Un vasto coro de
nubes densas
filtra la luz
esquiva de la mañana
como robaperas de
la ilusión;
lucidez ajada de
sombras,
bostezos, gestos
timoratos
que acaban por
vencer
la ciclópea
resistencia.
Un rapto, una inquina
de dioses
confabulados con la
noche
que acabará en
derrota
o en maquinación
desconocida.
Hace frío, siento mucho
frío.
Busco tus ojos, tu
mirada compasiva,
la caricia de tu
voz
y en especial,
añoro como nunca
la bufanda de tus
brazos
acolchando mi
cuello
hasta que el sol deshaga
la incertidumbre
gélida
en la que me
arrebato
en esta desteñida
mañana de diciembre.
Casi las 7 de una mañana heladora, me espera una cría, una pesada cartera y un colegio que la espera.
ResponderEliminarUn abrazo.
El oficio de abuelo es el mejor retribuido, Emilio.
EliminarUn abrazo.
Cuidado con los cambios de tiempo.
ResponderEliminarHoy en la meseta hace un frío que pela.
Nubarrones de momento no tenemos.
Un abrazo, Paco.
Son más temibles los nubarrones del pensamiento que los meteorológicos.
EliminarUn abrazo, Cayetano.
Maravilhoso de ler
ResponderEliminarAbraço
Muito obrigado.
EliminarUn abrazo.
Hola Francisco. Pues a tener esos brazos por bufanda que son tan cálidos y a cuidarse en este frio de la mañana.
ResponderEliminarBonita foto y bello aunque fresco poema :-)
Abrazos
Recuerda, Isa, recibir y ofrecer la bufanda de tus brazos.
EliminarAbrazos.
Hermoso poema Francisco, yo también añoro en estos fríos que comienzan esa "bufanda" que mencionas.Saludos
ResponderEliminarEs que es la más cálida y confortable, Charo.
EliminarUn abrazo.
Ya se empieza a sentir el frío y a determinadas horas, apetece estar en el calor del hogar....siempre he sido muy friolera y a determinados lugares no iría cuando hace demasiado frío.
ResponderEliminarBesos
A mí tampoco me va mucho el frío, Antonia, soy más afín a los terrenos cálidos.
EliminarBesos.
Somos naturaleza, Francisco. Nos influyen las nubes y el frío de forma rotunda y contundente. Realmente son como cíclopes que golpean el cuerpo y la mente. El sol es verdadera caricia cuando sale, como esos brazos-bufanda,que nos impulsan y estimulan.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo por tus buenas letras voluntariosas y generosas.
Para mis dolores crónicos son como un anuncio los cambios de tiempo, por eso unos brazos cálidos ayudan tanto. Gracias por tus palabras tan estimulantes.
EliminarUn fuerte abrazo.
Nubes inspiradoras de lindos versos. Saludos amigo.
ResponderEliminar¿Qué pasa con tu blg? dejo comentarios y no salen, este concretamente era sobre la metáfora de la "bufanda de los brazos"
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