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| Fotografía de Escolástico Martín, "Tico" |
A todas las personas que se percataron de este silencio y hasta se preocuparon.
Caudal imaginativo,
manantial del que beben
las musas
tratando de dibujar con
palabras
las emociones del alma,
sus llagas
y sus silencios;
esos que, como latidos
cardíacos,
vienen ensartados
sin demanda e involuntariamente,
como una guinda tras su
gemela
en cesto inagotable,
como cadeneta de olas
en un mar revuelto,
tras la bonanza de días
pasado
y sus silencios.
Que descanses en compañía de familia y amigos en ese lugar que tanto aprecia y que nos han mostrado en tantas entradas.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchísimas gracias, Emilio. Gracias por esta respuesta y gracias por tu inquietud por mi estado de salud.
EliminarUn abrazo.
De vez en cuando, entre tanto ruido (esta cultura urbana nuestra se basa en él),vienen bien algunos momentos de silencio para reencontrarnos con nosotros mismos, algo imposible de lograr cuando el perrito del vecino no para de ladrar o el propio vecino te enchufa a todo gas algo de bacalao o el "despacito" ese de las narices.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco. Y ya sabes: qué descansada vida la del que huye del mundanal ruïdo, etc.
Esto es algo así como los pasos hacia atrás para lanzar un penalti, algo que no es imprescindible, pero sí necesario.
EliminarUn abrazo.
Estuve dos meses distanciado, más centrado en el cuerpo que en lo creativo. Ahora me siento mejor y de vacaciones, con todo el tiempo para la lectura y los amigos.
ResponderEliminarUn saludo afectuoso a todos y a cada uno de ellos.
Ya te sabía yo en Marbella desde el otro día, y también de las obras domésticas, y del retiro, cuasi forzoso, de estas ondas...
ResponderEliminar¡Pero usted es fuerte, caballero y resiste todos los envites!
¡Ánimo, pues!
A disfrutar de ese mar, de esa brisa, de esa compañía... ¡A disfrutar, amigo, a disfrutar!
Con todo mi cariño de siempre.
De Cantábrico a Mediterráneo, ahí van besos, abrazos y aplausos.
;)
Sólo soy mentalmente fuerte, pero siempre me rodeo de las personas idónea. Esta mañana le ha tocado a mi primo Paco y hemos logrado una gran faena que yo solo no podría.
EliminarPor otro lado, el mar, la mar, mi mar... intuyo una cierta resurrección.
Un abrazo Mediterráneo.
Me alegro que tu descanso marbelli te haga retornar al blog, pues la composición poética más o menos larga nunca la has abandonado.
ResponderEliminarUn abrazo .
Acabo de regresar a casa después de pasar varias horas con un primo y varios amigos. Lo mejor de Marbella no es aquello que difunde Turismo, sino el reencuentro con la infancia y juventud junto con los amigos.
EliminarGracias, Chelo, porque conozco el mucho interés que tienes por mí.
Un fuerte abrazo.
Con este calor me imaginaba que no tenías muchas ganas de actividad....con el mar delante tienes una fuente muy buena de inspiración, seguramente tendrás más de un poema inspirado en el lugar de vacaciones.
ResponderEliminarMe alegra saber noticias tuyas.
Besos
He estado bastante dolorido en estos dos meses, he sufrido una reforma de la cocina sin dejar de vivir en la casa y cierta fatiga creativa. Esos poemas irán llegando con el paso de los días.
EliminarBesos.
Paco! Gracias por la dedicatoria. Y que alegría más grande de ver al poeta en su oficio de nuevo, con estos versos estupendos.
ResponderEliminarEspero que regreses como nuevo y ya muy cómodo estrenando reformas de casa.
Un abrazo muy grande con mi cariño de anís.
"Espero que regreses como nuevo..." Demasiado mayor para regresar como nuevo, querida Sara, pero aquí estoy, entre otras cosas por complacerte. Mil gracias.
EliminarAbrazos y besos de anís.
Pues yo fui una, así es que gracias por la dedicatoria, pero ella no te exime de la culpa de tenernos en vilo.
ResponderEliminarTe pido perdón a ti y a cuantos se han inquietado por mí. Es cierto que se me ha juntado un poco de todo: cansancio creativo, obras en casa y mayores dificultades físicas que antes. Ahora estoy de vacaciones y también me encuentro mejor, por tanto, vuelvo por estos pagos y dispuesto a pasar lista.
EliminarUn entrañable abrazo, Tracy.
Sos absolutamente responsable del amor que te tenemos. Respiramos hondo: ya estás aquí de nuevo y podremos seguir disfrutando de tu sensibilidad exquisita, gracias. El Universo está en orden y ahí va el habitual abrazo transatlántico.
ResponderEliminarNo es mérito mío, pero me regocijo con tus palabras y tu afecto.
EliminarUn fuerte abrazo.