Para sentirte a ti,
para conectarme a tu
universo,
no bastan los sentidos
del olfato, la vista o el
oído,
como se detecta la tormenta,
la brisa marina o el viento.
Para notar tu presencia,
para paladearte en toda tu
intensidad,
no sirve el tacto
de mi piel en tu piel,
ni siquiera el sabor de tus
labios
en los míos.
Basta con observar la
aceleración
de mi pulso,
la agitación de todo mi ser
y estas mariposas que
pululan
en mi estómago como el
primer día.
Y a ver quién es el guapo que es capaz de medir eso.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Hay dimensiones que se derraman y ni agrimensores, ni arbitrios, ni ningún tipo de fiscalidad es capaz de medir.
EliminarUn abrazo, Cayetano.
Genial Francisco, el Amor se debe de vivir con esa intensidad del primer día y esas "mariposas" tendrían que estar siempre pululando.Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias, Charo, por dejarme cada día tu opinión y siempre favorable.
EliminarUn abrazo.
que bonito!!
ResponderEliminarsaludos,
soundsBeat.blogSpot.com
Muchas gracias, Karol, te agradezco tu llegada y que te hayas hecho seguidora. Espero no decepcionarte.
EliminarUn abrazo de bienvenida.
Y luego dicen que el amor es cosa de química. ¿Quién puede creerlo?
ResponderEliminarSaludos.
El amor es una suerte de misterio que se ubica en el alma.
EliminarAbrazos.
Señal evidente de tu amor. Se nota la química que hay entre los dos.
ResponderEliminarBesos
Gracias, Antonia, por vernos así.
EliminarBesos.
Pues sí, eso es suficiente.
ResponderEliminarGracias, Tracy.
EliminarUn abrazo.
Que lindo sentir de amor en versos. Saludos amigo Francisco.
ResponderEliminarGracias, Sandra. También tú tienes grandes sentimientos amorosos.
EliminarUn abrazo.