El pastor de los vientos
ha debido echar la siesta
y ni la brisa ondea
la enseña de los barcos,
al cálido y seguro abrigo
donde las amarras
están flácidas y sin tensión
que imprima el menor
ondular.
La tripulación duerme,
el capitán ya rubricó el
diario;
mañana será un día ajetreado
por la briega de las
provisiones,
pero esta noche, hasta la
guardia
pasa por el sopor de la
quietud
que la serenidad del mar
traslada a la marinería
e inmortaliza Monet
con trazos maestros.
¡Qué preciosura ! ¡cómo me gustaría sentir esa serenidad con la mente en blanco.
ResponderEliminarEmborracharme de esa quietud , de esa majestuosidad entregada al descanso. La pintura engarza con el tema como las perlas en un collar. Probablemente por allí cerca habría algún brazalete de jade verde purísimo.
Adoré este post. Es mío.
Apapachos.!
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Muchas gracias, María del Carmen. Tus comentarios siempre enaltecen mi espíritu.
EliminarApapachos.
Ese pastor de los vientos, una figura poética preciosa, que nos recuerda el obediente y tranquilo rebaño, que esta vez son barcos serenos y adormilados...en la pintura de Monet, que tú das vida, mágicamente con tus letras.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo grande por tu constante inspiración y buen hacer, Francisco.
M.Jesús
Feliz encuentro, Mª Jesús. Sé que andas muy ocupada y te agradezco mucho que me dediques unos minutos. Un día, vendrá una criatura a tu vida y te dará una serenidad y un júbilo que ni mis palabras ni la maestría de Monet pueden alcanzar. Muchas gracias.
EliminarBesos.
La serenidad, un estado equiparable a la felicidad.
ResponderEliminarSerena es también el alma que la sabe expresar en versos y en imágenes.
Leerte es participar de ese estado de ánimo tan recomendable.
Espero que pronto podamos ver el resultado de tu trabajo poético.
Un afectuoso saludo.
Muchoas gracias, Chela. Efectivamente ha sido escrito en un momento sereno que es posible que se transmita al poema. En un futuro próximo, tendrás ocasión de poder leer todo el poemario de un tirón.
EliminarBiquiños.
Hola Francisco.
ResponderEliminarHace un tiempo que no nos visitamos.
Doy un repaso a tus bellas letras, antes de respirar esta quietud y calma que llena de serenidad el alma, muy preciosa la imagen de Monet.
Un abrazo.
Ambar
Durante el verano, fuera de mi lugar de residencia, tengo una débil conexión que no me permite hacer muchas visitas. Gracias por tus palabras.
EliminarBesos.