Dibujo
de Shamsia Hassani
Pintora
afgana
En
el seno de Shamsia late
una
vida desgajada de sí misma,
un
múltiplo de su propia esencia
que
se gesta al calor del amor
y
que a estas alturas ni el burka
tiene
recursos para esconder.
En
su entorno la nebulosa de las dudas,
las
inquietudes familiares y sociales
sumadas
a la inestabilidad
de
la radicalidad política
y
el miedo al futuro inmediato.
Por
su mente, como martilleo metálico,
una
oscura senda, un surco
con
la señal indeleble del miedo
que
la subyuga y le hace tener
por
la criatura que se gesta en sus entrañas.
Un
corazón partido de amor,
que
así se lo transmite a su criatura,
a
quien cuida en el abrazo de su regazo.
Bajo
su vestidura amplia y talar,
un
corazón que ya se está dando
y
por él sufre desde ahora y por siempre.
Miedo al futuro. Hay que pensarse dos veces traer alguien al mundo. Y no lo digo solo por las mujeres afganas.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
En este caso, los niños son tuertos en un país de niñas condenadas a la ceguera.
EliminarUn abrazo, Cayetano.
En cualquier parte del mundo es un tiempo de gran incertidumbre y polarización. No podemos señalar afuera, lo que no revisamos en lo propio. Porque ninguna sociedad se salva por ahora.
ResponderEliminarUn abrazo.
Tienes razón, aunque este caso es extremos. Por lo general, lo mismo que los peces no ven el mar, quienes vivimos un cambio de época tampoco vemos la luz del mañana. Gracias, Sara, por aportar tu visión.
EliminarUn abrazo.
Una imagen llena de sufrimiento y dolor, pobres mujeres y pobres de sus hijos que están por nacer.Tu poema me ha emocionado mucho.Saludos
ResponderEliminarGracias por esa emoción de la que hablas y me atañe, Charo.
EliminarUn abrazo.
Pobres mujeres, pobre niñas y que bien complementa tus letras el dibujo. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, Chelo. Eso he pretendido, seguir los trazos del dibujo.
EliminarUn abrazo.
Es trágico y muy doloroso sentir tanta impotencia sobre el futuro tan nefasto que espera a tantas criaturas.
ResponderEliminarTus letras reflejan el hastío de esas madres asustadas.
Un abrazo.
Muchas gracias, Jorge, por la solidaridad que encierran en tus palabras.
EliminarUn abrazo.
Que triste, pobres mujeres y mas triste si nace mujer...... Saludos amigo.
ResponderEliminarEs cierto, Sandra, la mujer nace con un estigma muy difícil de soslayar.
EliminarUn abrazo.