01 julio 2022

SOBREMESA MUSICAL

 

Se asemejaba,

pero no era música.

Era de otro escalafón

y otra cadencia,

entre balbuceos y repeticiones

como borrones fortuitos

en la partitura virginal.

 

Cuatro y media de la tarde,

hora del sopor;

la digestión invitando al descanso

y la precoz del tercero derecha

porfiando con el teclado

tratando de reproducir

una melodía no identificada,

de momento.

 

A pesar de todo,

afirmo que la música

es belleza virginal en otras manos

y, en estas, inoportuna,

machacona y tortuosa.

 

Cuando el prodigio se ausenta

o como en este caso

está en proceso de maduración,

rechina en los dientes como fruta inmadura.

 

8 comentarios:

  1. Es verdad, un mal instrumentista es un auténtico dolor de cabeza.

    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La esperanza es que progrese pronto, Emilio.

      Eliminar
  2. Veo que a nivel musical estás muy entretenido...seguro que con la práctica mejorará.Saludos

    ResponderEliminar
  3. Ninguém nasce um/a grande músico. Começa-se mal, aprendendo, para que um dia seja fantástico.
    Belo poema
    .
    Um feliz fim de semana.
    .
    Pensamentos e Devaneios Poéticos
    .

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es cierto, hay que darle u a oportun idad.

      Eliminar