Lo
mejor del recuerdo es el olvido.
MANUEL ALCÁNTARA
Voy navegando por
el proceloso mar
de la vida,
tratando de olvidar
las afrentas
y apuntalando la
memoria
con los dones y
bienes recibidos.
Desde esta cota, le
niego la palabra
a toda ofensa,
tratando de asirme
con las fuerzas que
me quedan
a las manos que se
abrieron
para darse y
ofrecerse,
como a las que se
empeñaron
en mostrarme el
camino.
Como el día y la
noche son tiempos
de una misma unidad,
el bien y el mal son
las opciones del hombre
en el ejercicio de
su libertad.
Opto por la luz,
por el resplandor
de lo bello,
por aquellas
enseñanzas que me mostraron
el perdón como
camino de sanación
y de olvido;
por no tomar en
cuenta las zancadillas
y valorar en su
justo e impagable valor
los empujones y los
ejemplos.
Gracias a quienes
me enseñaron a amar,
a no mirar por
encima del hombro,
a medirme en la
talla de lo ajeno,
a no sentirme inferior
ni superior a
nadie,
a recordar solo lo
que me favorece.
No comparto lo que dice Manuel Alcántara, ya sabes lo que dice el refrán, "quien olvida su historia está condenado a repetirla". Conociendo la historia de Alcántara no me sorprende que lo diga, es la cantinela de mucha gente de hoy, olvidemos lo pasado.
ResponderEliminarSaludos
Una de las enseñanzas de la historia es que la venganza es sangre que no deja de fluir nunca. Por supuesto que hay que aprender de la historia, pero para no empestillarse en los mismos errores para siempre. En todo caso, Emilio, es una opción muy personal.
EliminarUn abrazo.
Hola Francisco. Yo hay cosas que no puedo olvidar ni perdonar. Sobre todo las injusticias. Una de las injusticias más grandes hacer desaparecer a Personas en la Guerra Civil Española. Entre estos desaparecidos en mi pueblo a menores y padres como mi abuelo materno y a partir de aquí las desgracias de su mujer e hijas. Esto no se puede perdonar en l vida. Las demás menudencias tales como ofensas y riñas las olvido. En todo lo demás estoy de acuerdo contigo.
ResponderEliminarMuy bueno lo escrito para recapacitar nuestro paso por la vida.
Abrazos
Te comprendo, Isa, pero con todos esos agravios acaba el tiempo. Si no es esta será la futura generación la que acabe por olvidar aquellos que padeció en sus carnes sus ancestros. La historia de la vida es una sucesión de agresiones injustas y eso no lo podemos modificar, pero sí tenemos derecho a vivir en paz. Todo mi respeti y cariño.
EliminarUn abrazo.
Yo suelo perdonar pero no olvido, eso quiere decir, en el fondo, que no perdono. Es que la injusticia y el dolor padecido a veces deja huellas.
ResponderEliminarLos valores que te enseñaron son el verdadero camino.
Un abrazo.
No es fácil olvidar, Luján, pero por nuestra propia paz, tenemos derecho y deber de perdonar para el sosiego propio.
EliminarUn abrazo.
Ójala tuviera una memoria selectiva para acordarme tan sólo de auello que me favorece.Desafortunadamente mi memoria es de elefante y hay cosas que jamás podré olvidar por más que me lo proponga.Saludos
ResponderEliminarNo es fácil conseguirlo, Charo, pero sí es posible lograr que no te siga haciendo daño algo que te sucedió hace mucho tiempo. El mayor beneficio del perdón es para quien lo otorga.
EliminarUn abrazo.
Felicita también de mi parte a esas personas que te hicieron ser como eres.
ResponderEliminarLa foto es maravillosa.
Me siento muy honrado de haber recibido esas enseñanzas.
EliminarUn abrazo, Tracy.
Yo no se olvidar amigo Francisco, mucho menos perdona. Saludos a la distancia.
ResponderEliminarNo es fácil, Sandra, pero tampoco imposible. El olvido no es de los hechos, que seguramente los recordarás siempre, pero sí que no dañe tu corazón como en el momento de la afrenta.
EliminarUn abrazo.
A olvidar lo que hiera, qye hay mucho bueno por apreciar.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.