Me apetecer gritar, clamar, chillar,
pero el cornetín de órdenes
ha tocado silencio
y el nudo en la glotis es
asfixia
que desata estertores
convulsivos
como de palabras atascadas
en el husillo del esófago.
Nos exigen vivir en
contramano:
trabajar, si se puede;
comer, si se puede;
vivir recortes sobre las limitaciones;
olvidar las daciones…
callar, aunque no se pueda.
Ejercito palabras silentes,
como muecas o volteretas afónicas
con las que ejercitar la
mente
en el circense más difícil
todavía.
Ellos creen que son muecas
de viejo chocho,
pero yo sé bien que no se
puede conducir
en contramano
y practico con habilidad
rotondas al volante,
para no perder la pericia
ni la pulcritud honesta.
Calláte, nene, que se te entiende todo.
ResponderEliminarUn abrazo desde Gran Canaria, Ángel y Loli
Un gran abrazo, Ángel y Loli, seguid siendo felices.
EliminarSiempre aprendo cosas de ti.
ResponderEliminarTodos aprendemos de todos, Tracy.
EliminarBesos.
Son cosas de este mundo loco.,de esta sociedad desquiciada. Al menos, la mía.
ResponderEliminartranquilízate ! no vale la pena enojarse, terminas perdiendo, te enfermas... etc etc
yo no maneji. Una a favor para mí.
Apapachos.
Me da problemas los mensajes privados por FB, así que en breve te escribo un correo.
EliminarApapachos.
Volveremos a echar mano del ingenio, como en los viejos tiempos para burlar a la censura.
ResponderEliminarUn saludo.
Los genios saben enguadianar, las modistas entallas y los censores tachar. Me has hecho recordar al maestro Buero Vallejo, tan lejos, tan arriba.
EliminarUn abrazo
Con todo... "no perder la pericia, ni la pulcritud honesta." Será posible lo imposible ¡Confía!
ResponderEliminarAbrazo fuerte.
Me das confianza, Sara, al tiempo que la he perdido en mis custodios.
EliminarUn fuerte abrazo.
Ten cuidado, dicen que no sabemos conducir en las rotondas. Un abrazo
ResponderEliminarHe procurado decir lo que se quiera entender, Felipe. Son los otros los que complementan lo que he dicho.
EliminarUn fuerte abrazo.
Después de varios días que no entro en estas paginas, por diversos motivos, voy hoy y me encuentro con tu grito silencioso pero que vaya que si se oye y también se comprende querer que se calle cuando se necesita gritar a los cuatro vientos que necesitamos respirar.......Un abrazo
ResponderEliminarEl poder siempre aspira a silenciar: recuerdo que mi padre mandaba siempre silencio en la mesa, a pesar de ser muy conversador y anterior a la televisión.
EliminarUn beso, si me lo permites.
Cuanto arte tienes compañero de letras, decir las cosas así, como las dice... tan claras y con tanta maestría. Tu grito no es silencioso, es tronador...
ResponderEliminarUn abrazo desde mi lugar de letras.
Muchas gracias, Ángeles. Me hace muy feliz este reencuentro. Mil gracias.
EliminarBesos.