Cuando la noche daba
sus primeros bostezos
entre las sábanas de la
madrugada.
Cuando el día descerrajaba
su navaja de luz
con un rayo tibio y
timorato.
Cuando mi vigilia
se colmaba de impaciencia
y el mundo seguía
obstinado
en perseverar en sus
errores.
Cuando de repente la luz
se tornó opaca
y las nubes se hicieron
aguerridas y fiera
amenaza.
Cuando comenzó a descargar
la sonora y lumínica
tormenta
y la vida se agazapó
buscando refugio.
Cuando una plantación de
hongos de tela
surtió de un extraño
resorte
como mamparos móviles
en confusión despavorida.
Cuando el día había
retorcido el gesto
con expresión de fastidio
y yo titubeaba con las
llaves en la mano
sin saber qué hacer…
Pasaste de nuevo por mi
mente
y viniste a renovar la
angustia
con una alborozada
sonrisa.
Cuando, buen o mal condicional.
ResponderEliminarAbrazos.
Tus poemas últimamente reflejan cierta tristeza y temas muy sensibles para abordar. Tanto la tristeza como la alegría forman parte de la vida.
ResponderEliminarTe deseo un buen fin de semana. Besos.