El futuro tuvo comienzo
ayer;
sí ayer, cuando nos
mirábamos
extrañados y sin
reconocernos;
ayer, cuando tú y yo
éramos nombres incógnitos,
─tal vez en búsqueda─
candidez nominativa
desvinculada.
El futuro comenzó ayer,
y el pretérito imperfecto
es este vivir común
que hemos desbrozado
ambos de la mano,
tropezando y levantándonos,
cayendo y volviéndonos a
levantar.
El presente, nosotros ahora:
dos sustantivos amasados en
uno,
molturados en el paso de los
días
y con vocación de
permanencia.
Como dicen los modernos, el futuro empezó ayer y mas allá.
ResponderEliminarRebuscando en casa de mi suegra que falleció hace unos cuantos meses, encontré unos cuantos libros de gramática del mismo tipo que muestra la imagen, años 30, los tengo como oro en paño.
Un abrazo.
Yo encontré hace ya algunos años una reedición de la Enciclopedia Álvarez con la que estudié en la escuela y también la guardo como una reliquia.
EliminarUn abrazo.
Hubiere o no futuro, puede que sea imperfecto y de subjuntivo.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Seguro que sí, Cayetano, de subjuntivo y arrastrando por siempre la muleta de "que".
EliminarUn abrazo.
Dos sustantivos. Dos pronombres. Pretendiendo reposicionar el indicativo por venir. En nuestro porvenir que tiene atrapado el subjuntivo.
ResponderEliminarUn abrazo lleno de oprimismo
Con todo optimismo, dos en busca de la unidad.
EliminarUn abrazo.
* Optimismo. Contra viento y marea. No podemos claudicar.
ResponderEliminarSiempre adelante, sin entregarnos a las corrientes.
EliminarOtro abrazo.
Vivimos proyectados en el futuro y apenas disfrutamos el presente. Saludos
ResponderEliminarAsí suele ser con demasiada frecuencia, Antorelo.
EliminarSaludos.
Todos los tiempos del verbo se hacen presentes en este "ahora" que escribes, Francisco...Todos ellos tienen un mismo camino, la eternidad del sentimiento...Y todo ello gracias a ese sentimiento, amigo.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo de domingo.
Es el sentimiento el que no se deja doblegar por corrientes o modas, sino un ahora y para siempre. Mil gracias, María Jesús.
EliminarUn abrazo.
...y el verbo se hizo carne.
ResponderEliminar"La vida es la ecuación certera
que corresponde a dos tiempos sin retorno.
La vida es igual al sol del mediodía
Más las sombras del pasado." (CZP.)
Aplaudo tu poesía y abrazo dominguero, Francisco
Precioso y lírico tu comentario, Ceciely. Muchísimas gracias por tu buen gusto.
EliminarUn abrazo festivo.
Vivimos recordando el pasado y preocupados por un futuro incierto. todo eso nos impide disfrutar del presente, que es lo que tenemos seguro.
ResponderEliminarBesos
Uno se fue y el notro no tenemos garantías de que llegue. Aquí y ahora, mi agradecimiento.
EliminarBesos.
El pasado forma parte del presente de cada uno de nosotros y seguirá formando parte de nuestro futuro.
ResponderEliminarSalud.
En verdad el tiempo es una entelequia que busca la eternidad, Anna.
EliminarUn abrazo saludable.
El pasado es parte de nuestra historia y alimenta el presente.
ResponderEliminarSomos eso y mucho más.
Besos mi querido amigo.
Muchas gracias, Poeta Luján.
EliminarBesos.
El futuro comienza dada día y acaba al siguiente... gira y gira.
ResponderEliminarUn abrazo.
Como las aguas del río de Heráclito, Rafael: nada es lo mismo que fue.
EliminarUn abrazo.
Me gusta tu gramática más que la que yo estudié.
ResponderEliminarYo estudié la misma. ¿Recuerdas la Enciclopedia Álvarez? ¡Qué tiempos!
EliminarUn abrazo.