Paseo por la orilla,
—los pies descalzos—
un columpio de agua
de continuas embestidas
me ofrece la copa espumosa
de sal yodada,
iniciática del baile
con el que celebrar
el húmedo encuentro.
Fotografía de José Antonio Tamayo |
Llega acariciando
y se retira como escarbando el suelo
en cada una de sus unidades y partículas:
masaje y vértigo
una misma mixtura
con la que me embriago.
Ladra un perro;
a lo lejos, un vigía de mis pasos
desde algún lugar acusa mi presencia,
pero los rayos nacientes
son un tul que nubla
la panorámica media
con tornasoles bruñidos.
No estoy sólo más que en apariencia;
sé que no estoy solo,
pero el columpio de agua
—con su música de balancín—
y la coda ondulada de mis pensamientos
arrean al centauro que galopa en mi pecho
por los festones líquidos
de encajes furtivos
y van dejando en pos huellas breves
que al poco barre el borrador
de un nuevo empellón de agua marina.
Y volvemos a la atraccion del mar, curiosamente yo escribí algo hoy (en mi otro blog) también relativo al mar que tiene un gran poder sobre mi, siempre que voy a él ahuyenta mi intraquilidad y mi estres, para mi ha sido siempre la cura de muchas preocupaciones
ResponderEliminarFeliz fin de semana!!
Me alegro, Rita, coincidir contigo en la placidez del mar, fuente agitada de vida, para mí en estos momentos de placer, dicha y relax.
EliminarBesos.
Cuando leo tus poesías a la mar, se me hace más largo el tiempo que me queda para estar junto a ella.
ResponderEliminarNo es mi intención sembrar en ti la inquietud ni en nadie la envidia o la añoranza, sino aplicar al monstruo marino una mirada amable con su puntito de sal. Que en tus cercanas vacaciones saborees la dicha diaria.
EliminarBesos
¡Convídame un poquito de tu mar !! Nosotros no lo tenemos.
ResponderEliminarme encantó tu poema. ! Es precioso, como todo lo que escribes.
¡APAPACHOS !!! :)
Tú el agua dulce correntina con vocación a mar en su fluir; yo agua salobre que abre los brazos mirando al sur, esperando el dulzor de tus moléculas en el abrazo.
Eliminar¡Ven a mi fiesta, apapuchémonos!
El mar siempre ha sido cómplice de la inquietud humana pero tu poesía nos muestra la calma que puede traernos cundo sabemos como mirar.
ResponderEliminarMuy bueno!!!
Cariños....
En la mar la contradición del origen de la vida y el símbolo de lo tortuoso y la muerte. Yo, desde la orilla, le aplico la mirada amable al igual que hago con tu comentarios.
EliminarBesos cómplices.
Hola Francisco, el mar que tanta furia nos ofrece algunas veces, como es capaz de cuando vamos paseando por su orilla y empapándonos de el, como es capaz de serenarnos de esa manera tan bonita verdad?, me encanta pasear descalza por su orilla y sentir el vaivén de las olas en mis piernas:), bonito poema que nos dejas amigo, cuídate.
ResponderEliminarBesos.
En tu comentario se te ha deslizado una palabra amorosa que tanto te agradezco, Piru: cuídate tú también.
EliminarBesos.
Me gusta el mar, me gusta lejos de la playa, me gustan sus abrazos, su sabor, su color, su mirada, creo que el mar mira.
ResponderEliminarMe han gustado tus versos. Como siempre.
Abrazos
Hasta ahora me apoyé en la memoria; hoy estuve por primera vez este verano en la playa y he podido confirmar que aún tengo buena memoria. Gracias siempre, Ester.
EliminarBesos
Ahora te conozco, Ester; a mí me gustas tú, tu verbo, tu sonrisa.
ResponderEliminarBesos.
Leer tu poema ahora mismo, con el calor que hace, me ha supuesto casi como meterme en el mar.
ResponderEliminarEs un poema muy sereno, transmite paz, así como la gran admiración hacia el mar (quién no lo contempla y se maravilla).
Un abrazo.
Has dicho que eres selectiva y me regalas con tu visita y opinión. Muchas gracias, Isabel.
EliminarBesos.
Suertudo.
ResponderEliminarUn abrazo y continua dándote remojones en el agua por los dos.
Pues ánimo, Emilio, donde comen dos, comen tras.
EliminarUn abrazo.
El mar y tú en paz y armonía,
ResponderEliminarsin bravura marina.
Bello poema,es un canto de versos,
al mar salado de nuestra vida.
El mar que nos cobija en sus aguas,
el mar que nos da vida.
Un abrazo fraterno de MA.
Gracias por tu comentario versificado, MA.
EliminarBesos
Dejé un comentario anoche, pero veo que no está. Se lo habrá llevado el mar que como dices borra lo bueno y lo malo.
ResponderEliminarDisfruta y buen finde.
Bss
Esos son los misterios de la Red que son incomprensibles.
EliminarBesos
Soy de tierra adentro, quizá por ello, cada año, guardo unos días para empaparme de mar.
ResponderEliminarUn abrazo Fco.
De tierra adentro, pero con alta sensibilidad para intelectualizar la mar entera.
EliminarBesos.
Estos días He estado en un remojo continuo, pero ¡en Cáceres! Allí me tomé un para de cervecicas con tu prima. De vuelta en casa retomo mi actividad por breve tiempo. Un abrazo desde mi mejana
ResponderEliminarVaya comentario que me ha salido. Las cervezas eran un par.
Eliminar¿Tan dormida estoy que no veo el comentario que te dejé ayer? jo, pues sí que estoy dormida porque no le veo, Francisco.
ResponderEliminarUn beso.
¿Puedes mirar por favor si voló a otro lugar equivocado? quedó enganchado como spam, seguro que ahí quedó atrapado, a mí me pasa con algunos comentarios vuestros que no lo son.
ResponderEliminarNo encontré nada, María. Tampoco soy muy perito en informática, así que no he sabido encontralo.
EliminarBesos.
Lo manifestado por la profesora Lucía Prieto Borrego, “para mí la recuperación del patrimonio histórico de Marbella es una militancia", personalmente quitaría lo de Marbella y pondría España, estamos en unos momentos que el patrimonio histórico también se lo quieren llevar al huerto, no me extrañaría que en sus mentes tengan como vender la Alhambra por apartamentos, si no recuerdo mal aquel constructor llamado "El pocero" ya lo propuso.
ResponderEliminarSaludos
Te agradezco el comentario, Emilio, pero te ha salido en la entrada del día de ayer. ¡Cuántos milagros! El de María se ha perdido y el tuyo se ha cambiado de lugar.
EliminarUn abrazo.
ResponderEliminar"...Llega acariciando
y se retira como escarbando el suelo.."
seductora muy seductora,
Besos muchos ♥♥♥
Muchas gracias, Tramos. Para mí la poesía es sugerencia, insinuación, seducción.
EliminarBesos.
Al compás del chapoteo, cercano y tangible, nos vas dejando una reflexión...No estás solo, no. Dentro de nosotros llevamos la esencia de esa Providencia, que nos acompaña, nos impulsa y nos guía...Precioso poema, que nos invita a disfrutar del agua, de la naturaleza y sentir cerca la presencia espiritual, que nos llena y nos engrandece.
ResponderEliminarMi gratitud y mi abrazo inmenso por tu buen hacer, poeta y compañero de letras.
Feliz domingo.
M.Jesús
Enséñame, María Jesús, enséñame a leer, a escardar el sentido último entre los surcos que trazan las letras.
EliminarBesos.
Oh, el mar! Ese gran hacedor de ensueños y desgracias, de letra maravillosas y también trágicas. Tu inspiración siempre está en los detalles. Besos.
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