Con permiso de mi buen amigo Isidoro Jara, magnífico fotógrafo y amigo generoso, voy a publicar imágenes de las polémicas "Setas de la Encarnación", las cuales lentamente irán siendo aceptadas. Yo mismo he sido crítico con ellas en este mismo espacio por la extra-limitación del presupuesto y el desconocimiento de la utilidad final que con ellas se perseguían, además del choque frontal de una obra tan novedosa en un entorno rotundamente clásico.
Son unos parasoles que cubren el espacio de la plaza, donde treinta años atrás estaba ubicado el mercado de abastos. Declarado éste en ruinas, se improvisó en los aledaños un mercado provisional con cubiertas de uralitas que ha estado en servicio durante tres décadas.
La plaza está en una de las cotas más altas de la ciudad, por lo que, dadas los muchos desbordamientos del río Guadalquivir a lo largo de la historia, se trata de el lugar de asentamiento más antiguo de la metrópolis. Entre otros inconvenientes de afrontar esta obra, estaba la de acabar con los restos arqueológicos que necesariamente estarían en el subsuelo y que no estaban estudiados ni catalogados. Al parecer, como veremos en algunas imágenes, éstos han sido salvaguardados. Volvemos a tener la plaza de abastos en su antiguo emplazamiento, y bajo ésta los restos de civilización romano. Dado que las "setas" son accesibles por la parte superior y representan algo novedoso en la ciudad, al margen del espacio abierto recuperado y urbanizado con preferencia peatonal, la plaza se ha convertido en un punto de encuentro muy frecuentado.
El contraste de estilos del entorno no ofrece la menor duda.
Pasarela superior por la que poder contemplar la ciudad desde las alturas.
Como la documentación es demasiado extensa, volveré otro día sobre el mismo emplazamiento para mostrar los restos arquitectónicos de época romana.
Visto en fotos no tiene mala pinta, tendré que ir a verlo in situ. Un abrazo
ResponderEliminarBuenos días Francisco:
ResponderEliminarCiertamente los estilos chocan, pero visto por separado cada uno de ellos guarda su belleza.
Vamos en constante evolución en arquitectura, por ejemplo, los puentes que tenemos en Valencia del arquitecto Calatrava son una maravilla.
Me ha gustado conocerlo,esperaré sus próximas fotografías.
Le dejo mi sonrisa y ternura en este comienzo de semana
Sor.Cecilia
ResponderEliminarCuando el alma llora
su consuelo en el vacío
en el más absoluto silencio
En soledad reposando
cuando va tropezando
con los muros impuestos
de la incomprensión...
*****
Que satisfactorio me resulta pasar a leer el texto que has dejado pensado con la tibieza del sentimiento para deleite de quienes te seguimos.
Un buen inicio de semana te deseo con el afecto que hemos granjeado desde que he tenido el gusto de conocerte.
Besos
María del Carmen
PD/Encajar por encajar pues parece que no, pero como los politicos de turno suelen ser los que mandan... hay que darlo por bueno sin serlo.
Al final todo se acaba aceptando, pasó con la Torre Eiffel y pasará con las setas, lo que dudo es del momento para gastar lo que hayan costado.
ResponderEliminarUn abrazo.
Chocante es, pero a lo mejor nos vamos acostumbrando con el tiempo, como ya se ha comentado por aquí, como los parisinos con la Tour Eiffel o el Centro Pompidou, que parece una fábrica en vez de un museo.
ResponderEliminarUn saludo.
Todavía no la he visto terminada del todo, Francisco, aunque la vi en construcción. Creo que este tipo de arquitectura necesita más espacio para contemplarla bien, y dado lo reducido de la Plaza de la Encarnación, creo que se verá todo muy acogotada, incluso las propias setas no se verán bien del todo.
ResponderEliminarEn fin, no tendrá una opinión hasta que no vaya, suba, vea la perspectiva desde el mirador y el impacto visual en el paisaje. Ya te contaré. Que tengas un gran día.
Es que estamos condenados a entendernos con la modernidad, no hay otra!
ResponderEliminarEn todas las ciudades tenemos ejemplos de este tipo.
Pues amí me han gustado las "setas", y el choque de estilo, a mas de evidente, también me parece enriquecedor, es como que así te fijas más en lo que hay alrededor, cosa que antes, lo mismo ni habías reparado en ello!
Pues adisfrutarlas!
Y esto... no serán de la familia de las Amanitas, no?
;)
Abrazote!
Sinceramente, hay otras cosas que me gustan más. Pero el tiempo puede con todo.
ResponderEliminarSaludos
Magníficas fotografías, ha sido un placer deleitarnos con ellas, gracias, Francisco.
ResponderEliminarUn beso.
Las Fotografías son espléndidas pero, siento decirlo, a mi las setas estas no me gusta nada...si nisiquiera se pueden hacer al ajillo...:D
ResponderEliminarUn abrazo, Francisco
Hola, Francisco:
ResponderEliminarNo cabe duda, el choque arquitectónico es evidente, pero la obra se ve espectacular y será en un futuro cercano un importante atractivo turístico de la ciudad generando ingresos que bien pueden aliviar en algo su excesivo costo.
Muy buenas las fotografías.
Abrazos.
Hola Francisco, a mi me gustan en la foto, parecen galletas gigantes y dan sombra:)
ResponderEliminarA veces los contrastes ayudan a descatar la belleza de uno y de otro porque nos hemos acostumbrado a verlo y no le damos importancia.
Tendría que verlo insitu,para emitir un juicio personal.
Un beso
desconozco los motivos de tu malestar primario pero veo que ahora coincidimos en que es una estructura magnífica y resalto especialmente el contraste de estilos: es impactante
ResponderEliminarbesos
Siempre que no de destruyan restos, edificios, etc, hay que reformar plazas para mejorar la vida de los ciudadanos.
ResponderEliminarA veces nos encontramos con estructuras modernas que nos desconciertan; en este caso porque tú conoces el lugar y el entorno.
Quizás sea para bien. De momento parece bonito y seguro que con el tiempo gustará a todos.
Besos
Me gusta la diversidad en todo y en arquitectura más todavía. Me encantan estas setas desde que las vi en el pps que un amigo me envió. Estoy de acuerdo con Chelo, sería un gustazo ver esta obra y admirarla in situ. Tengo tantas cosas pendientes con Sevilla......
ResponderEliminarUn beso y un fuerte y calido abrazo
A mí las setas con ajo y vino, así como que no...
ResponderEliminarMe parecen demasiado impactantes y futuristas, parece una ciudad marciana.
Besos.
A mi no me disgustan los contrastes de estilos siempre que las obras merezcan la pena. Es comprensible que los arquitectos no quieran seguir imitando los estilos más clásicos. Me gustará verlas. Saludos
ResponderEliminarImagino cómo serían los comentarios cuando en esta ciudad se acometió prolongar la esbeltez de la torre de la extinta mezquita hasta convertirla en la hoy admirada Giralda. Como algunos apuntáis, el tiempo, que lo cura todo, pondrá a cada cosa en su lugar. Desde mi punto de vista, lo mejor de todo, es haber sacado a la luz los vestigios de civilizaciones anteriores; pero corresponde a la entrada de mañana.
ResponderEliminarHace mucho tiempo que no paseo por Sevilla aunque apenas la tengo a no más de 250 Km., por lo que comentas y me dicen los amigos, Sevilla ha cambiado bastante sobre todo en el centro, tengo ganas de pasear por ella y recordar mis tiempos de estudiante y no solo ir a ver el Circo du Soleil o a comprar en los outlet y salir "pitando" para casa.
ResponderEliminarSaludos
Hombre la verdad es una estructura muy novedosa y moderna no pega nada en la ciudad, pero no deja de tener su originalidad y belleza, aparte de que desde ella se puede visualizar todo el casco urbano y bueno... tiene que ser bonito.
ResponderEliminarUn abrazo.
Las fotos preciosas, pero sigo pensando que no es el sitio ideal. Creo que hubieran estado mejor en el Prado, en los terrenos de la Expo... dónde se vieran desde lejos y no alteren la vista del centro històrico. Si la idea era hacer un mirador con vistas bonitas ya las teníamos desde la Giralda, la Torre de los Perdigones, etc y ahora también los tejados de la Catedral.
ResponderEliminarSaludos.