No es que haya caído en un bucle
o me hayan enganchado a la noria en sustitución del borrico, sino que uno suele
ser recurrente con los temas y vuelve una y otra vez sobre las mismas cosas por
motivos que no siempre tienen explicación coherente.
Fotografía de Rafa Santander |
Todos mis lectores saben que mi
hijo Carlos está trabajando en Moscú y que con cierta regularidad nos vemos y
hablamos por Skype, algo que hace más
llevadera la ausencia, esa separación a la que uno, y fundamentalmente su
madre, nunca llega a acostumbrarse. Como es de comprender, en esas
conversaciones sale a relucir un poco de todo: salud, trabajo, noticias del resto de la familia... “¿Hace mucho frío, hijo?” “Pues como el
chiste del lepero, mamá, ni frío, ni
calor: cero grados, por eso está nevando” No lo entendía y tuve que
repreguntar, a lo que él aclaró que, cuando está despejado y el termómetro baja
de los 10 grados bajo cero, significa que no nieva, pero cuando el termómetro
se acerca a los cero grados es porque está nublado y suele descargar.
Aunque como ya dije, no se fue
tan lejos por aventura, como señaló de muchos jóvenes españoles una alta funcionaria
de esas que están muy bien retribuidas, aunque no sobrecojan, y su estancia allí es limitada en el tiempo hasta
finalizar el desarrollo de su trabajo, los padres solemos interesarnos por las
cosas más nimias. Sabemos que tiene un coche de empresa y su madre se
preocupaba por los posibles deslizamientos. “No te preocupes, aquí los coches
suelen tener dos juegos de ruedas: unas para el verano y otras para el
invierno.” Estas últimas están dotadas de unos elementos metálicos —llamémosle clavos para entendernos—, que son
especiales para hacer posible moverse por aquellos pagos helados con cierta
seguridad. “¡Por cierto, ahora os mando una foto de mi coche!”
Este es mi coche, papá, el que está en primer plano. |
Hola Francisco, es verdad que cuando tenemos un hijo fuera de nuestra ciudad, aunque no sea en el extranjero,se le añora mucho,hablamos todos los días por teléfono pero no es lo mismo,si no es por trabajo es por matrimonio, lo cierto es que las familias se van separando, cada uno va tomando su camino y muchos lejos de los padres y hermanos como me pasó a mi.
ResponderEliminarSaludos.
Y para un andaluz de pro como tú ver toda esa nieve...¡Brrrr! Vaya tela.
ResponderEliminarUn saludo.
Jajaja, un coche con pijama.
ResponderEliminarMe da frío sólo de pensarlo.
Un beso
La foto es de postal, preciosa, Pero a mi el frío me desagrada y la nieve n te cuente. En 40 años que llevo en Madrid subí solo una vez a Navacerrada en invierno, y fue la última:-) Pero a todo se acostumbra uno. Ir bien abrigado y luego una buena calefacción lo suaviza.
ResponderEliminarLo importante es que él esté bien.
Bss
Helado me dejas Francisco y eso que soy de Soria.
ResponderEliminarUn abrazo.
'Fuerte frío, caballero! hay que decir viendo la fotografía y leyendo tu entrada de hoy. Solo nos queda desearles ánimo a tu hijo Carlos ¿y por qué no? a sus ansiosos padres que tantas ganas tienen de abrazarlo.
ResponderEliminarÁngel
Y el cutis tan estirado que se les queda con esos fríos, unos fríos que los moscovitas los superan con buenos vasos de wodka.
ResponderEliminarUn saludo
Muy bonito el coche de tu hijo, tan blanco y tan congelado.
ResponderEliminarTodo suma Francisco, y este tiempo por Moscú es una experiencia enriquecedora para tu hijo, espero.
ResponderEliminarEl coche estará muy bien conservado.
Un abrazo.
Hay que ver el lado positivo, es una experiencia enriquecedora que le va a aportar mucho en su vida, como madre lo siento así, y al verlos felices a través del Skipe es como sí estuviera más cerca de nosotros.
ResponderEliminarUn cálido abrazo
Muy bonito y realista tu comentario Francisco!
ResponderEliminary te comprendo perfectamente.
Saludos desde Suecia amigo
Un fuerte abrazo!
Como dice Elena, el coche estará conservadísimo...
ResponderEliminarY el cutis de Carlos también! Jejejeje!
Besos (espero que esté usted más repuesto, caballero)!
;)
Pero al menos puede viajar en Metro calentito... y con arte.
ResponderEliminarEl invierno ruso se cargó a las tropas de Napoleón creo, o por lo menos, las enfermó lo suficiente para maldecir haber ido a tan frío lugar.
ResponderEliminar¿O lo habré soñado?
Menudo frío, la verdad. Casi mejor me quedo con el ni frío ni calor :), a eso sí estamos acostumbrados por aquí en invierno.
Un abrazo y espero que le vaya bien a tu hijo.
Suena duro vivir en Rusia, especialmente durante el invierno. Pero parece que su hijo lo lleva bien, afortunadamente. Será una experiencia muy enriquecedora en su vida.
ResponderEliminarBuenas noches, monsieur
Bisous
Me encanta la nieve, pero resistir las bajas temperaturas es todo un reto para quien nos es nativo del lugar.
ResponderEliminarAbrazos alados, Francisco!!!!
Yo creo que Carlos te ha gastado una broma. No es su coche. Debajo de esa manta blanca está ¡¡el burrito de la primera fotografía!!. Un abrazo desde mi mejana
ResponderEliminarAy! pues menos mal que has acabado la crónica con la foto y punto, porque según avanzaba...me estaba preguntando si tu hijo habría confundido las ruedas o algo así. Menos mal, menos mal, Francisco....
ResponderEliminarSinceramente...no sé si me hubiese atrevido a salir tan lejos, no sé...
Besos Francisco.
jajaja, eso dice siempre mi padre que ni frío ni calor, es cuando estamos en 0º jejejeje. Oyes que bonito el coche, ¿la nieve viene de serie no? jejejeje, que paisaje, madre mía. Un besazo.
ResponderEliminarEsa foto y pie de la misma hechos por su hijo denotan un envidiable sentido del humor, ya lo creo que sí. Me ha hecho sonreír, aunque a esa temperatura, casi se me queda helada la sonrisa. Un saludo.
ResponderEliminarHola Paco, muy bonita la foto del burrito.
ResponderEliminarUfffff, madre mía, que frío hace donde está tu hijo. Nunca vi un coche tapado con esa gran manta de nieve.
Yo seguro que ahí me congelo.
Deseo que todo le vaya muy bien y que puedan seguir charlando para que os tenga al tanto de todo.
Saludos y besos
He pasado unos días "chungos" que no me han permitido mucho tiempo al ordenador, así que conformaos con una respuesta generalizada por tanta generosidad.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo a todos.