17 octubre 2018

MIENTRAS ME ATUSABA EL PELO





Mientras me atusaba el pelo
y perfilaba la barba, te busqué
en las huellas del espejo mustio de los días,
ese que guardo con celo
en el memorial recóndito de mi retentiva;
sólo encontré una mueca sin respuesta
que ni siquiera tenía tu acento.

En mis ojos vi la cotidianeidad azarosa
de los días aplicando su huella cansina;
me miré de nuevo
repasando el brillo de tus ojos en mi nebulosa,
hasta que centelleó en mi interior tu luz incólume,
para descubrir el grito callado que lubrifica tu alma
y acentúa tu mirada de eterna espera.

Nos acomodamos en la ribera de nuestras vidas,
─ensoñación apasionada─
y supe, supimos con certeza,
que habíamos descubierto el paraíso
de tú en mí y yo en ti.

6 comentarios:

  1. que guapo hombres asi no existen en la realidad

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  2. Respuestas
    1. Bello, pero en segundo orden, porque el guapo es el guapo. Ja, ja, ja, ja...

      Un abrazo.

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  3. Todos nos miramos, queriendo encontrar la herencia y el rasgo entrañable, que llevamos en el corazón y que nos acompaña siempre desde el cielo.
    Mi abrazo y mi ánimo.

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