Fama, amada por muchos y
vilipendiada
por la mayoría, por quienes
no la alcanzan
o buscándola se estrellan
sin alcanzar
el estrellato. Merecida o
cacareada
en soporíferas horas
televisivas.
Lengua viperina.
¡Oh, Fama! “La voz pública”
que engendrada por la
Tierra,
sin padre reconocido,
te extiendes como mancha de
aceite
del me han contado o se dice
que,
sin cordura y sin límites;
la que se moviliza como el
rayo
con precipitación y eficacia
rotunda
divulgando lo adverso y
hasta
intencionadamente recala en
la calumnia.
Naces pequeña y misteriosa,
como sottovoce,
y te creces y te inflamas
y te elevas a los cielos
desde donde te irradias y
difundes.
Ágil de alas y pies,
horrenda y gigantesca,
cubierta de plumas y pérfida,
te multiplicas como las
esporas
y boca a oreja te propagas
sin límites,
sin comprobación alguna y
con despecho,
sin saber si hieres o matas.
Aquí elevamos a la fama a cualquier piltrafa o hundimos a quien la merece, es nuestra condiciones de españoles.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hay mucho indigno colmado de popularidad, Emilio.
EliminarUn abrazo.
No es fácil gestionar la fama cuando llega.
ResponderEliminarAbsolutamente, Antorelo.
EliminarUn abrazo.
Hay que tener claro, el que es digno de admirar.
ResponderEliminarNos dejamos llevar por las apariencias y no reconocemos la labor callada, de muchas personas.
Besos
Ni la fama positiva ni la otra obran justicia siempre. Por supuesto que la mala no lo hace nunca.
EliminarUn beso.
No soporto algún canal que tienen demasiadas lenguas viperinas que por dinero y fama son capaces de vender el alma de sus padres al diablo.Tengo una vecina que ve ese canal ( es su favorito) y cuando empieza a contarme el chismorreo le digo que por favor no me cuente nada que aborrezco ese canal, prohibido en mi casa, pero ella insiste hasta que le tengo que volver a repetir que no me lo cuente y entonces se calla hasta la próxima vez.Saludos
ResponderEliminarYo también paso por encima como si no existiera. Es superior a mis fuerzas.
EliminarUn abrazo.
Es tremendo esto de la fama con los jóvenes, el hechpo no es nuevo, pero se ha desbocado actualmente.
ResponderEliminarTambién me he referido a esa otra, “La voz pública”, la que corre sin fundamento destrozando a las personas y su honorabilidad con chismes sociales.
EliminarUn abrazo.
Hay tanta gente que persigue la fama.... Saludos amigo Francisco.
ResponderEliminarEs cierto, Sandra; pero es más difícil gestionarla que alcanzarla.
EliminarUn abrazo.
" Ágil de alas y pies, horrenda y gigantesca,
ResponderEliminarcubierta de plumas y pérfida,
te multiplicas como las esporas
y boca a oreja te propagas sin límites,
sin comprobación alguna y con despecho,
sin saber si hieres o matas."
Qué bien has descrito al monstruo... Muy bueno.
Pones el dedo en la llaga.
Gracias, Maite, por tu subrayado.
EliminarUn abrazo.