En los libros late la
vida,
crece y se manifiesta la existencia
a imitación de la vida
misma.
Los libros son la cárcel
de todo el saber,
un encierro condicionado
al pálpito
de quien lo toma en sus
manos,
lo sopesa, pasa sus dedos
por el lomo
y la portada y abre la
solapa
buscando una nueva
sorpresa
más allá de la
contraportada o la ceja.
De momento no sabe si le
llevará a Ítaca
o al mismo Tártaro. Relee
el título
y se siente atraído por la
dedicatoria.
Salta sobre la presentación
y hojea el índice;
después del cuerpo de
capítulos
examina la bibliografía y
evita el epílogo:
tan solo sabe que necesita
hacerse con él.
En los libros la
innovación y las tradiciones,
todo el saber y el sabor
del conocimiento,
de la historia y los descubrimientos,
del amor,
la épica, las gestas, la
ambición y el poder,
las fuerzas de la
naturaleza, el miedo,
la traición, la política,
las conquistas,
las derrotas, el heroísmo,
el lirismo,
las bajas pasiones, la
soledad, la esperanza…
En los libros: la vida más
allá de la vida.
Cuando dices que los libros son la cárcel del saber, me he puesto a pensar, no se si es buena metáfora, en las cárceles no se puede salir de ellas, muy al contrario de lo que se pretende con el libro donde el conocimiento debe de fluir con toda liberta de quien lo quiere usar, lo que si es cierto es que estoy de acuerdo con el resto, los libros son la vida y más allá.
ResponderEliminarUn abrazo.
Podría darte varias razones para que aceptaras como válida la metáfora cárcel, pero entonces estaría faltando como autor a la libertad de un lector asiduo, cosa que no es abundante y debo mimar. Gracias, Emilio.
EliminarUn abrazo.
Gracias Francisco por quererme mimar, pero de verdad te digo que me gustaría conocer esas razones y ya se que como lector tengo la libertad de interpretar las cosas a mi manera, todos tenemos un punto de vista diferente, pero siempre es bueno que con respeto conozcamos todos los puntos de vista, eso también es conocimiento.
EliminarUn abrazo.
Todo está en los libros. Bonito homenaje a la lectura.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Muchas gracias, Cayetano.
EliminarUn abrazo.
La sabiduría está en los libros y siempre ha sido fuente del saber...ahora cada vez se lee menos y así nos va.
ResponderEliminarBesos
Una de mis contrariedades con las redes sociales es precisamente que se come mucho tiempo del que uno dispone para otras actividades como la lectura.
EliminarBesos.
Un universo entero.
ResponderEliminarBesos.
Y todo el conocimiento y la sabiduría.
EliminarUn beso azul, Azzul.
Que sería de nuestra vida sin la sabiduría, conocimientos y aconteceres de los libros? Los libros nos abren sus puertas para que nos adentremos en ellos y vivamos experiencias maravillosas con sus historias y por si fuera poco nos ayudan a salir de nuestra ignorancia enseñándonos todo lo que queramos aprender.Saludos
ResponderEliminarPues seríamos tabla rasa que arrancaríamos de cero, y tendríamos que inventar la rueda, la polea, el polipasto... Hoy somos gracias al conocimiento acumulado en los libros.
EliminarUn abrazo.
Qué bien has descrito en la tercera estrofa, lo que se siente al entrar en una librería y ves un libro que te llama la atención.
ResponderEliminarUn beso grande.
Muchas gracias, preciosura cordobesa.
EliminarUn beso.
Yo espero que nunca desaparezcan los libros en papel, un libro es la mejor compañía...... Saludos amigo.
ResponderEliminarSeguramente no desaparecerán, pero el futuro siempre tiene mucho que decir de la evolución humana.
EliminarUn abrazo.
Hola Francisco, así es, los libros tienen muchos sentimientos dentro convertidos en palabras, tantos conocimientos que al leerlos nos metemos en ellos y saboreamos las palabras, el olor de las hojas. Si se escribe un libro y se "encarcela" nadie sabrá el contenido ni podrá soñar con la historia que el autor quiso compartir. Incluso a veces tenemos encarcelado el corazón por no sacar al exterior, expresar con palabras escritas o habladas lo que tanto daño nos hace. Un libro puede tener encarcelado montones de metáforas para poder navegar en ellas.
ResponderEliminarAbrazos
Si, en los libros está el alma del autor y su hilo al universo, por tanto está el más allá, que también descubrimos. Muy bueno, Francisco.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable por tu constancia y amor a las letras.