No te pido que me oigas,
no quiero pensar que estás pendiente
de cuanto digo y cuanto hago,
de aquello cuanto declaro;
no te pido que aparentes prestar atención
a todo aquello que pronuncio,
ni siquiera te pido que me estés mirando
en lugar de tener la vista obnubilada
en la lejanía del paisaje. Es igual.
Lo que te pido es que me escuches,
que me atiendas queriendo
hacer hilatura conmigo,
que captes el sentido profundo
de mis inflexiones de voz;
porque no es igual oír que escuchar.
Cuando me oyes,
es como un viento que todo lo aleja
al igual que levanta del suelo las hojas secas
y las mueve a capricho y sin voluntad
ni resistencia. En cambio,
cuando me escuchas,
es como una brisa fresca que todo lo traduce,
anida en ti con vocación de ponerlo por obra
y se instala en tu corazón
con intención de permanencia.
Por eso, sólo por eso,
no te pido que me oigas; ¡escúchame!
Y que gran diferencia hay entre oír y escuchar. Un besazo.
ResponderEliminarMe alegro que así lo aprecies.
EliminarBesos.
¡ESCUCHAME !! me encantó. ¿ Cuántas personas te escuchan verdaderamente ? La mayoría oye como quien oye llover. Es cuestión de separar la paja del trigo Francisco. Y descubrir a quien te ESCUCHA:
ResponderEliminarMuchos besos murmurados bajito.
Tú, María del Carmen, me escuchas (lees) con los cincos sentidos.
EliminarBesos.
El saber escuchar, es decir, prestar atención más allá de solamente percibir palabras y sonidos, es la habilidad más importante que puede uno aprender para ser más efectivo y sostener relaciones estrechas y significativas.
ResponderEliminarPrecioso, Francisco!!!
Cariños...
Lo dices muy bien, es una habilidad y por tanto se aprende ejercitándose.
EliminarBesos.
Pareciera que fuera lo mismo: escuchar que oir, pero en realidad nada tienen que ver, porque oir puedes estar oyendo sin prestar atención, mirando a otro lugar y estar pensando en las musarallas, en cambio, prestar atención requiere concentración, dedicación plena y absoluta para escuchar, para ver, para oir, para sentir, para percibir, para ponerse en el lugar del otro, para tener los cinco sentidos puestos en todo lo que se está escuchando.
ResponderEliminarPreciosos versos, Francisco.
Un beso.
Ne hacéis feliz porque veo que todos estáis de acuerdo conmigo. Yo, María, te escucho (leo) tus versos con suma atención.
EliminarBesos.
La mayoría te oyen pero no escuchan y cuando te escuchan no quieren oír.
ResponderEliminarMe gusta lo que dices en tu poesía.
Un abrazo.
Y a mí me gusta tu respuesta, Marinela.
EliminarBesos.
Por que escuchar no es lo mismo que oír... Y muy pocos tienen esa justa capacidad de escuchar como se debiera...Con el alma. :)
ResponderEliminarUn poema, con un trazo muy profundo.
Abrazos desde mi azul mar, :)
Un poema profundo como tu mirada, Ángeles.
EliminarBesos.
Por desgracias cuantos hay hoy que oyen pero no escuchan...y encima nos gobierna... que desgracia la nuestra...
ResponderEliminarUn saludo.
Muy bueno ese viraje, esa aplicación práctica.
EliminarUn abrazo.
Hola, Francisco:
ResponderEliminarDecía Cantinflas refriéndose a los políticos: "Lo importante no es que nos oigan, lo importante es que nos escuchen y nos hagan caso".
Un abrazo.
Si no nos escuchan, Rafael, como para que nos hagan caso...
EliminarUn abrazo.
Besos azules ...
ResponderEliminarNadie besa como tú, Mariloli.
EliminarBesos.
Oír, oímos siempre; pero escuchar... pocas veces, porque ello conlleva atender al otro e implicarse de alguna forma en sus palabras. ¡Y qué poco nos "escuchan" los que mandan; aunque gritemos!
ResponderEliminarUn saludo y feliz domingo.
...y encima nos acusan de terrorismo o nazismo.
EliminarUn abrazo.
Hola Francisco, cuanta razón que tiene el poma, no es lo mismo escuchar que oír, hoy en día es lo que hace la mayoría de la gente, que oye pero no escucha, es como si se tuviera miedo a escuchar y sentir de verdad lo que te están diciendo, ya que el que escucha esta viendo esas palabras que salen del alma del contrario y que gratificante es cuando lo hacen.
ResponderEliminarBesos.
Pero resulta que la escucha lleva implícito el compromiso, y eso...
EliminarBesos.
Una de las causas por las que así nos luce el pelo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Por eso cada día vamos teniendo menos pelo, para lo que nos sirve...
EliminarUn abrazo.
Aún hay, igual que "sino" y "si no", quien no distingue el significado de oír y escuchar.
ResponderEliminarUn abrazo Francisco.
No lo distingue o no le interesa aplicarse a ello. Tú sí me escuchas, Elena.
EliminarBesos.
Cierto que no es lo mismo oir que escuchar, para lo primero no se necesita nada, más para escuchar tenemos que implicar nuestros sentido y corazón. Tu poema es muy descriptivo pero creo quese lo puedes pedir a unas personas generalmente con nombre.
ResponderEliminarBss
Muy aguda, señora mía.
EliminarBesos, Katy.
Que bien nos aclaras la diferencia entre oir y escuchar.
ResponderEliminarque poco se escucha en estos días que de tanto se habla.
Un fuerte abrazo.
Lo mismo que a la lluvia no le damos respuesta cuando la oímos, así también cuando oímos lo que no nos interesa.
EliminarUn fuerte abrazo.
Nos dejaste un grito callado y esperanzador...Te escuchamos de alma a alma,Francisco...Y así debemos hacerlo con todos.
ResponderEliminarMi felicitación por la magia y grandeza de tus letras.
Mi abrazo grande y...seguimos escuchando...
M.Jesús
Haces de cada respuesta un nuevo poema, María Jesús. ¿Te he dicho que te admiro?
EliminarBesos.
Buena entrada primo, porque siempre se ha hecho la diferencia entre escuchar y oir. A todos nos ha ocurrido algo parecido... se puede oír y no escuchar... se puede leer y no entender... Todo es tan relativo... tenemos que poner más voluntad!!!! Besos mil.
ResponderEliminarLo tuyo, Prima no lo tomo en consideración; todo el mundo sabe que la familia no sirve como testigo.
EliminarBesos.
Claro que te escucho, tú lo sabes muy bien pero estas muy lejos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Lo sé muy bien, mi muy querida Chelo.
EliminarBesos.
Te escuchamos, Paco, sigue hablando que te escuchamos atentamente. Espero que ya estés repuesto del todo. Un abrazo desde mi mejana
ResponderEliminarGracias a Dios sí, Felipe. Hoy hemos celebrado el cumpleaños de mi nieto el mayor, aunque es mañana, y he comido con normalidad. Gracias por esa escucha que me consta.
EliminarUn fuerte abrazo.
Hola Francisco ! un Poema perfecto para que nos quede claro que no es lo mismo oír que escuchar , oír lo hacemos casi todos pero escuchar... Cuando escuchamos , ponemos atención , corazón y vida y nos sirve para avanzar y aprender . Oír es como bien tu lo describes o comparas , como un " viento que todo lo aleja" . Me ha gustado mucho . Yo te escucho, Francisco y me gusta hacerlo.
ResponderEliminarUn abrazo
Yo estoy encantado de recibirte en mi casa, Charo. Eres una persona sensible y especial.
EliminarBesos.
A veces puedo estar distante
pero nunca ausente,
puedo no escribirte,
pero jamás olvidarte...
y cuando me necesites, puedo
no estar cerca, pero jamás abandonarte...
porque estas en mi corazón!!
Hoy me encuentro celebrando,
el 5º aniversario del nacimiento
del blog de La gata coqueta
y sin pararme a pensar
en mi torpe atrevimiento...
...al pasar sin avisar,
para entregarte la invitación a la celebración,
que de mano me harías sentir muy feliz brindando a mi lado.
¡¡Gracias por asistir a la que desde siempre ha sido tu casa!!
Un abrazo desde el ❤ y con el ❤
Feliz domingo!!
Atte.
María Del Carmen
Celebro contigo ese quinto aniversario; pero celebro más que goces de buen estado de salud.
EliminarBesos.
Oir y escuchar, que gran diferencia.
ResponderEliminarTe escucho.
Un beso
Lo sé, Añil, me lo demuestras.
EliminarBesos.
Parece que en Primavera se siente más el deseo de la poesía, solo que en mi caso como no rengo aptitudes poéticas las busco de grandes autores, precisamente mi entrada está relacionada con un gran poeta sevillano que siempre me ha fascinado.
ResponderEliminarBesos
http://ventanadefoto.blogspot.com.es/
Pero haces unas fotografías maravillosas como yo no me siento capaz de hacer. Ninguno somos inferior al otro; cada uno tenemos nuestras aptitudes.
EliminarBesos.
Es una gran verdad que no es lo mismo,para nada lo es.
ResponderEliminarY me ha parecido fantástico ese símil con la brisa fresca anidando cuando se nos escucha.
Precioso de veras.
Seguro que leyendo esto, te escucha,te presta toda su atención.
:)
Besos.
Gracias, Marinel, porque siempre tienes una respuesta para mí.
EliminarBesos.
Hola Francisco, es cierto, no es lo mismo oír que escuchar. Oír oímos la gran mayoría de los mortales, a menos que tengamos algún problema de sordera. Escuchar, escuchamos muy pocos porque estamos sumidos en otras historias, o preferimos no escuchar para no saber ni sufrir.
ResponderEliminarMuy bonito lo que escribes.
Saludos y besos
Tú sabes que yo te escucho con mucha atención y que escuchándote he aprendido a quererte.
EliminarBesos.
Te oigo ... te escucho atentamente.. te miro .. te veo .. incluso aunque no te vea .. No dejo de mirarte querido amigo.. y tus palabras me acompañan cada día .. están presentes siempre ( tú me entiendes ) ..
ResponderEliminarMi cariño siempre y mis abrazos también para Pepita y para ti
Cómo te agradezco lo mucho que me expresas, y ese abrazo que no puedo quedarme porque tiene destinataria.
EliminarBesos.
Te escucho. Interiorizo todas tus palabras. Guardo tu postura al hilvanar los versos. Archivo la imagen que dibujaron tus letras. Te escucho...y siembras el deseo de "oírte" hablar.
ResponderEliminarBuen fin de semana, amigo mío.