No
tienes que convencerme de nada,
pues
sé que eres una entelequia,
una
pose acomodada en mi mente,
un
iluso sueño de navegantes perdidos
camino
de una Ítaca tan falsa como tú misma,
de
la que nutro mis sueños y en ellos te visualizo;
te
palpo, creo tenerte en las notas de tu cántico
angélico y
seductor. Tú me cautivas; sí, me arrebatas
a
pesar de que sólo eres una invención común
que
yo he asumido como propia,
como
también es una ficción mi misma imagen en el espejo.
No
tienes que convencerme de nada,
Sé
de tu existencia vana,
de
los pueriles embelesos con los que te cubres,
pero
me gusta cuando en cada momento
de
angustiosa zozobra
te
precede la seductora armonía de tu canto
y
te haces realidad en mis noches encalladas,
en
mis noches de deriva y naufragio.
Bellos versos, para soñar y extasiarse pero eso si, ten cuidado con el canto de las sirenas. Puede ser peligroso:-)
ResponderEliminarBss
Coincido con el comentario anterior creo que el canto de las sirenas producen algo así como un subyugamiento del que lo escucha. Bah! Algo como estar enamorado. Que bienvenido sea.
ResponderEliminarUna abrazo amigo
Hola Francisco...lindo poema...siempre es saludable soñar y tener ilusiones, así la vida es más llevadera. Un placer leerte, recibe un fuerte abrazo.
ResponderEliminar¿Cómo van a ser peligros los cantos de las sirenas? ¡Si no existen! Los cánticos si son hermosos hay que disfrutar de ellos y no hacer caso de los aguafiestas.
ResponderEliminarUn saludo desde mi mejana
Las angélicas sirenas, siempre acostadas sobre las rocas, esperando la llegada de la marea que arrulla con sus cànticos. Todos fuimos testigos de su presencia aunque fuere ficticia, paro nos subyugaban. Felicidades y un abrazo.
ResponderEliminarSiempre es bueno, en las noches de angustiosa zozobra, tener a alguien, hadas, ninfas de los bosques, sirenas,... que se hagan realidad y nos acompañen con su canto.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Sí, un ser falso, pero qué bueno que exista en nuestra mente, como el unicornio.
ResponderEliminarUn abrazo Francisco.
Hola Francisco, después de mi larga ausencia, ha sido un placer encontrarme con estos hermosos versos.
ResponderEliminarUn saludo
Lo malo de las sirenas es que devoran a los navegantes confiados. Así que cuidado con ellas.
ResponderEliminarUn saludo.
porque las fantasías son eso mismo, algo que uno sabe que puede echar mano cuando más lo desee. El riesgo ya está asumido desde el principio
ResponderEliminarbesos
Qué bonito Francisco. Yo creo en las sirenas, desde pequeño cuando leía cuentos sobre ellas, y como sigo siendo un "niño", cuando me adentro en el mar sigo buscándolas. Me ha encantado amigo, enhorabuena. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
ResponderEliminarhttp://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/
Siempre quise ser una sirenita, ahora al leer tu poema lo he sido.
ResponderEliminarSueño cumplido de una mariposa.
Mágico poema!
Besitos tiernos, Francisco. Feliz finde !!!
Sirenas, hermosas mujeres con cola de pez en lugar de piernas, es una lástima que esos seres fabulosos sean solo mitologicos y que solo existan en nuestra imaginación, son desde luego, una fuente de inspiración para que los poetas como tu les dediqueis hermosos versos, poemas y odas.
ResponderEliminarUn beso y un fuerte y callido abrazo
¿Quién o qué será tu sirena? Cada cual tenemos la nuestra... y espero que la crisis no nos la arrebate.
ResponderEliminarSaludos
Preciosa, gracias Francisco.
ResponderEliminarPreciosa Francisco, gracias por compartirla.
ResponderEliminarUna sirena no es nada sin alguien que se deje embaucar.
ResponderEliminarY algunas son buenas.
Más de una estaría cntenta de ser admirada por un poeta como tú.
Besos.
Las musas llegan a veces con cola de sirena, y otras, tan solo con la calidez de un abrazo, soñado en el despertar de algunas madrugadas.
ResponderEliminar...abrir los ojos y soñar, ésos son los sueños que haremos realidad.
Y tus musas llegaron y te inspiraron ésta cola de sirena para hacernos a todos, soñar.
Buenas noches y dulces sueños.