Hoy es martes,
llueve
con bostezo primaveral,
sin mucha convicción
aunque igualmente molesto.
Ayer tuvimos un día soleado
con algunas colgaduras
grises
de oscuros presagios:
la primavera es cambio,
pero sigo empestillado
en no cambiar
y todo me resulta extraño.
No sé cuánta lluvia
acaba por inercia en el río
y qué parte se hace fecunda
en el seno de la tierra;
los parterres sonríen
y las azoteas están
desnudas;
desde mi ventana
sólo aprecio el encierro
y la vida exterior agitada
y pasada por agua;
el jardín abraza a la lluvia
que menosprecio
y es posible que la belleza
no sea esto.
Hoy es martes,
un día más de una semana
más.
Estamos abocados a una primavera distinta por el tiempo y por nosotros mismos.
ResponderEliminarEfectivamente, son tiempos convulsos, tiempos de cambios profundos que no sabemos a dónde nos llevará.
EliminarBesos.
Dice el refranero sobre los martes: "los martes ni te cases ni te embarques". Si, es un día de la semana más pero, ya vemos es de mal augurio.
ResponderEliminarSaludos
El refranero es el cúmulo de la sabiduría popular experimentada a lo largo del tiempo, por eso es tan certera.
EliminarUn abrazo.
Aquí todavía no arrancó la lluvia, pero nubarrones grises ocupan el cielo. Va a caer.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Sotto voce: lo escribí ayer, cuando eran los síntomas quienes hablaban del cambio. No lo cuentes, Cayetano. Calla.
EliminarUn abrazo.
Francisco, siento que la lluvia no sea del agrado de todos, comprendo que en algunos sitios hace estragos y los ríos se desbordan...Aquí en el centro nos viene de maravilla para los campos y la contaminación. El ambiente se limpia y los labradores están contentos...El campo luce verde y hermoso como nunca...Bienvenida la lluvia aquí en Castilla la Mancha.
ResponderEliminarMi abrazo y mi cariño, amigo.
M.Jesús
Ya conoces lo rebelde que suele ser la voz poética y cómo vive por libre. Soy hijo de agricultor y conozco la sed de la tierra y los momentos dulce de la sementera en primavera. No me molesta la lluvia, la agradezco, aunque no todos los días digo lo mismo. Ya comprendes.
EliminarBesos manchegos.
Será porque no estamos acostumbrados a la lluvia...será porque estos cambios de tiempo me ha provocado un catarro y una garganta afónica...hoy también contemplo la calle detrás de los cristales y no me apetece salir.
ResponderEliminarBesos
Más que la lluvia son los cambios de tiempo los que me provocan alteraciones físicas a mi quebrantado estado. La pena es que se ponga el día de lluvia y sea más para pasear paraguas que para henchir la tierra.
EliminarBesos.
Hablar de martes mejor con música
ResponderEliminarhttp://nando-elperegrino.blogspot.com.es/2015/10/del-miercoles-al-martes.html
Gracias por tu regalo, Fernando.
EliminarUn abrazo.
La belleza de la lluvia, la menospreciamos en las tristezas.
ResponderEliminarMuy bello. Un gran abrazo.
Muchísimas gracias, Sara, por venir a leer y comentar.
EliminarBesos.