¿Acaso sabes por
qué
la luna no sonríe
nunca?
¿Te atreverías a
afirmar
por qué tiene cara
de contrariedad
si importar en qué
fase se encuentre?
Si recibieras las
mismas confidencias,
si conocieras la
desolación
de tanta alma en
pena
que no encuentra
consuelo,
la melancolía y el desgarro
de tantos sueños tronchados
en interminables
noches de insomnio…
No. No es que tenga
dos caras,
es que está cansada
de fingir
y padecer por los
graves pesares ajenos,
y por los propios.
Desde que la luna fue pisada por el ser humano perdió su inocencia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Las mancillas de la luna deben ser mayores por las basuras que suelta el hombre que por lo simbólico que aquella famosa pisada, pero en todo caso ha perdido su supuesta pureza, Emilio.
EliminarUn abrazo.
Nunca pensé que la luna tiene cara de contrariedad ...pero llevas razón y que bien lo dices. Buenos días .
ResponderEliminarYa sabes que la mayor parte de las veces es nuestra mirada, nuestro ánimo, quien condiciona al objeto que vemos.
EliminarBuenos días, Chelo, y un abrazo.
Se pasa el día mirándonos, mostrando una cara y ocultando la otra. ¡Será cotilla!
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Desde le cantó Pink Floyd se ha venido arriba y está un tanto tontita, la muy vanidosa.
EliminarUn abrazo, Cayetano.
Francisco, la luna es coqueta y se esconde por vergüenza :-) A mí me resulta muy simpática y siempre sonriendo. Cuando está en menguante sí que veo que una mueca de tristeza.
ResponderEliminarComo todo lo ve, ve que solo echamos basura, que incluso, ella se mancha de nuestra basura. El día que se enfade no va a lucir y nos dejará sin poder caminar de noche.
Simpatico poema
Abrazos
Me encanta cómo miras a la naturaleza, tanto la inmediata y cercana como la distante. Gracias, Isa, hoy y cada día.
EliminarUn abrazo.
La luna sonríe o no, según estés tú en condiciones de verla. Para los enamorados ¡Seguro que sí!😀 Pero realmente ahora tiene `pocos motivos para hacerlo😘
ResponderEliminarTe asiste la razón, Katy, pues estos no son tiempos sino muy tristes.
EliminarUn abrazo.
Siempre ahí, haciéndose visible u ocultando su deidad, pero si sonrìe o no, creo más bien que ahora no tiene motivos para estar feliz, pues apenas nos fijamos en ella, menos tú, que aplaudes su presencia con versos...
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias, Jorge, por ese piropo sin parangón.
EliminarUn abrazo.
La luna tendrá momentos de tristeza por ver todoas las penas y los malos comportamientos de aquí abajo pero estoy segura de que también tiene sus momentos de felicidad y alegría por todo lo bueno que también se hace y es por ello que sigue paciente iluminando nuestras noches.Saludos
ResponderEliminarEs cierto, Charo. En la médula de este sufrimiento que padece toda la humanidad, gestos maravillosos de solidaridad que subliman al hombre, si bien no a todos.
EliminarUn abrazo.
La luna en su deslumbrante silencio nos habla con mil voces. Tu nos traduces una de ellas, Francisco. La luna es consciente de los que sufren, de los que sueñan y luchan cada día...Quizá por ello sigue ahí, como lámpara generosa y constante, alumbrando las noches.
ResponderEliminarMi gratitud y mi abrazo por tu mirada de luna incansable.
Como siemre, María Jesús, aportas una nueva luz despejando las posibles incógnitas. Gracias infinitas.
EliminarUn fuerte abrazo.
Es invocada por poetas, músicos y todas las personas que tienen una mínima sensibilidad. Ella conoce amores y desamores y lo que esconde el alma del ser humano.
ResponderEliminarBesos
¡Las confesiones y confidencias que habrá escuchado! Gracias, Antonia, por acercarte cada día.
EliminarBesos.
Nunca lo habría pensado, pero puede que lleves razón.
ResponderEliminarY puede que no, Tracy. A veces se me escapa algún disparate.
EliminarUn abrazo.
La luna es hermosa e inspiradora, mira que lindo poema has escrito. Saludos amigo Francisco.
ResponderEliminarMuchas gracias, Sandra, por mirar así de hermoso.
EliminarUn abrazo.