando a tomarme unos días de silencio también en las publicaciones, pero ¿me perderé tus anisados? Mejor no lo intento.
EliminarUn abrazo.
Es exquisito el sabor de tus letras, que no tiene parangón.
EliminarBesos, Paco.
El silencio nos aporta paz, nos habla, nos aconseja y nos ayuda a conocernos mejor......En el silencio es cuando nos encontramos con nosotros mismos.Saludos
ResponderEliminarA veces es duro encontrarnos con nuestra realidad, pues en el fondo también nos mentimos todo aquello que podemos. Como cuando me miro al espejo y no me reconozco, pero sí, ese es quien soy, Charo.
EliminarUn abrazo.
Muy bien lo dices tú, Francisco: "disciplina, camino y solaz soñado".
ResponderEliminarUn abrazo.
Buenos días, Rafael, lamento contestar con un día de retraso, pues ayer celebramos en España el día de la Constitución y pasamos unas horas fuera.
EliminarUn abrazo.
Silencio para pensar, silencio para soñar, silencio para crear y silencio para ser y amar, Francisco...Buen poema, que nos remite a la paz de uno mismo y a la armonía del universo.
ResponderEliminarMi abrazo y feliz puente, amigo.
El silencio es el respiro del alma, María Jesús. Gracias un día más por tu presencia.
EliminarUn abrazo.
Me gusta el silencio, disfruto el silencio que me brindan las letras llenándome de imágenes.
ResponderEliminarSaludos.
Si además el silencio te recompensa llenandote de imágenes, siéntete bendecida y no dejes de practicarlo.
EliminarUn abrazo.