Lo oímos, pero no
escuchamos,
no queremos darnos por
enterados
y aquello que no pasa por
la mente
es nube efímera y
desdibujada,
algo así como si no
existiera.
Tardamos en aprender
que hay un camino de
regreso,
un camino sin retorno
que no paramos de transitar.
Ya desde la infancia
supimos de la caducidad
del tiempo,
del origen y el destino,
de la transitoriedad
y el billete abierto que
usaremos;
pero nos defendemos de lo
irremediable
cerrando los ojos
o nublándolos de opaca
distancia
como oración que está por
conjugarse.
Entre el inamovible ayer
y el futurible mañana,
fuera
del alcance─
la vida misma, todo su
peso, todo su fulgor:
eso que tratamos de no ver
y que ahora medito,
eso que tú despachas con
un:
¡Ya lo sabemos!
Pensamos que el billete es solo de ida porque la vuelta no está cerrada, pero Caronte anda por ahi con su barca llevándose gente todos los días. Sin embargo, muchos son los que creen que esto es para siempre y despilfarran sus recursos, su tiempo y su salud.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Así es, Cayetano, no queremos ver lo evidente.
EliminarUn abrazo.
¡¡Ya lo sabemos!!, ¿Qué sabemos?, nada.
ResponderEliminarSaludos
Pura filosofía: solo sé que no sé nada.
EliminarUn abrazo.
Tudo o que sabemos, e/ou que sabemos, ou o que julgamos saber, é zero/nada. A vida está em constante mutação. O agora nunca será igual ao logo mais.
ResponderEliminarBelo poema que nos remete para uma intensa e profunda reflexão..
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Feliz fim-de-semana.
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Pensamentos e Devaneios Poéticos
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Muchas gracias, Rykardo.
EliminarAbrazos.
Como yo siempre digo, si es que la vida es un suspiro, cuando nos queremos dar cuenta ya no estamos aquí, por eso mismo hay que disfrutar, pero la pena que a veces se hace mal uso del tiempo, no lo aprovechamos como debiéramos.
ResponderEliminarUn placer leerte, poeta.
Un abrazo.
Muchísimas gracias, María, por tu reflexión.
EliminarUn abrazo.
Desde el momento que nacemos cada día que pasa es un acercamiento a ese destino final sin retorno, lo que no me explico es cómo hay personas que viven cómo si fueran eternas.
ResponderEliminarSi la muerte es natural
al acabar el camino
¿por qué a todo mortal
le asusta el normal destino?.......
Un fracmento de uno de mis poemas sobre la muerte.Saludos
Me alegro que también hayas optado por este tema en tus preciosos versos, Charo.
EliminarUn abrazo.
Profunda reflexión...
ResponderEliminarLa muerte mirada de frente es la mayor amiga; te hace adorar la vida. Y es que, en el fondo, son hermanas "siamesas"
Te sigo leyendo...
Un fuerte, admirado y agradecido abrazo :)
Es un honor saber que andas cerca, Maite.
EliminarUn abrazo apapachado.
Viaje sencillo y en el avión más rápido.
ResponderEliminarBesos.
Bueno, el medio de locomoción no está descrito. Los clásicos hablaron de Caronte y su barca, como ha mencionado Cayetano. Que sea como tiene que ser.
EliminarBesos.
Hola Francisco, no sabemos nada, si lo supiéramos nos comportariamos de otra forma y nos cuidaríamos unos a otros.
ResponderEliminarAbrazos
Pero sabemos lo fundamental, Isa, aunque luego hacemos lo que nos parece.
EliminarUn abrazo.
Caminemos que el final aparece en algún momento. Qué bueno es encontrarnos cada tanto. Cariños
ResponderEliminarIgualmente, Rosa María, es un placer.
EliminarUn abrazo.
Y a veces hay que asumir riesgos, porque no tienes más remdio.
ResponderEliminarEstos últimos tiempos de la pandemia, he aguantado bastante con un dolor de espalda. Por fín me he ido al especialista y me ha mandado una resonancia magnética. Hoy me la han hecho, pero no he dejado de pensar...que pasaría si el que ocupó la máquina tuviera el Covid...por lo pronto, ya he pasado por la máquina y dentro de una semana tendré los resultados.
Besos
No puedes llevar más razón.
ResponderEliminarLa vida es un viaje, disfrutémoslo hasta el final.... Saludos amigo.
ResponderEliminar¡Mímate y no dejes de escribir! Está tan mal este mundo, que son precisos todos los poetas y más, todos los humoristas y los que comparten el humor de los demás, para que se extienda por el mundo y nos compensa, de la ingratitud y la injusticia. ¡Cuídate, amigo!
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