“Cuando apenas tenía siete años, subí hasta esa casita y me quedé tan
extasiada con el paisaje que no quería bajar.” Jone Miren Asteinza Royo.
Yo había soñado caminos;
veredas tortuosas por el monte
y sendas líquidas por la mar,
caminos que me llevaran
al lugar de mis ensueños:
en la encrucijada entre uno y otra,
un islote desnudo y pétreo,
una atalaya natural donde encaramarme
para seguir soñando la niñez eterna,
idealizando aquella infancia
separada de mis padres
por una senda borrosa de agua salobre,
la mar de ancha.
En el promontorio,
una explanada mínima
con una ermita con espadaña y campana
con la que tañer música a los ángeles;
junto al barranco,
casi olvidada, una casita minúscula
donde seguir soñando;
inaccesible, remota…
acantilados y mar
y un pasadizo encrestado
por encima de la dársena
por el que alimentar con panes de sueños
un camino sin retorno.
Yo había soñado caminos…
apenas tenía siete años, pero ya sabía soñar.
Bellísimo poema !!
ResponderEliminar..."una casita minúscula, donde seguir soñando..."
Qué cosa tan linda !!Me fascinó.
Un puñado de besos.
La fe y la utopía nos llevan a la esperanza: la esperanza a soñar.
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Qué preciosidad de sueño... No dejes nunca de soñar .. Yo ( gracias a un entrañable amigo ) he empezado a soñar después de mucho tiempo de negarme a ello ..
ResponderEliminarUn abrazo enorme y una sonrisa
No sabes cómo me alegro que sueñes; sin sueños no hay más allá, sino mera rutina que se enrosca en sí misma.
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Muy bonita la foto y el poema.
ResponderEliminarDa la sensación de que la niña quería una casita en lo más alto de la montaña para estar más cerca de sus padres. Rodeada de naturaleza y bien cerca del cielo.
Todos tenemos derecho a ser felices aunque sea en sueños.
Bello poema me he emocionado.
Que tengas buen fin de semana
Saludos y besos
Todo esto ha sido una broma. Nerim comentó en Facebook sobre esta foto el texto que le adjudico y en base al mismo le he construído el poema: un juego entre amigos.
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Que poema más precioso has escrito a esa niña que desde tan pequeñita aprendió a soñar, a esa niña que aún llevo dentro y que sigue preñando de sueños su vida, porque los sueños me ayudan a hacer ligero el camino y que me han permitido conocer, tratar y querer a personas tan admirables como tú.
ResponderEliminarUn beso con todo mi cariño
Jone Miren Asteinza (Nerim)
De ese juego que mantuvimos en Facebook surgió la idea de completarlo: el resto fue ir echando hilos y bodoques hasta completarlo.
EliminarBesos con cariño.
Que orgullosa estoy de ser vuestra amiga.
EliminarUn abrazo a los dos.
Sin ti, Chelo, nada sería lo mismo.
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Esa casita que albergue el descanso del guerrero... La describes como sólo tú sabes. Abrazos y buen fin de semana, Francisco.
ResponderEliminarMe sobrestimas, Paco; se nota que lo tuyo son as artes plásticas.
EliminarUn abrazo
Muy machadiano te veo últimamente, con eso de los caminos soñados. Será que nos vamos haciendo algo menos jóvenes y nos entran nostalgias y demás. Al menos es lo que me pasa a mí.
ResponderEliminarUn saludo.
Uno no deja de ser un compendio de todo lo asimilado, Cayetano, y si apuntar hacia D. Antonio es como hacerlo a las estrellas.
EliminarUn abrazo.
Me encanta la casita de tu sueño ...y tu poema.
ResponderEliminarUn abrazo Francisco.
Muchas gracias, Elena.
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Bello poema y hermosa casita. Curiosamente yo nunca he tenido una casa ideal, ni casita de ningún sueño. Debe de ser que he sido como el caracol, con mi casa a cuestas desde niña. Nada de plantar la tienda.
ResponderEliminarBss
Es verdad que somos aquello a lo que nos hemos acostumbrado. Hay quien no se mueve de donde nace y otros que andamos de un lugar a otro. Gracias.
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Precioso homenaje, preciosos versos, maravillosa reflexión: los amigos, nos quieren y nos regalan cosas así, simplemente por amistad...¿hay un sentimiento más noble y sincero? quizá, el amor de unos padres a sus retoños...
ResponderEliminarBesos para tí y para Miren.
Gracias, Mascab, por la manera que tienes de mirarnos a ambos. También sé de ti que eres una fiel amiga, y en la amistad se da uno mismo.
EliminarBesos
Es un lugar mágico San Juan de Gaztelugatxe y esa ermita de San Pelayo en lo alto, después del Viacrucis de tantos escalones...
ResponderEliminarEl paisaje no tiene precio, de verdad!
también es uno de mis lugares favoritos.
Mirentxu estará encantada (ya sé que lo está), de este precioso poema que le has dedicado, inspirado en sus sueños y sus paisajes de infancia!
Muxuak!
;)
Me gustan tus besos onomatopéyicos y no te digo más para que no me digas viejo verde. Supuse que conocías el lugar. Como ya he comentado, ha sido un juego usando el comentario que hizo Mirentxu a esta fotografía.
EliminarBesos
Nerim también hace soñar con sus escritos. Hace años que la leo.
ResponderEliminarQue bien pintas sus sueños con colores de ilusión.
¡¡¡¡Precioso poema!!
Un biquiño!!!
Muchas gracias, miña nai. Te agradezco que llegues a esta humilde casa y que comentes.
EliminarMoitos bicos.
No hay duda de que el sitio es precioso, pero no me gustaría vivir ahí.
ResponderEliminarNo importa. A quien le gusta es a Nerim; yo me conformo con que te guste la foto y el poema.
EliminarAbrazos.
Soñar es maravilloso, es algo que llevamos dentro desde niños, algo que despierta nuestros sentidos y nuestra ilusión. El poema me ha encantado Francisco. Un fuerte abrazo y feliz fin de semana amigo.
ResponderEliminarDespués del Lunes Santo no pude verte: o me encierro en San Lorenzo y tú te pateas toda la ciudad. Gracias por tu opinión.
EliminarUn abrazo.
¡ Ahhhh por fin ya puedo escribir mi comentario en tu Blog! ayer imposible y esta mañana , igual.
ResponderEliminarYo creo que desde que nacemos ya sabemos soñar , los sueños son algo que nos ayuda a seguir adelante todos los días y aquello por lo que luchamos . Precioso el Poema , Francisco y la Foto también . Yo ahora sueño con volver pronto a Ronda , a mi casa porque llevo 22 años de mi vida viviéndo cada Curso en un sitio . Me gusta mucho vivie en Ronda porque estoy enamorada de mi Ciudad y allí nací y tengo mis raices . Otras veces , sueño con una casita en el campo y rodeada de árboles y plantas pero de momento, no me queda otra que aceptar mi realidad e intentar sacar lo mejor de dónde viva.
Un abrazo
Te agradezco doblemente tu esfuerzo, Charo. Ya ves que el que la sigue a consigue. Ronda es una ciudad preciosa y no me extraña que sueñes en volver a ella.
EliminarUn fuerte abrazo.
¡Ay San Juan de Gaztelugatxe! pero ¡qué precioso que es!. Estuve este verano con mi hijo y se quedó impresionado. Mi marido y yo ya habíamos estado pero cada vez que vamos.... ¡volvemos!.
ResponderEliminarMe ha encantado tu poema, (sin rima) :)
con esos versos sueltos, desparejados,
impregnados del aire que asola esa costa
y esa casita que vista desde el cielo
me llena la mente de sueños por vivir.
Un abrazo Francisco ¡preciosa entrada!
Mi concepto de la poesía, Laura, es que no sea forzada por nada, ni por las formas ni por el vocabulario. Es muy difícil escribir los catorce versos de un soneto y en ellos y sólo en ellos darle todo el sentido a lo que se quiere decir; como sabes, sujeto a su vez en dos cuartetos y dos tercetos con rima consonante y enlazados entre sí, además de ajustarse a la medida de once sílabas. Pero en mi opinión, no podemos seguir esculpiendo gótico ni barroco eternamente. El verso suelto, como la pincelada impresionista, también requiere un trazo seguro. ¡Perdón, me he enrollado!
EliminarBesos
Me han dado unas ganas locas de subir a esa casita y quedarme extasiada bucolicamente, perdida en el maravilloso paisaje,recordando tus versos.
ResponderEliminarPrecisa la foto y precioso el poema.
Besos.
La verdad es que es un lugar paradisíaco, inhóspito, sí, pero muy bonito. Se me ocurrió seguirle el juego a la traviesa Nerim y recrear su fantasía.
EliminarBesos
Muchas gracias, María del Carmen.
ResponderEliminarBesos
El poema me gusta más que la casita. Un placer volver después de este paréntesis que he hecho.
ResponderEliminarUn abrazo
Querido Antorelo: en mi casa se te echa de menos cuando te ausentas.
EliminarUn abrazo.
Francisco,mientras leía el poema he visto una niña y un niño subir la cuesta hasta esa casita-ermita,que hay en lo alto del cerro...Eras tú y Nerím recordando el camino de la infancia.Al llegar arriba habéis tocado las campanas,que han repicado por todo el valle y después han alzado el vuelo, como palomas,para convertirse en las letras de un poema...eternizado en tu espacio.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo inmenso por estos mágicos retazos,que nos llenan el alma de inolvidables y lejanas campanas.
Feliz fin de semana,amigo.
M.Jesús
Por no repetirme, más arriba he comentado que se ha tratado de un juego entre lo que Nerim opinó de la fotografía y lo que aporté en mi guiño.
EliminarGracias, Mª Jesús,por llegar a mi humilde casa desde tu casa de letras severas.
Besos
Es un hermoso lugar donde el alma descansa y se regenera,un lugar que me gusta mucho y que siempre que puedo voy para desconectar. Maravillosa imagen de San Juan de Gaztelugatxe. Besos.
ResponderEliminarAl parecer te ha gustado mucho que te recordara ese lugar de tu bello recuerdo, lo cual me hace feliz. Muchas gracias por tu comentario.
EliminarUn abrazo.
A esa casita de ensueño es de suponer que no le afectará la pesadilla de la hipoteca. Me dejas anonadado cada vez que leo tus poemas y me doy cuenta que yo debo dedicarme a otra cosa. Un abrazo desde mi mejana
ResponderEliminarSi miras así, Felipe, es difícil que nos encontremos. Yo en cambio valoro cuanto haces y dices y me pierdo por tu amistad.
EliminarUn fuerte abrazo.
La niñez eterna de la que todos nos aferramos…y tú Francisco la transpones a este precioso poema idealizando paisajes y recuerdos con una vitalidad y un verso que surge de las raíces de tu alma … increíbles!!!. Lo que hacen la Musas!!! desde tus siete años te tienen secuestrado… Bellísimo!!!
ResponderEliminarAbrazos y buen finde
Gracias por tu afectivo comentario. En realidad la atrapada por este paisaje desde su infancia es mi amiga Mirentxu; yo he tomado posesión de ella para decir en su voz lo que este espacio le sugiere a ella.
EliminarUn abrazo.
Conozco el paraje de la fotografía. Es la ermita de San Juan de Gaztelugache en Vizcaya, un lugar espectacular que cuadra perfectamente con sus versos. Un saludo.
ResponderEliminarEl encuadre no es casual porque ha sido escrito a la vista de la fotografía. Lamentablemente no he inventado nada, solo he contado lo que se ve.
EliminarUn abrazo.
Soñar caminos que nos lleven a lugares mágicos, para contemplar la belleza y sentir la desnudez de los paisajes desde nuestras miradas.
ResponderEliminarMuy bella tu entrada, no podía perdérmela, amigo Francisco.
Un beso de domingo.
Muchas gracias, María, es un placer escribir para gente que te endiende.
EliminarBesos