A
mi prima, la pianista María Márquez Torres
En
este atardecer dorado
y
sofocante de verano,
María
arranca al piano
la
caligrafía de un pulcro Chopin
y
subraya con pianissimos
los
jadeos y el aterciopelado
transitar
de sus ágiles dedos
haciendo
virtuosismos por el teclado.
Entorno
los ojos y veo en la mujer
a
esa niña de cinco años
enamorada
del más grandioso instrumento,
como
quien sigue una tradición familiar
que
en verdad ella estaba inaugurando.
En
sus ojos, la placidez y la voracidad
por
trasladar del atril al aire
esas
notas tan memorizadas
como
sutiles que van conformando
los
sonidos en sólida sonata.
María
suena a maestría,
a
concertista consagrada
que
jalona las notas por las salas
de
concierto de toda Europa.
En
la tarde-noche de Marbella,
María
es el centro de atención
del
encadenado de sonidos armónicos
que
evocan universos perdidos.
María
es…
María
es una bella sonata de estío.
Enhorabuena a la pianista por sus dotes musicales y por tener un primo poeta que sabe apreciar el arte y la sensibilidad allá donde se encuentren.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Muchas gracias, Cayetano, por tus dulces palabras.
EliminarUn abrazo.
Es una bella sonata de estío evocando universos soñados
ResponderEliminar🌈
Eso he pretendido, Merche, que sonara una bella sonata.
EliminarUn abrazo.
Ya me imagino a María deslizando sus dedos por el piano. Esto me recuerda unos días de hotel en Lloret de Mar en donde todas las tardes había un pianista que amenizaba la sala con sus delicadas melodías. El hombre siempre aceptaba algunas peticiones y yo aprovechaba el momento para pedir mi nocturno preferido.
ResponderEliminarBesos
Es común que en grandes hoteles haya un pianista que ameniza la estancia, pero María está lanzada a concertista internacional. Después de 50 conciertos por muchas ciudades de Europa, ahora se proyecta a América con un ciclo de conciertos por EE.UU., Méjico...
EliminarBesos.
Muy bella sonata.
ResponderEliminarAbrazo
Muchas gracias, María del Rosario.
EliminarUn abrazo.
Uno puede imaginarse las notas. Pero seguro que algún se le ocurrirá añadirle música a tu poema. ¡Todo quedará en familia! Una familia al completo. Solo falta un pintor que os haga un retrato y una escultora que plasme vuestras figuras. Gracias por compartir tus emociones.
ResponderEliminarSomos una familia común con una estrella que es María y los demás como el resto de mortales. Gracias a ti, Angalu, por tu lectura y comentario.
EliminarBesos.
¡Vaya! Ahora me doy cuenta que mi comentario quedó cojo al salir volando la palabra "día" en la segunda frase : "Pero seguro que algún día se le ocurrirá añadirle música a tu poema". Me refería, por supuesto, a María Márquez Torres, vuestra querida joya familiar.
EliminarEn sus manos lo dejo, querida Angalu, ojalá nos de un día la sorpresa.
EliminarBesos.
Vaya familia! ¿Hay en ella alguien normalito?
ResponderEliminarTodos, salvo María. Muchas gracias, Tracy, por lo mucho que dices en esa interrogación.
EliminarBesos
Bello homenaje a esa pianista, que sabe tocar las fibras del alma con sus dedos musicales...Cerca tiene la palabra y el arte de un hombre, que sabe valorarla y eternizar sus sonidos en el tiempo...
ResponderEliminarMi abrazo y mi cariño para los dos.
Muchas gracias, María Jesús, por tan bellas palabras y sinceros sentimientos. Yo también te valoro y te aprecio grandemente.
EliminarUn fuerte abrazo.
Con tus cariñosos versos dedicados a ella, es fácil contemplarla, regalándonos ese conjunto de notas que acarician el alma.
ResponderEliminarUn abrazo para dos.
Eso esperamos todos, Sara. En tanto, te dejo este saludo cariñoso y un beso anisado.
EliminarYa la estoy escuchando en YouTube! Ojalá cuando venga a México tenga la oportunidad de asistir a alguna de sus presentaciones.
ResponderEliminarBesos.
Si así sucediera, trata de llegar hasta ella: nuestra amistad franqueará las puertas.
EliminarBesos de anís.
Por supuesto que trataría de abrazarla y decirle cuanto te quiero!!!... estaré muy pendiente, de que venga a ciudad cercana o que pueda yo viajar. Pues raramente llegan hasta Chihuahua. Solo la capital o a Monterrey. Ya veremos, será lo que tenga que ser, confiemos.
EliminarSueña en que así va a suceder y seguro que se da el milagro, Sara.
EliminarBesos anisados.