21 septiembre 2024

VIOLETAS

 




Casi a ras de suelo, a veces erguidas

como queriendo sacar el cuello

por encima de la mediocridad.

Humildes, sencillas, originales,

pero sin pedigrí y lanzadas a multicopia

formando una niebla de espesura.


Frágiles y uniformadas en formación,

sencillez y frescura en pocas hojas,

una mirada alegre como de abéñula,

una sonrisa con la comisura manchada

y un guiño amarillo como epicentro.


Simpleza, sencillez, humildad, esplendor,

como muchachada jovial, que del brazo,

son el foco de todas las miradas.


Felices, frescas, fugaces, flor sin fruto,

fidelidad fidedigna y festiva

en el común discurrir de la vida.

Un regalo de la creación, un foco

que nunca pasa desapercibido,

como tilde que acentúa

el agradable envés de la vida.

12 comentarios:

  1. Hasta su simbología es bonita: inocencia, amor eterno, modestia, sabiduría espiritual, fidelidad, misticismo y recuerdo.
    Un abrazo

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  2. Preciosas violetas y preciosos versos.
    Saludos

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  3. Estas violetas que me han recordado a mi madre que siempre tenía en el salón un tiesto con estas bonitas y sencillas flores. Saludos

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    1. Aunque no he hecho mención a ello, mi madre era muy amante de las flores y la recuerdo distribuyendo mimos y riegos entre ellas.
      Un abrazo.

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  4. Y muy afortunadas al haber sido captadas por la visión de este poeta que las ha percibido totalmente. La descripción de su rostro, la mirada, sonrisa y guiño es fascinante. Gracias por tanta belleza.
    Un gran abrazo.

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    1. ¡Cuánta generosidad hay en tus palabras, Sara. Muchísimas gracias.
      Un abrazo.

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  5. En su humildad y sencillez habita su grandeza...Hermosas violetas, que laten en tus versos, amigo poeta.
    Mi abrazo y feliz domingo.

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    1. Tus estímulos, María Jesús, son de una gran valía para mí.
      Un fuerte abrazo.

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